El presidente del Ecuador, Rafael Correa, anunció esta noche que su gobierno no reconocerá a Federico Franco como presidente de Paraguay, tras la decisión del Senado de destituir a Fernando Lugo.
“El gobierno de Ecuador no reconocerá otro presidente de Paraguay que no sea el presidente Fernando Lugo“, recalcó Correa al regresar esta noche de Rio de Janeiro de la cumbre de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sustentable y tomar conocimiento de la votación en el Senado guaraní, según reportó la estatal agencia Andes.
El mandatario advirtió que "los países de la Unasur tienen el derecho y el deber de velar para que en base a formalismos no se esté rompiendo la legitimidad de la democracia en Paraguay“.
Ayer, el jefe de Estado había adelantado que si las fuerzas opositoras acaban con la legitimidad en el poder de su homólogo Lugo, los países de la Unasur pueden no reconocer al nuevo gobierno que proponga el congreso de ese país.
‘¿Para qué tenemos Unasur, para qué estamos en un proceso integracionista?. En estos problemas tan graves no podemos quedarnos con los brazos cruzados‘, afirmó en rueda de prensa en la base aérea de Quito.
“Lo que podemos es no reconocer al nuevo gobierno, incluso llegar al cierre de fronteras, que es lo que establece la cláusula democrática de Unasur. Internamente, ellos pueden hacer lo que quieran pero para ser reconocidos a nivel internacional depende de nuestra decisión. La cláusula democrática de Unasur nos da los instrumentos para, incluso, si se perdió la legitimidad en el ejercicio del poder (à) no reconocer ese gobierno y tomar sanciones más drásticas como, por ejemplo, el cierre de fronteras“, agregó.
La Carta Democrática de la Unasur establece que, en caso de ruptura del orden democrático, de una violación del orden constitucional o de cualquier situación que ponga en riesgo el legítimo ejercicio del poder y la vigencia de los valores o principios democráticos, los países pueden tomar determinaciones y sanciones para tratar de restablecer el orden en ese país.
“Ojalá entendamos la gravedad del asunto. Estas prácticas se están superando en América Latina‘, sostuvo Correa, quien consideró ‘muy peligroso‘ lo ocurrido hoy en Paraguay porque ‘puede sentar un precedente nefasto para la región‘ y volver ‘a los tiempos en que, con cualquier leguleyada, se sacaba a presidentes legítimamente electos“.
Télam