Un informe de Ecolatina advirtió que las refinerías que operan en el país comenzaron a poner cupos para la venta de gasoil en estaciones de servicio. “Luego del reajuste de precios provocado por la devaluación y el posterior congelamiento, creció la brecha entre el precio minorista y el mayorista, con éste último ubicándose hasta 15% por arriba”. En la medida que la situación no encuentre una salida, el problema del abastecimiento irrumpirá en medio de la campaña presidencial. Tras la devaluación del 22%, las petroleras aumentaron 12% al surtidor y los canales mayoristas (donde suelen proveerse el campo y la industria) un 25%. Eso incrementó la demanda en los surtidores que, con cupos, no siempre llegan con gasoil hasta fin de mes.