El Fondo Monetario Internacional (FMI) consideró que el Gobierno argentino debe reforzar la asistencia social para evitar que el ajuste fiscal "recaiga desproporcionadamente" sobre salarios, jubilaciones y el segmento más pobre de la población.
La portavoz del organismo multilateral de crédito resaltó los "progresos" del programa económico, pero advirtió por las consecuencias sociales del ajuste.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) consideró que el Gobierno argentino debe reforzar la asistencia social para evitar que el ajuste fiscal "recaiga desproporcionadamente" sobre salarios, jubilaciones y el segmento más pobre de la población.
Así lo indicó este jueves la portavoz el organismo, Julie Kozack, para quien en la Argentina "ha habido progreso pero el camino es desafiante, requiere medidas rápidas de políticas públicas".
"El esfuerzo para proteger a los más vulnerables es un pilar fundamental del programa para evitar que el peso del ajuste no caiga desproporcionadamente sobre las familias pobres y trabajadoras", evaluó la funcionaria, en conferencia de prensa desde Washington.
Kozack consideró además que "la consolidación fiscal fuerte, el freno a la emisión monetaria y la política cambiaria están dando resultados, con la inflación empezando a bajar".
"¿Por qué esto es importante? Porque la inflación es un impuesto sobre los pobres. Dada la delicada situación social, junto con las ya altas tasas de pobreza en Argentina, será importante asegurar asistencia social adicional y preservar el valor real de las pensiones", enfatizó.
Además, resaltó que en el país "se están haciendo buenos progresos, pero el camino hacia la estabilización será difícil y eso requiere una aplicación firme de las políticas, una política ágil y una formulación de políticas ágiles".
"Se está implementando un ambicioso plan de estabilización para corregir los graves retrasos de las políticas en los últimos trimestres de 2023", dijo la portavoz del Fondo Monetario.
Y aseguró que "para volver a encarrilar el programa, el plan se centra en el establecimiento de un ancla fiscal fuerte, junto con políticas para reducir la inflación de manera duradera, reconstruir las reservas y abordar las distorsiones, así como los impedimentos de larga data para el crecimiento".
Sobre un eventual nuevo programa entre la Argentina y el FMI, Kozack no dio precisiones: "en este momento, nuestro enfoque sigue siendo apoyar las políticas que apuntan a restablecer la estabilidad macroeconómica en Argentina. Es prematuro discutir las modalidades exactas y precisas del programa".