DyN / EFE
La presidenta de la Nación, Cristina Fernández, contó hoy que fue la ministra de Seguridad, Cecilia Rodríguez, quien el lunes 19 de enero por la madrugada le informó que había habido "un incidente" en la casa del fiscal federal Alberto Nisman.
"Me enteré que algo estaba sucediendo el lunes a las 0.30 cuando se comunica conmigo la ministra de Seguridad para informarme que había sucedido un incidente en la casa del fiscal" Nisman, y que en el baño había un cuerpo "en un charco de sangre", relató.
La jefa de Estado indicó en un mensaje transmitido por cadena nacional que "recién" le confirmaron "aproximadamente a las dos y media o tres de la mañana" que el cuerpo que estaba en el baño con un charco de sangre "era el de Nisman".
Respecto del fiscal del caso Amia, afirmó que "son absurdos" los argumentos presentados por Nisman en la denuncia impulsada en su contra por el presunto delito de "confabulación" para dar impunidad a los ciudadanos iraníes sospechados de haber participado en el atentado a la AMIA. "No hay un solo abogado, un solo doctrinario, un solo magistrado, que una vez que se conoció la denuncia que pueda creer que haya sido escrito por un abogado y mucho menos por un fiscal", indicó la mandataria en un mensaje transmitido en Cadena Nacional.
"Esa denuncia, sin ningún fundamento, ningún asidero, y la muerte del fiscal Nisman están directamente vinculadas con el antecedente del memorándum de entendimiento firmado con Irán y con el la atentado contra la AMIA", dijo. "Parece ser que en realidad nadie quisiera que se investigara a fondo o se tomara declaración a alguien" en el caso del atentado contra la mutual judía que dejó 85 muertos en 1994, dijo. "Tal vez todo lo que ha sucedido constituya el hilo de Ariadna que nos permita que nos permita dar respuesta a las 85 víctimas y sus familiares", afirmó.
Asimismo, la Presidenta expresó que "es descabellado desde lo político pensar que nuestro gobierno, que ha sido fundamental en la lucha contra el terrorismo, pueda siquiera ser sospechado" de una maniobra de encubrimiento.
Respecto de Diego Ángel Lagomarsino, quien aseguró haberle prestado su arma al fallecido fiscal Alberto Nisman, Cristina Fernández lo relacionó con "el Grupo Clarín", por ser hermano de uno de los integrantes del Estudio Jurídico Sáenz Valiente, "socio" del grupo comunicacional. "Esta persona es un feroz opositor al gobierno, pudimos ver en su Twitter las groserías, esos insultos dirigidos a la persona de la Presidenta de la República", señaló la jefa de Estado.
"Esta persona, el señor Diego Angel Lagomarsino, no sólo es un feroz opositor sino el hermano de un integrante del Estudio Sáenz Valiente, socio del Grupo Clarín", dijo la Presidenta, quien agregó que eso no se vio reflejado en ningún medio de comunicación.