En la búsqueda de otros enfoques para comprender y abordar el juego y los juguetes, Ideas Casa de Cultura Infantil ofrece una alternativa diferentes. “Es un proyecto de cultura infantil, con todo lo que eso implica, que ya lleva 22 años”, explicó su titular Georgina Cánaves.
Lo que se pretende en este lugar es valorizar la actividad lúdica como un campo de construcción de valores. “Pensamos que el juguete y el juego no son inocentes y que a través de ellos el niño construye su subjetividad. Proponemos un acompañamiento en su desarrollo, incentivar la curiosidad y todos los lenguajes, del corporal al virtual”, relató Cánaves.
Para lograr este objetivo, hay premisas claras, por ejemplo evitar el “rosadismo”. “Acá no hay una zona rosada y otra celeste, no hacemos diferencia de género, ni propiciamos el juguete sexista”, señaló la titular. En este espacio, las opciones disponibles de juguetes arrancan en 10 pesos y son pensados con criterio educativo.
“En general, el juguete que no responde al mandato del mercado es austero como continente y como contenido. Entra en juego el protagonismo del que lo usa”, especificó Cánevas.