La directora general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Margaret Chan, urgió hoy, en el Día Mundial del Medioambiente, a los gobiernos para que combatan los efectos del cambio climático ya que también afectan a la salud y aumentan los costos de la sanidad pública.
"Muchas de las enfermedades más mortales son muy sensibles a las condiciones del cambio climático", dijo Chan que recordó que algunas de ellas, como la malaria, la diarrea y la malnutrición "matan a millones de personas cada año, en su mayoría niños".
Chan agregó que "sin una acción efectiva para mitigar y adaptar el cambio climático, las condiciones empeorarán y harán más difícil y caro el control" de esas enfermedades.
Por ello, la responsable de la OMS propuso a los países "reforzar sus sistemas de salud pública, que son la primera línea de defensa contra los riesgos que para la salud supone el cambio climático".
Agregó que los gobiernos tienen que "recordar que la prevención es la cura más importante".
Chan subrayó que "muchas de las acciones necesarias para reducir el impacto del cambio climático pueden reducir la contaminación ambiental y salvar vidas".
Asimismo señaló que lograr ese objetivo requiere "un cambio en el comportamiento tanto de los individuos, como de las comunidades y los gobiernos, así como de sus políticas. Con energías más limpias y sistemas de transportes sostenibles, por ejemplo, se vería un impacto inmediato sobre la salud".
Chan señaló que "limitar el impacto del cambio climático supone, además de proteger el medioambiente, salvar vidas y hogares", y recordó que la ola de calor que vivió Europa en 2003 acabó con la vida de más de 35.000 personas y que el paso de huracán Katrina en 2005 "causó muerte y destrucción en EEUU".
Según datos de la OMS, cada año se producen en el mundo unas 60.000 muertes a consecuencia de los desastres naturales relacionados con el cambio climático, que en su mayoría son habitantes de los países en desarrollo.
EFE