"¿Qué pasa cuando las reservas llegan a cero?" El economista Miguel Kiguel lanzó la pregunta al auditorio que lo escuchaba en la Bolsa de Comercio de Santa Fe. Y respondió: " Si el BCRA no tiene dólares, el tipo de cambio se va a donde tiene que ir".
El titular de Econviews mostró en su exposición, en el marco de la celebración del 138° aniversario de la BCSF, un cuadro según el cual estimó que las reservas netas del BCRA suman apenas unos 1.300 millones de dólares que no alcanzan para una semana de importaciones. Descontado el oro, las reservas netas líquidas son negativas en 2.200 millones.
"Sin importaciones la economía colapsa", refirió el especialista con relación a la necesidad de insumos para la producción. Kiguel descartó que Massa vaya a conseguir US$7 mil millones como prometió al asumir como ministro de Economía. Evaluó que logrará hasta US$1500 millones de organismos multilaterales, pero no préstamos de bancos o nuevos desembolsos del FMI.
"El choque más fuerte con la realidad es en el sector externo. Es el problema a resolver para que el país vuelva a funcionar; la devaluación es mala palabra pero hace falta", sostuvo.
Recordó que el gobierno no quiere un salto devaluatorio y sugirió que "en los despachos del ministro creo que se están analizando opciones. Rubinstein entiende, se da cuenta que hay que hacer algo. El tipo de cambio está atrasado como antes de la devaluación de Sturzenegger", reseñó.
Recordó que "el año pasado hubo 50% de inflación y 20% de devaluación", lo que atrasó el tipo de cambio. Dijo que el supercepo "tiene un límite" y que con él "es muy difícil crecer: importar, conseguir repuestos, producir. Las empresas no tienen ganas de invertir sin poder mandar dividendos al exterior".
Sugirió que "la alternativa intermedia que seguramente están pensando es desdoblar el mercado. Dos tipos de cambio: uno comercial (bienes, capital) y otro financiero (el turismo y el ahorro cuestan 9 mil millones al año)".
De los 7 mil millones de dólares que Massa prometió obtener al asumir el ministerio, sólo obtendría unos 1.500millones según la estimación de Kiguel. Crédito: Pablo Aguirre
El diagnóstico
Brecha entre el dólar oficial y los financieros en el orden del 115%, cepo afectando importaciones, reservas internacionales netas en U$S 1200 millones, déficit fiscal primario cerca del 3,5% del PBI sin financiamiento, inflación entre 90 y 100% "creciendo", riesgo país en 2.400 puntos, 10 años de estancamiento con riesgo de recesión, pobreza en 40%.
Es el escenario que enfrenta la gestión de Sergio Massa, aunque Kiguel no desconoció la estructura de poder que comparte con Alberto Fernández y Cristina Kirchner, y lo que le costó nombrar a su viceministro.
Si bien reconoció que "el año que viene es electoral y probablemente deshagan parte de lo están haciendo", reconoció que hay en el nuevo ministro un "volumen político" que lo hace presumir que llegará a las elecciones de 2023 con problemas pero sin un mayor trauma.
Sostuvo que "el déficit no es explosivo pero es grande'' y que "en un país con financiamiento no haría ruido". También expuso que el compromiso del déficit primario del 2,5% asumido ante el FMI podría ser posible; aclaró que está en 3,5% y que la reducción de subsidios no aportaría más que 0,5% del PBI en recortes. También estimó "no habría más adelantos transitorios del BCRA" para financiar al Tesoro.
La disertación de Kiguel fue organizada conjuntamente por la institución anfitriona y Sancor Seguros a través de Guadalupe Broker SRL. La presentación del economista estuvo a cargo del presidente de la BCSF, escribano Martín Vigo Lamas, quien señaló que se trataba de la primera actividad vinculada con el aniversario institucional y agradeció las destacadas presencias.
"Hay cierto progreso en lo fiscal, en lo monetario no está descarrilado" pero el frente externo "ni empezó". Kiguel destacó el volumen político que puede tener Massa y Batakis no poseía, pero destacó que las tres patas del problema de la economía necesitan atención. "Si una pata se cae, se cae la mesa. Es el gran desafío de Massa y de la Argentina".
Programa "ligth" y gran potencial
"El programa con el FMI seguramente va a seguir. El Fondo prefiere un programa ligth a no tenerlo. Tiene hundidos en el país US$40 mil millones y quiere mantener el diálogo; se conforma con una baja del déficit fiscal y de financiamiento del Tesoro", evaluó Kiguel.
Pero también expuso que "Argentina tiene un gran potencial en el mundo actual" a partir de "oportunidades en el campo, la minería, en especial el litio y Vaca Muerta, haciendo el gasoducto para el resto del país y para exportar gas. Con esto se incrementan 30 a 40 mil millones de dólares más las exportaciones", sostuvo
Reseñó que "las retenciones van a seguir" mientras se busca la manera de alcanzar un "tipo de cambio más competitivo". Pero advirtió que en todos los casos, para aprovechar el potencial "se necesita un programa integral de estabilización y reformas estructurales. Un cambio de régimen", aseguró.
Refirió así a "una economía donde el sector privado invierta y el sector público controle y regule; pero el público es un sector que no es emprendedor en ningún lugar del mundo", advirtió.
Kiguel señaló que las "reformas estructurales" hacia un "nuevo régimen" demandan "aprender de los errores de Macri en 2016, que fue rápido en lo monetario y muy lento en lo fiscal. La Argentina necesita más un ajuste fiscal que monetario". Señaló que el cambio requiere shock y gradualismo, "que priorice el largo plazo y que valore equidad y transparencia".