El ministro de Economía, Luis Caputo y el presidente del Banco Central (BCRA), Santiago Bausili, anunciaron la "segunda etapa del plan de estabilización". Empezarán a negociar con los bancos para entregarles una Letra de Regulación Monetaria, con lo que el deudor sería el Tesoro y el BCRA -que ya no imprime pesos para financiar el presidente- dejaría de emitir para pagar intereses de pasivos remunerados.
"No nos hemos enamorado del cepo; nos enamoramos del orden macro", ironizó Caputo. Dijo que "la tercera etapa" que desregula el mercado cambiario llegará -no dio plazos- cuando no genere riesgos de inflación, salto del tipo de cambio o más desempleo.
"Vamos a salir del cepo cuando estén dadas las condiciones" y "no es cierto" que el FMI haya pedido devaluar, insistió el ministro, quien ratificó el dólar 80/20 para el campo y el crawling peg el 2% mensual.
"En la primera etapa se cerró la canilla de la emisión de dinero por déficit fiscal, algo de lo que se abusó en el gobierno pasado y que generó este desbalance y esta inflación que hemos y estamos viendo. En esta segunda etapa estamos cerrando el grifo del segundo canal de emisión que son los intereses que el Banco Central paga por los pasivos remunerados", explicó el ministro.
"Esto lo estamos haciendo porque queremos dar mayor certidumbre y solidez aun al programa económico para que de alguna manera deje de haber ansiedad con respecto a cuándo va ser la salida del cepo cambiario". Agregó: "Para nosotros la salida del cepo es una tercera etapa que va a ser una etapa de crecimiento y de salida del cepo. No hemos fijado una fecha sino parámetros que implican orden macroeconómico porque cuando hagamos esto estemos lo más seguros posible que no va a generar ningún sobresalto en la gente. ¿Qué quiere decir sobresalto? Alguna potencial suba del dólar que genera inflación y mayor desempleo. Esto nos va a permitir profundizar el proceso de desinflación y de esa manera darnos el tiempo que consideremos necesario para salir de las restricciones cambiarias cuando las condiciones macroeconómicas estén dadas".
Bausili señaló que la Tasa de Política Monetaria la seguirá marcando el BCRA, pero deslindó en los bancos minoristas lo que pagarán a los ahorristas por sus plazos fijos. Estimó de todas maneras una tendencia hacia tasas activas, por encima de la inflación.
Por su parte Caputo expuso que "no nos ponemos una meta de tipo de cambio real". Tras afirmar que "no tiene ningún sentido devaluar", aclaró que "la forma de lograr competitividad es bajando los impuestos" en un 90%, cifra que no hace referencia a la carga fiscal sino a la cantidad de gravámenes que existen en el país. La baja del impuesto País se producirá "entre agosto y septiembre".
El ministro aclaró que no se ha iniciado la negociación de un nuevo acuerdo con el FMI, pero aclaró que este nuevo esquema será parte de la propuesta argentina al organismo. También sostuvo que lo que falta actualizar de tarifas se irá manejando en los márgenes entre "el equilibrio fiscal y el bolsillo de la gente".
En cuanto a la acumulación de reservas del BCRA, las autoridades señalaron que la "estacionalidad" se vio alterada por las inundaciones en Brasil, por lo que Argentina liquidó más granos en mayo y menos este mes, a lo que se sumó más frío (se adelantaron importaciones de gas) que alteraron la ecuación dentro de lo previsto en el programa que -según prevén- volverá a equilibrar la dinámica en los tres últimos meses del año. En cualquier caso, descartaron corridas en tanto existe equilibrio macroeconómico.