El Ministerio de Salud brindó recomendaciones para la prevención del dengue y el combate al mosquito Aedes Aegypti, informando a la población para que tome una serie de medidas para evitar que el mosquito se reproduzca, y capacitándola con el objetivo de fortalecer la idea de responsabilidad colectiva para prevenir esta enfermedad.
El Dengue es una enfermedad viral transmitida a los seres humanos por la picadura del mosquito llamado Aedes Aegypti (hembra infectada). Los síntomas de la enfermedad son: fiebre alta, dolor de cabeza, ardor en los ojos, náuseas, vómitos, dolores musculares y de articulaciones.
Para evitar la reproducción del mosquito es importante cambiar periódicamente el agua de jarrones y floreros; despejar canaletas; impedir acumulación de agua en interior de neumáticos; mantener boca abajo recipientes en desuso; desechar objetos inservibles capaces de acumular agua de lluvia y tapar recipientes utilizados para almacenar agua.
El Aedes Aegypti es pequeño, de color oscuro y con puntos blancos en el dorso y en las patas, el insecto se reproduce en agua limpia estancada, se desarrolla y entra en contacto con los humanos en áreas húmedas y de temperaturas cálidas.
Para prevenir el dengue es fundamental tomar precauciones para impedir la reproducción del mosquito y no poner en riesgo a toda una comunidad. Por ejemplo, se deben eliminar cacharros y envases acumulados, vaciar canaletas, baldes o desagües, limpiar patios y terrenos baldíos. Estas acciones simples sirven para erradicar su propagación.
El mosquito no viaja, quienes lo hacen son las personas enfermas, por eso si se viaja a países donde se registran casos de dengue no hay que olvidar utilizar repelente cada 3 o 4 horas, según indicación del fabricante, cubrir brazos y antebrazos con mangas largas, utilizar pantalones largos. Si al regresar la persona presenta la sintomatología antes detallada, debe consultar al médico y evitar salir del domicilio hasta ser evaluado por un profesional de la salud.
La enfermedad viral aguda puede afectar a personas de cualquier edad, siendo más susceptibles los niños y las personas mayores, y tiene un período de incubación de 3 a 14 días, y el contagio puede darse desde 2 días antes y hasta 5 o 6 días después de la aparición de la fiebre.-