Muebles, electrodomésticos y otros enseres que pertenecieron al estudiante secuestrado Cristian Schaerer fueron robados de la casa donde vivía, en el barrio Las Tejas de la capital correntina, durante la tormenta de la madrugada del jueves, informaron hoy fuentes policiales. Mesas, sillas del juego de comedor y hasta los ventiladores de techo fueron robados de la vivienda donde el joven, que sigue desaparecido, fue secuestrado hace tres años por la banda encabezada por los prófugos Rodolfo "El Ruso" Lohrman y Horacio "Potrillo" Maidana. La casa se mantiene deshabitada desde que Cristian fue raptado el 21 de septiembre de 2003, y solamente era visitada por un familiar cercano que dos veces a la semana aseaba las habitaciones y abría las ventanas para ventilar. Esta persona descubrió en horas del mediodía de ayer que la puerta de una de las cocheras había sido violentada por desconocidos que ingresaron a la propiedad "con todo el tiempo del mundo", indicaron fuentes policiales. Enterada de lo sucedido, la madre del joven desaparecido, Pompeya Gómez, habría sufrido un nuevo golpe anímico que profundizó su estado de congoja después de pasar por cuarta vez las fiestas de fin de año sin Cristian. "La señora Pompeya nos dijo que las cosas robadas no tienen valor material sino afectivo, porque eran de su hijo", reveló un policía de la comisaría séptima, que investiga el hecho. La misma fuente indicó que los ladrones habrían utilizado una camioneta para llevarse los muebles durante el aguacero que se desató sobre la ciudad en la madrugada de ayer, lo que "impidió que los vecinos escucharan algo". "Además, por el calor que hace la gente se encierra en sus dormitorios con aire acondicionado y el sonido de estos aparatos tapa cualquier ruido sospechoso que pueda venir de la calle", indicó el vocero. DyN