El Ministerio de Economía colocó deuda por $500.000 millones en Boncer (atados a la inflación) que vencen en febrero de 2025. Así lo hizo en la segunda licitación de deuda en pesos del mes, mediante la cual Luis Caputo busca que la deuda del BCRA -cuyas tasas en pases son negativas- pase a manos del Tesoro. El gobierno recibió 471 ofertas por un valor nominal de $1,57 billones, por lo que adjudicó apenas un tercio de lo ofrecido.
El ministerio informó oficialmente el precio de corte de la operación de $2.915,88 por cada $1.000 nominales, antes de iniciar la ronda. La tasa de interés es -21,72% (negativa contra la inflación) en el rendimiento semestral anualizado, por lo que “la licuadora” de lo que eran las Leliqs (ya no se licitan) y la cobertura ante peores alternativas (los pases pagan tasas del 108% anual) dejan en evidencia que -salvo que la inflación se desplome- es el aumento de precios lo que hace parte del trabajo más pesado con la “bomba” financiera heredada por la administración Milei.
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