Cuando apenas había transcurrido un minuto de comenzado el día de hoy, ingresó el primer micro de larga distancia a la flamante estación, inaugurando de esta manera el funcionamiento del nuevo espacio para llegadas y partidas de pasajeros con que cuentan, de ahora en adelante, la ciudad y la gran región.
Con aplausos y muestras de alegría, unos doscientos vecinos fueron testigos de un hecho histórico para la ciudad. Que además puso fin a una larga historia de marchas y contramarchas iniciado en el año 2002, cuando el entonces intendente Ricardo Peirone encaró el proyecto para construir una nueva Terminal, con fondos municipales, ante la desactualización funcional de la estación ubicada hasta ayer en pleno centro rafaelino.
Fue muy fuerte la polémica instalada en aquellos tiempos, entre los que atacaban la adquisición de los terrenos en ese lugar y calificaban la iniciativa de inoportuna y costosa, y quienes defendían la obra. Igualmente, los trabajos comenzaron pero, más tarde, por cuestiones derivadas de los recursos y los coletazos de la crisis económica, la administración municipal se vio obligada a detenerlos y la obra se paralizó por algunos años.
Finalmente, al culminar su anterior gestión el actual intendente, Omar Perotti, impulsó un proceso licitatorio con la modalidad de “iniciativa privada”, que tuvo como ganador al grupo francés Libertad SA, propietario de cadenas de supermercados y otros establecimientos comerciales, en sociedad con el empresario Carlos Cassinerio.
La Nueva Estación Terminal (NEO) fue construida a la vera de la Ruta Nacional 34 en su intersección con la avenida Ernesto Salva, en la zona periférica noroeste de la trama urbana y recibirá diariamente un promedio de 150 coches de media y larga distancia, número que se incrementarán notoriamente en temporada turística, y entre cinco y seis mil pasajeros.
La capacidad operativa de la NEO prevé 22 boleterías, 20 dársenas para colectivos y 12 para ómnibus especiales, playa de estacionamiento con capacidad para 90 vehículos, 7 colectivos y 10 traffics, sector destinado a la carga y descarga de equipaje, al aprovisionamiento de combustibles, limpieza y mantenimiento de baños químicos de las unidades de transportes.
Además está previsto que el edificio central brinde las prestaciones necesarias que ofrecen las terminales más modernas, por lo que se instalarán un centro comercial, un restaurante y lugares para actividades recreativas. En materia de servicios, la Nueva Terminal contará con dos cajeros automáticos y una boca de cobro de una entidad bancaria y se trabaja para lograr la instalación de oficinas para atención e informes al público de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), Aguas Santafesinas SA y la Municipalidad de Rafaela.
Centro comercial
Cabe destacar que la licitación constó de dos partes: por un lado, la culminación de la obra pública, a cambio de la transferencia de un terreno lindante (2,6 hectáreas) y, por el otro, la concesión de los servicios de la Nueva Terminal a manos del ganador por un plazo de 20 años, renovable por otros 10.
El grupo oferente, conformado por la cadena de hipermercados Libertad -controlada por el poderoso holding galo Casino- y el empresario rosarino Carlos Alberto Cassinerio, están construyendo, con un grado de avance importante, un hipermercado de 4.300 metros cuadrados de salón de ventas; tres cines con capacidad entre 120 y 150 espectadores -con una superficie cubierta de 1.500 metros cuadrados- y un espacio para más de una veintena de locales comerciales. La playa de estacionamiento tendrá capacidad para 265 autos y se estima que las obras estarán inaugurada antes de fin de año.
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Fuente: Agencia Rafaela (interior@ellitoral.com)