Como en todo cambio de la vida, los desafíos que se aproximen serán mayores. Y para acompañar el gran salto que implica pasar del nivel medio al nivel superior, desde Educación SF buscamos armar la "foto" de lo que encontraremos en la Universidad. Así, con estadísticas en mano, podremos atravesar este tramo turbulento del trayecto educativo de la mejor manera.
La información recopilada pertenece a distintos documentos, donde fueron sistematizadas distintas fuentes oficiales, otorgando una representación de la educación en nuestro país. Uno de ellos es el flamante informe "Síntesis de Información Estadísticas Universitarias 2018-2019", elaborado por el ministerio de Educación de la Nación junto a la Secretaría de Políticas Universitarias.
De allí, se desprende que el sistema universitario se compone de 132 instituciones -67 son de gestión pública y 63 de gestión privada- la población es de 2.227.746 estudiantes, con 589.749 nuevos inscriptos y 150.454 egresados para los niveles de pregrado, grado y posgrado. Del total de estudiantes, una leve mayoría (58,1%) son mujeres, quienes también se destacan en el total de egresados con el 61,2%.
De los alumnos ingresantes, el 33,5% tenía entre 17 y 19 años. De ellos, el 23,2% opta por carreras vinculadas a la ciencia o a la tecnología. El 37,3% eligió carreras de Ciencias Sociales (que incluyen las económicas), mientras que en segundo lugar están las Ciencias Aplicadas, con un 20,8% de los nuevos inscriptos.
Además, según el informe, durante los últimos años, la cantidad de carreras que hay en el sistema universitario es de 9994. De ese total, 2253 son de pregrado, 4764 de grado y 2977 de posgrado. Asimismo, las 67 instituciones universitarias de gestión pública concentran al 74,9 por ciento de la matrícula de estudiantes. Esto significa que 1.757.407 de los alumnos asisten a la universidad pública.
Otro documento recientemente elaborado por el Centro de Estudios de la Educación Argentina de la Universidad de Belgrano, elaborado en base a las Estadísticas Universitarias 2005 a 2017 y la Síntesis de Información Estadísticas Universitarias 2018-2019 del ministerio de Educación, analiza la eficacia en la graduación universitaria, teniendo en cuenta que la duración teórica promedio de las carreras va de cuatro a seis años, procediendo a calcular el porcentaje de alumnos que se graduaron seis años después de haber ingresado al sistema universitario.
En dicho documento se indica que "solo el 35% de los estudiantes universitarios no aprobó ninguna materia en el último ciclo lectivo, por lo que son 3 de cada 10 estudiantes universitarios argentinos los que terminan graduándose, proporción que se mantiene prácticamente estable desde el 2011".
El boletín del Centro de Estudios de la Educación Argentina subraya, además, que "no existe una ley que establezca una permanencia máxima de los alumnos en las instituciones universitarias argentinas, ya que el artículo 50° de la Ley de Educación Superior 24.521/1995, que establecía un mínimo de exigencia de aprobación de dos materias por año, fue derogado por la Ley 27.204/2015".
El reporte afirma que parte de la explicación radica en "la formación académica con la que cuentan quienes culminan el ciclo secundario en nuestro país". "En 2017 culminó el ciclo secundario sólo el 41% de los alumnos que ingresó a primer grado en 2006. En el mismo sentido, el porcentaje de repitentes en educación secundaria se incrementó en los últimos 20 años", sostiene el informe con base también en las pruebas PISA 2018.
En consecuencia, para mejorar la graduación universitaria, se requiere, como paso previo, fortalecer los conocimientos con los que egresan los alumnos secundarios de acuerdo con el análisis. Además, se debería generar algún tipo de fomento o estímulo para que los alumnos se gradúen en un lapso más cercano a la duración teórica establecida para su plan de estudios. Mejorar la calidad de la formación de los alumnos requiere el compromiso de todos, incluso de los estudiantes, con el propósito de que la educación sea un puente de igualdad de oportunidades para todos los jóvenes argentinos.
Cambio de carrera: una elección más
Un dato de interés que toma el último informe del sistema universitario nacional, es la elaboración del indicador llamado "Tasa de cambio entre ofertas académicas". Según los datos publicados, un 61,8% de los nuevos inscriptos continuó en la misma carrera al año siguiente de su ingreso y el 21,6% optó por otra oferta académica, un cambio que se verifica uno o dos años después del ingreso. De acuerdo al informe, este indicador aporta una nueva mirada sobre el comportamiento durante los primeros años universitarios, en las que se observa que el 'cambio de carrera' es un comportamiento frecuente y que esto no implica la 'deserción' del sistema".
Tecnología: una deuda pendiente
De acuerdo a los resultados del Operativo Aprender de la Secundaria 2019, la disponibilidad de recursos tecnológicos expresan una baja aplicación en su uso para la enseñanza, lo que dificulta su adopción en el sistema superior. Las menos utilizados son las tablet (el 90% nunca los utilizan); mientras que las computadoras y las notebook/netbook tienen mayor presencia (32% y 36% las utilizan a veces, respectivamente), aunque alrededor de la mitad no las emplea para trabajar en clase (54% y 48%, respectivamente). La tendencia es distinta con el celular: más del 90% lo utilizan en sus clases, pero el 45% señala que sus docentes no permiten su uso en el aula.