Gustavo Orellano / La Capital
Firmat.— La plaza Belgrano de esta ciudad se convirtió en el lugar público más visitado a cualquier hora por el misterio en torno a una hamaca que se mueve mientras otras dos permanecen inmóviles.
La conmoción que envuelve al vecindario dio origen a las más variadas conjeturas. Mientras algunos creen que es un fenómeno sobrenatural, otros se muestran escépticos y hasta lo toman con cierta ironía. Pero nadie ignora ni se mantiene al margen del caso, que sigue despertando intrigas.
La incógnita crece y son varios los que dicen haber visto que “la hamaca se mueve sola”. Un joven registró el fenómeno con su cámara, lo cual acentuó aún más el impacto social. Las imágenes le dan verosimilitud al hecho que tiene en vilo a los firmatenses.
La plaza tiene una serie de juegos infantiles, entre ellos tres hamacas, de las cuales una se mueve como si se alguien se estuviera meciendo, detrás de la iglesia San Cayetano.
Capital que Fabián Piana, de 15 años, relató a La “el miércoles pasado la hamaca se movió sola desde las 9 hasta las 19, pero la filmación la tomé al mediodía del día siguiente”.
“Hace mucho que observo este movimiento —agregó—, pero me llamó la atención que se moviera tanto”.
Fabían asegura tener miedo a la experiencia, aunque reconoce que no sale del asombro. “Cuando le muestro las imágenes a la gente —comentó— muchos quedan boquiabiertos, más aún cuando escuchan el sonido de la grabación ambiente donde se escucha una voz de fondo que dice «salí, salí»”.
“La primera vez que lo escuché no lo podía creer y me incliné a pensar que es un fenómeno sobrenatural o paranormal, por lo que descarté que se moviera por el viento”.
El muchacho también recordó que cuando quiso sacar la primera foto con su celular “la hamaca se detuvo y al rato, cuando volví, pegaba contra la estructura de hierro”.
“La hamaca suele moverse cuando la gente no molesta alrededor de ella, pero yo no me pude acercar para tomar las imágenes. Algunos dicen que yo armé todo esto, pero tengo la filmación que documenta lo que vi”, dijo Fabián mientras su padre, Jorge, aclara: “Yo vi a mi hijo cuando la filmaba”.
“Yo lo vi, y también mucha otra gente. De las tres sólo se mueve una”, dijo Héctor Sansone, un testigo del misterioso fenómeno. “Hay que ver para creer, y yo la vi moverse sola. Había viento y esa hamaca se movía, pero las otras no”, añadió.
Hechos insólitos
El episodio del que dan cuenta los testimonios de la hamaca que “se mueve sola” en Firmat, inevitablemente hace pensar en otros que también resultan insólitos, como es el caso de la Virgen que llora. Ambas situaciones parecen no tener una respuesta racional, pero generan incertidumbre en la gente, que a veces se canaliza a través de la fe.
El municipio quiere saber qué ocurre
El intendente de Firmat, Carlos Torres, dijo que está sorprendido por el fenómeno y no descartó la posibilidad de encarar una investigación para aclarar la situación porque “no le encontramos una explicación racional”.
“No deja de ser llamativo, cuando uno ve las imágenes es realmente sorprendente”, sostuvo Torres. “La hamaca se mueve de a ratos, no en forma permanente, y hasta cuando no hay viento”, afirmó.
El intendente señaló su creencia de que “tiene que haber una explicación racional y no descartó que encaremos una investigación científica para buscarla. No obstante, hay que ser respetuosos con los que creen otra cosa”, y se mostró molesto con los que hablan sobre el espíritu de un niño porque esa familia está muy preocupada.
Torres relató que el lugar donde está la hamaca se ve lleno de gente, incluso a la noche tarde. “Hay de todo, hasta hay quien dijo que habló con la hamaca”, dijo tras descartar la posibilidad de retirarla.
Todos hacen hipótesis que se desvanecen
En un primer momento, las explicaciones de los testigos tenían que ver más con la lógica, con lo científico, y para unos la causa era la velocidad y la dirección del viento y para otros un campo magnético, etc.
Con los días todas las razones dejaron de ser convincentes y fueron perdiendo credibilidad. El viento no sopla al mecerse la hamaca y si sopla no mueve a las otras dos; la brújula de algún ocurrente vecino no enloquece y continúa marcando los puntos cardinales.
En ese marco fue creciendo la inquietud de la gente y tomando fuerza otras versiones que dan cuenta de razones alejadas de la realidad tangible, de lo explicable a través de los sentidos, más cercanas a lo paranormal.
Pero los firmatenses, incluso los que se resistían a creer en lo que estaba aconteciendo, quedaron impresionados con las imágenes que Fabián tomó con su filmadora. Las tomas fueron hechas desde unos 70 metros, y muestran claramente el movimiento de la hamaca, la cual no sólo se mece, sino que se mueve como si alguien estuviera jugando; como cuando un niño imprime distintas velocidades para alcanzar mayor o menor altura, o intenta hacer ochos con las cadenas.
Los vecinos dicen que no saben qué está sucediendo pero confirman que acontece. Cientos de personas llegan a la plaza fascinados para ver lo que a todos tiene en vilo. La mayoría se va sin concretarlo, pero vuelve con renovada esperanza. Quizás los privilegiados sean los que pasan sin ese propósito, los que lo hacen desde siempre, que poseen una sensibilidad especial. Los otros deberán conformarse con lo que comúnmente se dice “creer o reventar”.