De acuerdo con el Monitor de ajuste del gasto, que elabora la consultora Analytica, en la cuarta semana de enero se produjo una baja del 26,2 por ciento real en Argentina, respecto de igual período de 2022.
El rubro que mantuvo un importante crecimiento fue Subsidios que mantuvo un incremento real del 9 por ciento en el cierre del primer mes del año.
De acuerdo con el Monitor de ajuste del gasto, que elabora la consultora Analytica, en la cuarta semana de enero se produjo una baja del 26,2 por ciento real en Argentina, respecto de igual período de 2022.
La reducción de las erogaciones fue de 33,7 por ciento si se compara con la última semana de diciembre, período en el que los pagos del Estado son estacionalmente mas altos debido a los aguinaldos.
"La caída respecto del mes pasado es generalizada, debido a la estacionalidad del gasto en diciembre. En términos interanuales, el aumento en las jubilaciones y pensiones obedece a una variación real del haber mínimo de 3,7 por ciento respecto de enero de 2022", señaló la consultora.
El rubro que mantuvo un importante crecimiento fue Subsidios que mantuvo un incremento real del 9 por ciento en el cierre del primer mes del año.
En tanto, la consultora que dirige el economista Ricardo Delgado señala en su último reporte que las erogaciones en jubilaciones y el PAMI crecieron 4 por ciento real interanual en la última semana de enero, lo mismo que los gastos de personal, que crecieron 1,4 por ciento.
En cambio, el rubro Obra Pública cayó 75 por ciento, seguido por Asignaciones Familiares, con el 48 por ciento; y los Programas Sociales, con el 65 por ciento.
También se registraron bajas en Transferencias a las Provincias, con el 43,7 por ciento y Bienes y Servicios, con el 66 por ciento.
En 2023, de acuerdo con el programa que la Argentina tiene vigente con el Fondo Monetario Internacional (FMI) el déficit primario debe bajar al 1,9 por ciento desde el 2,4 por ciento que registró en 2022.
En 2023, de acuerdo con el programa que la Argentina tiene vigente con el Fondo Monetario Internacional (FMI) el déficit primario debe bajar al 1,9 por ciento desde el 2,4 por ciento que registró en 2022.
La última vez que se había tomado la decisión de ampliar las denominaciones de los billetes había sido en noviembre de 2017 cuando el de $1.000 vio la luz. En aquel entonces el mismo equivalía a 52 dólares y nació en respuesta a un proceso inflacionario que empujó al gobierno de Mauricio Macri a crear otras denominaciones desde su asunción: el de $200 y el de $500.