"La mano invisible de Adam Smith es invisible porque no existe", ironizó el ministro argentino, recibiendo la réplica de Guedes: "Nosotros conocemos muy bien a los economistas que cita el ministro Guzmán, pero más de la mitad de los premios Nobel los ganaron economistas de la Universidad de Chicago", de perfil liberal.
Guzmán admitió que el Mercosur estaba "dormido" y consideró "importante despertarlo".
"Aquí se está despertando, y es importante que sea un buen despertar que avance en sobre la base de consensos, reconociendo el momento histórico de pandemia que se está viviendo", destacó.
La estrategia comercial del Mercosur divide actualmente las distintas posiciones que tienen los países sobre la estrategia comercial del bloque, en torno al Arancel Externo Común, que Brasil quiere modificar y la posibilidad de que los países firmen acuerdos bilaterales con otras naciones, que impulsa Uruguay.
Guedes disertó sobre los países que "vienen teniendo éxito" y que ampliaron el comercio, y destacó particularmente a los del sudeste asiático y a China.
Guzmán respondió que "todos los Estados Nación mencionados en la reunión como casos exitosos son países en los cuales el Estado tuvo un rol muy importante desde el diseño de políticas comerciales y económicas vistas como medios, y el diseño de políticas productivas que diesen lugar a mayor productividad, generación de trabajo, y para mantener ciertos equilibrios".
Según un comunicado del Palacio de Hacienda, Guzmán dijo estar "de acuerdo en que la integración es de fundamental importancia, pero la integración como medio y no como fin".
El ministro argentino dijo que "el sendero de desarrollo que han seguido los Estados Nación se contrapone a la idea de una mano invisible que por sí sola resuelve los problemas", según el comunicado oficial.
"Como bloque nos debemos una discusión más profunda sobre el camino propicio para la prosperidad de nuestros pueblos", señaló el ministro.
Dijo que el desarrollo debe ser para que "se beneficien todos los integrantes de nuestra población y que el crecimiento económico sea inclusivo".
Agregó que el crecimiento "debe darse en un marco de estabilidad, que permita que los procesos de desarrollo puedan tener continuidad en el tiempo".
Guzmán sostuvo que "hay un gran valor al trabajar como bloque, que requiere reconocer que hay asimetrías".
Dijo que la Argentina "reconoce las distintas situaciones que están experimentando los distintos países del bloque y por eso es importante reconocer la necesidad de la flexibilidad para lidiar con esas situaciones".
"Necesitamos una integración apropiada que entienda qué nos da y que nos quita en términos de trabajo, del crecimiento de la productividad y estabilidad macroeconómica cada una de las políticas comerciales que como bloque propiciamos", indicó.
Al admitir diferencias con los otros países, Guzmán dijo que la Argentina "busca construir equilibrios que den condiciones de mayor prosperidad e impulsen comportamientos responsables y consideramos que no avanzar y no hacer nada sería contraproducente".
"Vemos las diferencias, pero vemos que hay puntos de acuerdo, y lo importante es avanzar sobre esos puntos de acuerdo para ir construyendo un Mercosur más moderno y adaptado a la necesidad del desarrollo de nuestras naciones", señaló.
El Central suspendió a Vicentin
El Banco Central suspendió a la cerealera Vicentin para operar en el mercado de cambios y realizar pagos al exterior, y dispuso que solo podrá acceder para liquidar exportaciones pendientes por unos US$ 140 millones con el fin de regularizar su situación.
El BCRA instruyó a la AFIP-Aduana a "no cursar nuevos embarques de mercaderías con destino de exportación hasta que la empresa dé cumplimiento a las obligaciones pendientes".
Además, el Central notificará al juez concursal que lleva la causa Vicentin, Fabián Lorenzini, la totalidad de las operaciones de exportación sin liquidar a fin de que se verifique si fueron efectivamente percibidas por la firma.
"Las medidas dispuestas por el BCRA son similares a las adoptadas respecto a otro exportador (Díaz & Forti) y, en aquella oportunidad, fueron ratificadas en instancias judiciales ante la justicia federal de Rosario y ante el juez del concurso", indicaron fuentes de la autoridad monetaria.
Según la comunicación C 89.731, el Central ordenó a todas las entidades financieras que, sin previa autorización, "no deberán dar curso a operaciones de cambio correspondientes a egresos por el mercado de cambios, en su caso, a su anulación, a nombre o por cuenta de Vicentin S.A.I.C".
"Asimismo, deberán abstenerse de transmitir al exterior las operaciones que se hubieren formalizado y que a la fecha se encuentren pendientes de aviso a los corresponsales", agregó la autoridad monetaria.
Señaló además que "en atención a la suspensión adoptada, las entidades financieras cuentan con una autorización especial para realizar operaciones de compras de moneda extranjera o ingresos al mercado".
El Central adoptó la medida después de que se determinó que Vicentin debía liquidar divisas por exportaciones de unos 450 millones de dólares.
Una auditoría determinó que quedaban pendientes unos 140 millones de dólares y por esa irregularidad la entidad monetaria decidió aplicar la sanción contra la agroexportadora.
Cuando la empresa dejó de operar, le faltaba ingresar al país esos 450 millones de dólares, un volumen que vino liquidando a lo largo de 2020 pero luego bajó en forma considerable y activó las medidas de control del Central.
La entidad abrió un sumario y decidió, en forma cautelar, tomar esta medida que le impide exportar y comprar divisas y sólo puede seguir liquidando.