"El espíritu del constructor es innato. Firmamos un contrato y a la obra la queremos ejecutar; hasta podemos perder plata pero la obra se termina". Sergio Winkelmann reconoce los problemas de las empresas en un contexto de inflación o falta de insumos importados. Reconoce que el Estado santafesino está al día con sus pagos a diferencia del nacional, rescata la relación con el gremio y señala "el orgullo de dejar en manos de Verónica" la presidencia.
El titular de la Cámara Argentina de la Construcción -delegación ciudad de Santa Fe- habló con El Litoral junto a Verónica Eizmendi, una ingeniera de familia de constructores que se convierte en la primera mujer en presidir la entidad con representación en el centro-norte santafesino.
Winkelmann recordó que fue en el primer día de sus dos años de gestión que planteó la creación de la comisión de género -hoy de equidad- entre sus colegas. "Verónica en estos últimos años, ha trabajado codo a codo y ha demostrado con creces su capacidad de camarista y profesional", resaltó.
Ambos reconocieron en diálogo con El Litoral que "no se han parado obras, siguen, pero el panorama es oscuro". También apuntaron que "desgraciadamente atravesamos esta coyuntura que ojalá termine rápido", en referencia a la inflación que destruye pautas contractuales y de redeterminación de precios de obras, y el cepo a importaciones -y especulación de distribuidores- que suma problemas de acceso a los insumos.
Winkelmann atribuyó los mayores desafíos del sector a la "falta de normalización de la macro". Sostuvo las dificultades para redeterminar precios o proveerse de insumos es consecuencia de la "falta de parámetros claros". Crédito: Luis Cetraro
Certificados
"Obras nacionales no estamos licitando. Con el Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento, a principios del año pasado se firmó un convenio por $4.200 millones. Son obras en ejecución con fondeo de Nación, pero estamos comprometidos con ese tema porque no nos han pagado redeterminaciones desde agosto del año pasado. Ahora se está destrabando algo, pero hay un atraso significativo en los certificados básicos", señaló Winkelmann sobre el escenario del sector.
"Hemos mantenido reuniones con la ministra Silvina Frana y otros funcionarios, solicitando que la provincia se haga cargo de las deudas que hoy mantiene Nación. Somos nosotros quienes financiamos las obras y no hemos tenido respuestas. No se paralizaron los trabajos, pero hay algunas obras viales que se ralentizaron y otras que se iban a firmar se están revisando", sostuvo en relación a los contratos provinciales.
"En una reunión que mantuvimos con gente de Uocra, nos mencionaron que se habían parado cuatro o cinco obras de viviendas, por lo que iban a quedar sin trabajo algo más de 100 obreros. Lo que tiene financiamiento provincial venimos cobrando como hacía mucho tiempo no sucedía -aclaró- están pagando dentro de los 30 días cuando la ley o los contratos establecen pagos a 60 días".
Sobre los problemas para redeterminar precios en certificados de obras, ante los efectos de la alta inflación, señaló que "es un tema sobre el que venimos trabajando. Hace casi dos años, en noviembre, presentamos una nota a la provincia donde solicitamos retocar nueve puntos del decreto 3599; a la fecha nos aprobaron dos puntos, que se pusieron en vigencia hace poco".
Explicó que "las veces que lo hemos solicitado, nos reunimos con la ministra (Silvina Frana) que siempre estuvo predispuesta, pero no hemos tenido los resultados que queríamos. El gobierno admite que hay que hacer revisiones porque la balanza no se equilibra. Hay precios que afectan los índices como el combustible para el transporte. Ocurre algo inédito en el país: está más caro el diésel que la nafta y el precio de redeterminaciones es el del surtidor. Las empresas viales tienen depósitos propios y compran a granel. Es un gasoil 50 a 60 pesos más caro que el de surtidor.
"Ni hablar los asfaltos. Los productos derivados del petróleo y otros con materiales importados, han aumentado en dólares. Ha quedado desequilibrada la balanza y se trabaja en el tema pero es lento. Cada día que pasa nos preocupa un poco más".
La ingeniera Eizmendi añadió a eso el problema del acceso a insumos. "Sobre todo las obras eléctricas en las que todos son importados. Además de la demora desde la compra hasta que los materiales llegan, la nacionalización lleva tiempo y hasta que el insumo llega a la obra, se certifica y se cobra, se crean diferencias no previstas porque cambiaron las condiciones.
"En otro tipo de obras -por ejemplo el acueducto desde Desvío Arijón- hubo problemas con los cupos de importación. Materiales que pensábamos que llegaban en determinado tiempo, el proveedor ni siquiera podía traerlos. Los cambios en las condiciones afectan todo", explicó en referencia, por ejemplo, a válvulas o compuertas decisivas para la realización de los trabajos.
La flamante titular de Camarco y su antecesor reseñaron que existe una comisión de proveedores "y ellos mismos dicen que no saben qué precios darnos. Si hoy pedimos un presupuesto para una licitación nueva u obra en ejecución, no lo tienen".
Con altas tasas de interés e inflación, Winkelmann señaló a algunas empresas que "aceleran el ritmo para sacar la obra lo antes posible", como forma de evitar mayores perjuicios. Insistió en lo dificultoso que resulta "salir a comprar materiales si no hay precios de referencia o hay diferencias de hasta 100% entre proveedores. Hay que ser cautelosos, estar con las antenas paradas; los proveedores para cubrirse piden lo que las cosas no valen. Es racional desde algún punto de vista: dicen que no tienen precios de reposición y eso es un problema".
Con la UOCRA
"Hace 30 años que estoy en el rubro. Así como todos mis colegas, trato con la Uocra como cualquiera de ellos lo hace. Hemos estado reunidos y hay muy buena predisposición", explicó Verónica sobre la dinámica de negociación entre una empresaria y un sindicato de tradición "masculina".
"Hay colegas mujeres. Hace unos años que la Cámara trata de integrar mujeres. Primero se formó una comisión de género que ahora es de equidad. Lo que estamos tratando es de que cada vez más mujeres se involucren", señaló.
Respecto del diferencial que aporta una mujer en el mundo de la construcción, sostuvo que "en cualquier rubro, la diversidad aporta beneficios porque hay miradas distintas que pueden congeniar perfectamente. Una no excluye a la otra, es otra mirada que aporta, suma. La idea es trabajar en equipo".
Convención nacional
La Cámara Argentina de la Construcción celebrará su Convención Anual - uno de los eventos empresariales más importantes a nivel nacional- este martes bajo la premisa "Construyamos con impacto, las obras nos trascienden", en el predio ferial de la Sociedad Rural Argentina.
La convocatoria "nos propone una oportunidad para compartir e inspirarnos sobre las ideas y proyectos que se necesitan y marcan nuestro presente, pero también el futuro de las próximas generaciones", destacan los organizadores.
La Convención reúne a los principales actores del sector, "en un espacio donde empresarios, funcionarios públicos y representantes de los trabajadores pueden compartir experiencias, trabajos y avances vinculados a la industria de la construcción". El presidente, sus ministros del área y de Economía así como empresarios de distintos sectores y economistas de primera línea, estarán en el evento.