Bullrich propone cambios a la ley de Seguridad Interior y Defensa para combatir la violencia y el narcotráfico
Impulsará la sanción de una nueva normativa, con el fin de recuperar para el Estado zonas que considera hoy están bajo el dominio de los comerciantes de drogas ilegales. Sus aspiraciones presidenciales y el armado político en Santa Fe.
"Uno ve en Argentina que todo se ha corporativizado, en todos lados está el interés general parado por un interés particular", advirtió Bullrich, en diálogo con El Litoral. Crédito: Guillermo Di Salvatore.
La candidata a presidente por Juntos por el Cambio y ex ministra de Seguridad del gobierno de Mauricio Macri, Patricia Bullrich, anunció que impulsará cambios a las leyes de Seguridad Interior y Defensa Nacional para que las Fuerzas Armadas puedan involucrarse, no en la acción directa, en una lucha general contra la inseguridad y el narcotráfico. Criticó la gestión de seguridad del gobierno provincial, en particular lo hecho por Marcelo Sain, y enfatizó que de ninguna manera se bajará de la candidatura presidencial para ir a disputar la gobernación de la provincia de Buenos Aires.
Bullrich estuvo domingo y lunes en la ciudad de Santa Fe en el marco de una gira que ella calificó como de "muy novedosa" y "federal", a partir de la decisión de hacerse presente en "lugares del país adonde nunca llega un dirigente político".
La candidata a presidente informó que estuvo en Totoral y en Dean Funes, en el norte de Córdoba, "donde la gente nos decía que nunca llegaba nadie, que los dos últimos candidatos a presidente que estuvieron ahí fueron Carlos Menem y Néstor Kirchner. Y los dos fueron presidentes".
También Bullrich estuvo el domingo en San Guillermo, porque es una gira donde "vamos a conocer no solo a las personas de las ciudades capitales de las provincias, sino que vamos a visitar a las que viven en pueblos y ciudades pequeñas, gente de trabajo. Por ejemplo, estuvimos en un tambo".
La ex ministra de Seguridad del gobierno de Mauricio Macri destacó el vínculo que establece en las giras con la gente, un contacto que "no es vacío, marketinero, sino profundo. Hay tal angustia social en el país, que ven que en el futuro vamos a tener que luchar, vamos a tener que tomar coraje para asumir decisiones difíciles, para lograr que Argentina se encamine".
- ¿Qué tipo de decisiones?
-Tienen que ver con muchos intereses que están totalmente anquilosados en Argentina, a los que todo el mundo los rodea, pero nadie se anima a tocarlos. Y que ven en mí a la cabeza de un equipo que puede hacerlo.
- ¿Contra quién hay que tomar decisiones?
-Contra las corporaciones. Uno ve en Argentina que todo se ha corporativizado, en todos lados está el interés general parado por un interés particular.
-Es destacada como una de las referencias de los discursos de "mano dura". En Santa Fe uno de los principales problemas es el de la violencia y la inseguridad ¿Cómo cree que hay que encararlo?
-Cuando estuve en el ministerio de Seguridad lo encaré. Estaba José Corral de intendente, Miguel Lifschitz de gobernador y Maximiliano Pullaro de ministro de Seguridad. Y si bien nosotros pusimos mucho el ojo en Rosario, que era la forma de cortar el suministro de la droga que alimentaba a las bandas criminales, trabajamos también muchísimo en Santa Fe, en los barrios que tenían los más altos índices de violencia. Y logramos números muy importantes trabajando en conjunto. Pero el gobierno provincial destruyó todo lo hecho. A mi me llamó la atención cuando pusieron al primer ministro de Seguridad provincial (Marcelo Saín), no me gustó nada. Pensé que venían con una aplanadora a aplastar y romper todo lo que habíamos hecho, cuando lo que había que hacer era seguir por el mismo camino y cada vez iban a tener mejores resultados. Pero hicieron todo lo contrario, destruyeron todo lo hecho. Las consecuencias están a la vista. La ciudad de Santa Fe tiene un nivel de violencia que me costó entender. La estudiamos mucho con autoridades, académicos y de la Justicia para tratar de entender, desde el punto de vista sociológico, lo que estaba pasando. Porque la ciudad no tenía violencia narco, sino que tenía violencia familiar, de asaltos. Después de estudiarla comenzamos a trabajar sobre las causas de esa violencia, entiendo que había algo que había quedado de la inundación, como una frustración muy grande de los santafesinos.
-En su gestión se enviaron muchas fuerzas federales a la provincia. ¿Alcanza hoy solo con eso?
-Creo que no. Creo que nosotros vamos a tener que hacer un cambio en la ley de Defensa Nacional y en la de Seguridad Interior. Pienso que hay que hacer una ley de Seguridad Nacional en la que se entienda que el concepto por el que existen las fuerzas armadas en todo el mundo es para cuidar su soberanía. Desde mi punto de vista la soberanía tiene dos acepciones. La primera es físicamente el territorio, que nadie te invada, como es lo que pasó con Rusia en Ucrania. La segunda es una acepción que tiene que ver con que la soberanía es un territorio -conceptualmente podría ser un territorio- en donde no rige la ley, y la Constitución está sometida a una "ley superior", que es la ley del más fuerte, en este caso el narco. Esto es lo que está pasando en Rosario, donde hay jueces y políticos metidos, algunos por el negocio y otros por el miedo. "Plata o plomo", decía Pablo Emilio Escobar Gaviria. Lo que tengo pensado es que tanto en Rosario como en Santa Fe, pero sobre todo para la primera, es necesario recuperar la soberanía. Que significa que rige la Constitución Nacional, el estado de derecho, que no puede haber ninguna banda que esté por encima e imponga su propia ley, que la sociedad no esté bajo el dominio del estado narco y vuelva a estar bajo el estado legal.
"La ciudad de Santa Fe tiene un nivel de violencia que me costó entender". Crédito: Guillermo Di Salvatore
- ¿Cómo piensa "recuperar" esa soberanía?
-Lo vamos a tener que hacer no con unas Fuerzas Armadas adentro, sino que mi objetivo es con las fuerzas de seguridad federales trabajando sobre la inteligencia criminal -que es la manera en que se combaten las bandas- y las fuerzas armadas trabajando sobre el desarme de la población, en Rosario, en Santa Fe también, donde hay muchos tiroteos, mucho uso de armas. No en la acción directa, sino en la de círculos que vayan achicando y desarmando a los delincuentes.
-Criticó la gestión de Sain en el gobierno provincial y también la de Frederic en Nación. ¿Qué hicieron mal a su juicio?
-Ellos consideraron que había que ir sobre las grandes bandas y nosotros habíamos decidido ir contra las pequeñas bandas. Lo que ellos no se dan cuenta y nunca entendieron es que no importa tanto el tamaño de la banda como el poder que tiene. Comparada con el Cártel de Sinaloa, la de Los Monos es una banda chica. Ahora, para Rosario es una banda grande, importante, que maneja dinero, que puede comprar jueces, que amenaza y amedrenta, mata, somete a los que están en las cárceles. Entonces la concepción que tenía es como la de aquellos que van contra las grandes empresas porque creen que son el problema, cuando en realidad lo es la macroeconomía. Acá pasa lo mismo. Partió de una mirada equivocada y llegó a un resultado equivocado.
"Voy a ser candidata a presidenta"
- ¿Va a ser candidata a presidenta?
-Si.
-Algunos diarios el fin de semana publicaron que podía bajar a la provincia de Buenos Aires.
- A eso me lo tiran a propósito.
- ¿Quién?
-No sé, alguien. Soy nacida y vivo en la ciudad de Buenos Aires desde que nací. Nunca iría a gobernar un territorio al que no pertenezco. Si el día de mañana yo dijese que quiero ser candidata a gobernadora por la provincia de Santa Fe ¿Qué me dirían? No, porque no soy de ni viví nunca acá.
-Los últimos gobernadores de la provincia de Buenos Aires son de Capital Federal.
-Así nos fue. La falta de conocimiento sobre el territorio es muy fuerte. Pero no quiero explicar por qué no voy a ser gobernadora. He tomado una decisión de ser candidata a presidenta, estoy totalmente comprometida con la población a cambiar el país y habrá quienes me acompañen cambiando la ciudad de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y todas las provincias que podamos ganar.
- ¿Está al tanto del armado político de la provincia de Santa Fe? ¿Tiene algún candidato que prefiera sobre otro?
- Hay que tomar en cuenta el hecho de se hayan corrido las elecciones al mes de setiembre; creo que es porque ahí tiene que haber habido una orden gubernamental respecto a que vamos a estar mucho mejor ese mes. Desde mi punto de vista es importante que nosotros primeros tratemos de armar la oferta electoral más competitiva. He hablado mucho con el presidente del PRO y con todos los diputados del partido. Estamos dispuestos a armar lo que sea más importante y competitivo para ganar las elecciones de Santa Fe, así que estamos abiertos. Fuimos con muchas listas la última elección, muy divididos, aunque después nos unimos, lo que es muy bueno. Veremos quiénes son los candidatos más competitivos. Igual, yo tengo buena relación con todos.
- ¿Dentro de un frente?
-Esa es una decisión local. Las autoridades nacionales tenemos que dejar de ser los padres de las provincias. Estas tienen la suficiente madurez y cantidad de dirigentes políticos como para arreglar sus cuitas entre ellos. Nosotros solo tenemos que darles un consejo solo si lo piden. Pero sin intromisiones.