La noticia de la fuga fue recibida con gran preocupación por los vecinos de Coronda, cuya rutina diaria se altera cada vez que un hecho de estas características trasciende a la opinión pública. Como si fuera poco, hay quienes aseguran que muchos de los internos que se benefician con las libertades transitorias se quedan a vivir en la ciudad, generando una situación que incomoda a sus pobladores.