El Centro de Atención Familiar N° 27 de Alto Verde, que funciona en el barrio costero hace casi 30 años, debió suspender la mayoría de sus actividades, debido al crítico estado que presenta el edificio, y sólo limita su trabajo a la entrega diaria de una vianda caliente al mediodía.
Consultada por El Litoral, la directora del C.A.F., Carina Clucellas, indicó que las actuales condiciones edilicias no son seguras y existe peligro de derrumbe. Cabe señalar que el Centro de Atención Familiar está ubicado por fuera del anillo de defensa y, por ende, “el agua fue socavando el terreno y generando serios problemas en la estructura del edificio”.
“Hace más de cuatro años se inició un expediente por el estado edilicio de este lugar. Por entonces, lo que considerábamos fundamental era el apuntalamiento, pero eso nunca se hizo por la imposibilidad técnica y física que argumentaron los especialistas que vinieron a verlo justamente porque está fuera del anillo defensivo y no tenía demasiado sentido”, dijo la directora del C.A.F. Y agregó: “Pero ahora, en las condiciones en las que está, el traslado del Centro no puede postergarse más”.
Funcionamiento
El Centro de Atención Familiar N° 27 funciona hace casi 30 años en una edificación que, aunque fue remodelada, data de 1905. La construcción, alejada de las viviendas del barrio, tiene una ubicación privilegiada puesto que por el frente circulan las aguas del Riacho Santa Fe. Pese a ello, la necesidad de trasladarlo es evidente: se observan quebraduras en las paredes, desniveles en el suelo y hasta algunos desmoronamientos.
“La semana pasada estuvo la señora Marcela Dángelo, subsecretaria de la Niñez, Adolescencia y Familia del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, en el marco de una reunión con todo el personal y los padres de los chicos. Ella fue la encargada de contar detalladamente la situación por la que atraviesa el edificio y de referir que, como primera medida para mitigar el riesgo que constituye la construcción, se decidió mantener la asistencia alimentaria de los 85 niños que asisten diariamente al C.A.F. a través de una vianda hasta tanto podamos disponer de otro edificio”, dijo Carina Clucellas.
Consultada sobre la calidad de los almuerzos, ya que hasta antes de esta medida los chicos desayunaban y almorzaban en el lugar, la directora aclaró que es la misma. “Hoy se llevarán pastel de papas con queso, ensalada de repollo y dulce de batata”, ejemplificó la mujer.
Qué es un C.A.F.
En pocas palabras, Carina Clucellas refirió que la función del Centro de Atención Familiar es “asistencial y de atención a la primera infancia con actividades recreativas, lúdicas y físicas”. Además, permite la realización de “talleres para adolescentes y adultos”.
“Por la mañana, vienen chiquitos de 2 a 5 años. Por la tarde, se dan los talleres. Para nosotros, la relocalización de la institución, ya sea en un edifico propio o alguno prestado, es muy importante ya que queremos continuar con nuestro trabajo y no verlo interrumpido”, indicó la directora, que ya lleva diez años como tal.
Respecto de cómo continúa el tema, destacó el compromiso asumido desde el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia a fines de no prolongar la suspensión de la mayoría de las actividades así como el desayuno y almuerzo en la sede del C.A.F. “Las soluciones serán a corto plazo. De hecho, de no poder funcionar temporariamente en el local de alguna otra organización se contempla la posibilidad de alquilar”, indicó, acotando seguidamente que “Alto Verde tiene pocas instituciones y las que hay están colapsadas de gente”.