Minutos antes de las 7 se generaron incidentes, que dejaron un verdadero tendal de heridos. Hay numerosos policías y dos mozos lesionados, y tres detenidos. La batahola se trasladó luego a la vía pública, donde se escucharon disparos.
Quince policías heridos y dos mozos con lesiones de consideración -además de algunos particulares- fue el saldo que dejó una verdadera batalla campal que estalló en la mañana de este domingo, en la fiesta de los 100 años del Club Atlético Unión.
Como se sabe, simpatizantes, dirigentes y allegados a esa entidad celebraron anoche una multitudinaria cena que se desarrolló en la cancha auxiliar del club -la que da a avenida Perón- donde se levantó una gigantesca carpa.
Todo se inició alrededor de las 6.40, en momentos en que la fiesta entraba en su último tramo, cuando se generó un entredicho entre un grupo de hinchas ubicados alrededor de una mesa, y el personal del servicio gastronómico, que ya estaba levantando mesas y manteles, y retirando sus elementos de trabajo, según relataron testigos del hecho.
Pico de botella
En dicha circunstancia, los hinchas le pidieron a un mozo que les trajera cerveza, ante lo que el trabajador le respondió que dicha solicitud no era posible de ser atendida, por cuanto el servicio ya había culminado.
Lo que siguió fue un cruce verbal entre las partes, que se precipitó cuando uno de los hinchas rompió una botella contra la mesa y se la clavó al mozo -un joven de 20 años- que quedó herido, en la parte izquierda de la cintura.
Advertido el incidente, fueron los policías y detuvieron en el preciso momento al agresor. Pero cuando lo estaban retirando del lugar, recibieron una fuerte agresión de parte de los demás simpatizantes, muchos de los cuales son conocidos "personajes" de la barra brava de Unión.
También en este último episodio resultó herido el hermano del mozo atacado, un joven de 26 años.
"Rescatan" al preso
Los dos policías que habían detenido al agresor en primera instancia recibieron botellazos en sus cabezas, lo que les hizo perder la vertical y caer al suelo con lesiones cortantes en el cuero cabelludo. En esta situación, los policías perdieron al arrestado, que fue "rescatado" por otro grupo de hinchas.
Acto seguido comenzó una agresión contra los uniformados que fueron a auxiliar a sus compañeros que estaban derrumbados en el suelo, lo que derivó en una gresca generalizada.
Los heridos
En dicha batahola resultaron con heridas traumáticas y cortantes el comisario principal Hugo Molina, jefe de zona de inspección; el comisario Daniel Díaz, jefe de la seccional 4a.; el comisario Hugo Ibarra, jefe de la comisaría 23a. de Santo Tomé; el oficial principal Oscar Vilches, subjefe de Infantería; el oficial auxiliar Claudio Belloso, numerario de subcomisaría 9a.; los sargentos Raúl Oliva y Griselda Pereyra; los cabos Rosa María y Nichea Martín; y los agentes Daniel Muga, Facundo Frutos, Eduardo Fogar, Lucio Acuña y Marcelo Echagüe, todos estos efectivos de distintas dependencias que habían sido afectados al servicio.
Es de hacer notar que varios de los policías sufrieron heridas cortantes que demandaron de 7 a 8 puntos en sus cabezas.
En la calle
Luego, en las corridas en las calles se debieron efectuar disparos al aire con cartuchos antitumultos para dispersar a quienes arremetían contra el personal policial.
Resultaron con daños dos vehículos policiales -una camioneta y un auto- y varios escudos del cuerpo de Guardia de Infantería.
Hay tres personas detenidas -de 21, 22 y 33 años- todos domiciliados en nuestro medio, a quienes se les inició causa por lesiones, daño calificado y atentado y resistencia a la autoridad.