La reforma tributaria impulsada por el gobernador Hermes Binner fue rechazada hoy por los senadores justicialistas y la bancada oficialista decidió abandonar el recinto, por lo cual la iniciativa quedó sin efecto y no podrá ser analizada hasta el año próximo.
Así lo confirmó esta noche a los medios locales el legislador socialista Juan Carlos Zabalza. El justicialismo tiene mayoría en el Senado y acordó su tratamiento de manera sorpresiva para rechazar la iniciativa del gobierno provincial, que busca reestructurar el esquema de ingresos brutos y el impuesto inmobiliario rural y urbano.
El rechazo del proyecto se convirtió así en la primera derrota política para los socialistas. Los senadores habían expresado en un documento que “no aprobarían un proyecto que no fue elaborado con su aprobación y que no estaban dispuestos a someterse a falsas negociaciones”, pese a que ya tenía media sanción de Diputados.
A partir de esta negativa, habrá que ver qué pasará con los intendentes y presidentes comunales que necesitan imperiosamente fondos para sus administraciones y poder afrontar las demandas de los trabajadores de un incremento salarial. La reforma tributaria implicaba contar con unos 670 millones de pesos que el gobierno provincial había incorporado en el Presupuesto 2009.
DYN