DYN / Telam
El dirigente de la comunidad islámica porteña Jorge Khalil, a quien el fallecido fiscal Alberto Nisman acusó de integrar un complot para encubrir el atentado a la AMIA, designó hoy como abogado a Fernando Burlando y se puso a disposición del juez federal Ariel Lijo, interinamente a cargo del expediente.
“Vengo a ponerme a disposición de la Justicia”, expresó en un escrito dando poder a Burlando y a Fabián Améndola como patrocinantes, los mismos abogados designados ayer por otro de los acusados, el líder de Quebracho, Fernando Esteche.
En la denuncia de Nisman, Khalil actuó como un nexo entre el gobierno argentino y su par iraní en tratativas para desincriminar a los supuestos autores de la voladura de la mutual judía, en 1994.
En un comunicado enviado ayer a un matutino, Khalil negó negó las imputaciones de Nisman aunque admitió su relación con el ex agregado cultural iraní en nuestro país, Moshen Rabbani, acusado de preparar el atentado.
El dirigente fue espiado por Nisman desde el 2007 mediante escuchas autorizadas por el juez Rodolfo Canicoba Corral, tiempo en el que tuvo contacto con otros de los acusados por el fallecido fiscal de la causa AMIA.
Los dirigentes de la comunidad judía visitaron hoy a Lijo para manifestarle su respaldo en tiempo que el juzgado, donde comenzó a analizarse cómo desgrabar más de 5 mil horas de grabaciones aportadas por Nisman para el fiscal Ramiro González, dictamine si impulsa la investigación y la propia jurisdicción de Lijo.
El secretario general de la mezquita At-Tauhid, Jorge Alejandro Khalil, negó hoy ser un ‘agente iraní‘, contra la denuncia del fallecido fiscal federal Alberto Nisman que lo definió como ‘nexo local del régimen‘ del país islámico para alcanzar el Memorándum de Entendimiento por el atentado contra la AMIA.
‘Mi relación con el sheij Mohsen Rabbani ha sido malinterpretada por el fiscal en su denuncia; se trata para mí de un guía espiritual y religioso respetable. Incluso es pública mi defensa acerca de su inocencia y de la República Islámica de Irán en el caso en que se los imputa‘, enfatizó Khalil en un comunicado. Y añadió: ‘Niego rotundamente la infamia de acusarme de ’agente iraní’‘. ‘Con la República Islámica de Irán, me une la identificación religiosa de nuestra fe islámica y un intercambio religioso y cultural para beneficio de nuestra comunidad en el país‘, sostuvo.
No obstante, manifestó que, en su ‘rol de dirigente comunitario‘, tuvo ‘relaciones con distintos actores del campo político nacional, partidos políticos, organizaciones sociales y otros‘, vínculos que caracterizó como ‘naturales en el tejido social de un país con integración‘.
Khalil se definió como ‘argentino, hijo de argentinos, de 40 años de edad, casado y padre de 3 hijos‘, a la vez que recordó que se desempeña como ‘dirigente comunitario desde hace 12 años‘. ‘Fui presidente de la Asociación Arabe Argentina Islámica en el período comprendido desde el año 2007 hasta principios del 2014 y también ejerzo el cargo de secretario general de la mezquita At-Tauhid desde el año 2002‘, concluyó.