Aquellos usuarios que no se inscribieron para mantener los subsidios en luz y gas se les deberá facturar como usuarios de altos ingresos. Se les aplicará la quita total de la asistencia estatal en tramos que se concretarán en los próximos meses.
El Poder Ejecutivo determinó que los usuarios de ingresos más altos dejarán de recibir el aporte estatal en tres etapas.
Aquellos usuarios que no se inscribieron para mantener los subsidios en luz y gas se les deberá facturar como usuarios de altos ingresos. Se les aplicará la quita total de la asistencia estatal en tramos que se concretarán en los próximos meses.
En la Resolución 661/2022, publicada este lunes en el Boletín Oficial, el Gobierno Nacional, a través de la Secretaría de Energía informó que “aquellos servicios que no hayan sido identificados como pertenecientes a beneficiarios y beneficiarias de Nivel 2 o Nivel 3 en el padrón informado al Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE), al Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS), ambos organismos descentralizados actuantes en la órbita de esta Secretaría, deben recibir el tratamiento correspondiente a usuarios y usuarias residenciales de mayores ingresos (Nivel 1)”.
Para avanzar con la segmentación de tarifas, el Poder Ejecutivo determinó que los usuarios de ingresos más altos dejarán de recibir el aporte estatal en tres etapas: un 20% en septiembre y el resto en noviembre y enero próximo. La quita completa se hará efectiva a comienzos de 2023, pero el impacto en la factura comenzará a percibirse a partir de octubre. Este universo de usuarios fueron categorizados en el Nivel 1.
En el caso de la energía eléctrica unos 5,9 millones de hogares perderán el beneficio -sobre un total de 14,9 millones- y, en esta primera etapa (hasta noviembre) tendrán un aumento promedio de $850 por factura. Para el gas natural, sobre un total de 9,7 millones de hogares, unos 4,1 millones dejarán de percibir la tarifa subsidiada.
En el Nivel 2 fueron incluidas las personas de ingresos bajos. Hasta el momento se contabilizaron alrededor de 6,5 millones de inscriptos que no tendrán aumentos. En este grupo se incluyó de forma temporal a quienes reciben la tarifa social.
En tanto, los hogares de ingresos medios forman parte del Nivel 3. Son 2,5 millones que mantendrán el subsidio y sólo pagarán una tarifa más alta en caso de superar el tope de consumo de 400 kwh mensual, en el caso de la energía eléctrica.
Por la gran cantidad de usuarios que quedaron en el segmento de más ingresos, desde la Secretaría de Energía trabajaron para detectar los casos que puedan ser errores de inclusión, es decir, que quedaron encuadrados en el Nivel 1 cuando no les corresponde por su nivel de ingresos. Esto pudo ser porque no se anotaron en el registro (por desconocimiento o por falta de conectividad) o porque hubo errores en la información brindada.
Una de las medidas es que no se quitará el subsidio a los usuarios de tarifa social, aunque no se hayan inscripto en el registro. Esto será de manera temporal, ya que la decisión de las autoridades de la secretaría es que todos los usuarios registren sus datos para conservar el beneficio.
La Secretaría de Energía mantendrá abierto el Registro de Acceso a los Subsidios a la Energía (RASE) para que todos los cambios en los ingresos o en el uso del servicio (mudanzas, cambio de titularidad, reducción del patrimonio) puedan ser informados en el caso de que generen un cambio de nivel de segmentación. El objetivo buscado es que esas actualizaciones puedan hacerse en forma mensual.