La secretaria de Derechos Humanos de la provincia, María Bressa, explicó que el nuevo programa de protección de testigos y querellantes, que se está elaborando en la órbita de los ministerios de Justicia y Derechos Humanos y Seguridad, más precisamente en la Dirección Provincial de Programas de Derechos Humanos, apunta a proteger de la manera más integral posible a los testigos y querellantes que deban actuar en los procesos que se siguen por la comisión de delitos de lesa humanidad durante la última dictadura militar. De esa manera, no sólo se cumple con el deber de protección de la vida que el Estado debe a todas las personas, sino también con el compromiso de nuestra provincia, totalmente identificada con una política activa de defensa de los derechos humanos, de colaborar en el desarrollo y la eficacia de esos juicios, que corresponden a la órbita federal.
En relación con declaraciones periodísticas que le adjudicaron a la secretaria de Derechos Humanos la protección de eventuales victimarios, Bressa manifestó: "La referencia a esa situación la efectué exclusivamente ante el hipotético caso de que alguno de los imputados afrontara una situación de riesgo debido a que trascendiera que con su relato podía conformarse una prueba de cargo de otros represores, con las limitaciones propias de las declaraciones de los imputados a esos fines".
En tal sentido, agregó que si "ese imputado de represor estuviese privado de su libertad, asegurar su integridad física es responsabilidad del establecimiento que lo aloja. Si estuviese en libertad y pidiese protección, y más allá de la respuesta estatal que merece cualquier situación de riesgo de vida, sería coherente, a los fines de facilitar la mejor calidad de los juicios que, ante ese pedido, se lo ingrese al programa referido", señaló.
"Eso enfatizó dista muchísimo de la idea de pretender contener a represores o de proteger y servir a los victimarios".
Bressa fue a explicar esta mañana a la comisión de Derechos y Garantías el funcionamiento de este sistema de protección de testigos.
Hijos
Por su parte, la agrupación Hijos Rosario hizo pública "su indignación por los dichos de la actual secretaria de Derechos Humanos quien no sólo hasta el momento no puede mostrar un solo programa que se esté ejecutando desde su Secretaría sino que encima y según las declaraciones publicadas, pone en un mismo lugar a víctimas y victimarios, actualizando una vez más la teoría de los dos demonios, estrategia discursiva que sólo tiende a encubrir el verdadero rostro del terrorismo de estado".
La entidad repudia "esa lógica con la que se quiere gestionar y planificar política de derechos humanos desde la Secretaría. No puede un funcionario que debe proteger y promover los derechos humanos, confundir la necesidades de una persona que sufrió violaciones de sus derechos como el secuestro en campos clandestinos de detención, la tortura, la desaparición de familiares, el robo de hijos, hermanos o nietos, con las vicisitudes que tienen que enfrentar los genocidas en la actualidad, que no son otras que las que le garantiza un Estado de Derecho: un juicio justo a causa de su actividad criminal en el genocidio perpetrado contra el pueblo argentino".