En la región agrícola central, desde mediados de abril las labores se transformaron en una carrera contrarreloj, debido al pronóstico de nuevas precipitaciones y la experiencia anterior.
Tras las precipitaciones recientes se observa un buen avance de la cosecha granaria en toda la región agrícola central, mientras evolucionan los cultivos de segunda.
En la región agrícola central, desde mediados de abril las labores se transformaron en una carrera contrarreloj, debido al pronóstico de nuevas precipitaciones y la experiencia anterior.
Mientras se pudo trabajar con normalidad, antes de las últimas lluvias del 21 al 23 de este mes, el avance de la cosecha gruesa fue muy importante en los cultivos de maíz y soja de primera en toda el área central.
En tanto, continúan evolucionando los cultivos de segunda y maíces tardíos, aunque en algunas zonas ya comenzó incipientemente la recolección de soja de segunda.
Como casi todos los años, el maíz encabezó la cosecha gruesa 2021, pero será el último en terminar. La capacidad del cereal para mantenerse firme en el lote una vez maduro, hace que se lo deje de lado, especialmente cuando coinciden eventos de lluvias abundantes con soja de primera en madurez.
De todas maneras, el avance de cosecha del maíz de primera es un 10% inferior al de soja de primera, con un rendimiento medio de la región que se estabiliza en 100 qq/ha, con un rango de variación de 85 a 130 qq/ha.
Desde mediados de abril, las labores se transformaron en una "carrera contrarreloj", debido al pronóstico de nuevas precipitaciones y la experiencia anterior, por lo que se trabajó día y noche.
El maíz de segunda en general viene madurando muy bien y sin limitantes, sobre todo para casos puntuales de siembras bien tardías, donde el impacto de las lluvias fue positivo para el peso del grano, evitando caídas de rinde, más allá que en muchas zonas el fuerte viento posterior a las grandes lluvias provocó quebrado de plantas.
Según el último trabajo elaborado sobre testimonios de colaboradores de la publicación ABC Rural y de la Bolsa de Comercio de Rosario. mientras se cosechan los cultivos de primera, el maíz de segunda espera. "En general, viene evolucionando muy bien y sin limitantes, sobre todo para casos puntuales de siembras bien tardías, donde el impacto de las lluvias fue positivo para el peso del grano, evitando caídas de rinde", explicaron.
El informe mencionó la situación en el centro sur de Santa Fe. "En Los Cardos (departamento San Martín, 239 kilómetros de la capital provincial), el maíz y soja de primera los cultivos ya venían atrasados, y las lluvias de principios de abril lo retrasaron aún más, en relación a campañas anteriores", señaló Carlos Zarich, gerente de Agricultores Federados Argentinos (AFA) con sede en esa localidad.
"Los rendimientos en maíz están por encima de la campaña pasada que fue muy buena, con promedios de más de 100 qq/ha y picos de 130 qq/ha", destacó.
Sobre la soja de primera, Zarich consideró que "rendirá un 10% menos que la campaña anterior, con lotes de 40 qq/ha, ya que las lluvias acompañaron a fines de enero, aunque hay zonas de 25 qq/ha".
En la zona de Los Cardos, los rendimientos en maíz están por encima de la campaña pasada que fue muy buena, con promedios de más de 100 qq/ha y picos de 130 qq/ha.
En Carlos Pellegrini, estiman que en soja de primera el rinde promedio es de 42 qq/ha, con un rango de variación de 30 a 56 qq/ha. La soja de segunda está en muy buen estado, terminando su maduración y sin verse perjudicada por las lluvias.
Para maíz, el rinde medio se ubicó en 110 qq/ha y los valores fluctúan entre 90 y 130 qq/ha. Los maíces de diciembre están madurando muy bien y sin limitantes.
En El Trébol, el promedio de soja se estabilizó en 40 qq/ha con una fluctuación de 25 a 50 qq/ha. La soja de segunda se encuentra en buen estado, sin enfermedades, y ya en su estadio avanzado de madurez. Sobre el maíz se indica que arroja rindes medios de 100 qq/ha con pisos de 80 y techos de 125 qq/ha.
En Cañada Rosquin, la soja de primera tuvo un rinde medio de 42 qq/ha y techos de 51 qq/ha. La oleaginosa de segunda tiene rindes muy bajos en lotes de menor calidad de entre 3 a 14 qq/ha, y en lotes de mejor calidad entre 20 a 30 qq/ha. Las lluvias evitaron la disminución de rinde del maíz tardío.
Por último, en Cañada de Gómez, los rindes de soja promediaron los 35 qq/ha. La soja de segunda se encuentra en buenas condiciones, ya que las precipitaciones no generaron inconvenientes. En cuanto al maíz tardío, las lluvias sirvieron para recargar los perfiles.