Redacción El Litoral
Desde el Centro de Estudiantes elaboraron un documento en repudio a la sexualización de las alumnas.
Redacción El Litoral
Los alumnos y alumnas del Centro de Estudiantes de la escuela Secundaria de la Universidad Nacional del Litoral (CEESUNL) proponen la creación de un protocolo contra la violencia de género en la institución, tras el caso de una filtración de fotografías de compañeras que fueron sexualizadas, mediante un archivo digital privado compartido a través de Google Drive. El caso que trascendió esta semana derivó en un sumario e investigación interna a cargo de Asuntos Jurídicos de la UNL.
Mediante un comunicado de prensa en el que elevaron la propuesta del protocolo, el CEESUNL repudió el “acto de acoso, cosificación, sexualización y violación de la propiedad privada ejercido sobre las estudiantes de la ESUNL, EIS y demás escuelas afectadas por parte de un grupo de varones estudiantes” de dicha comunidad educativa.
El mismo comunicado, que lleva la firma de su presidente, Santino Bravi, y demás autoridades, detalla que la existencia del archivo fotográfico en cuestión data de “dos año atrás” y que contenía “985 imágenes de mujeres que sin su consentimiento se las expuso como un objeto para el goce masculino”. También destaca que el caso se hizo púbico y tuvo así una culminación de dicha práctica de sexualización “gracias a un grupo de estudiantes de nuestra institución” que “denunciaron el hecho”.
Reflexión
Más adelante, los alumnos expresan su apoyo a las compañeras afectadas y llaman a la reflexión “a todos los hombres que alguna vez fueron actores y partícipes de la violencia, cosificación, sexualización y acoso de las mujeres”, mediante una “deconstrucción de las conductas machistas”, que fueran “inculcadas en cierta medida por el modelo social patriarcal”.
Más allá del comunicado, el presidente del CEESUNL en diálogo con El Litoral, expresó la “angustia” que les causó el hecho, al enterarse de que “los compañeros de curso con los que se está día a día pueden estar vinculados” y contó que las mujeres “pidieron a la institución que impida a los varones compartir el aula con ellas por un tiempo determinado”, al tiempo que expresó el apoyo del Centro de Estudiantes a dicho pedido. También solicitó la actuación permanente del Gabinete Psicopedagógico de la escuela.
Repudio
Por otra parte, el lunes pasado hubo una manifestación pública en el interior de la escuela ubicada en calle 9 de Julio 1975. Aparecieron carteles en las paredes en repudio al caso y a los involucrados, con frases como “No soy tu objeto de consumo”.
Hecha pública la situación que trascendió el ámbito escolar, el martes la directora de la escuela Secundaria de la UNL, Nora Ojea, y el director del Consejo de Enseñanza Preuniversitaria de la UNL, Héctor Odetti, brindaron una conferencia de prensa en la que anunciaron la apertura de una investigación para determinar responsabilidades y evaluar posibles sanciones. Asuntos Jurídicos va a elaborar un sumario y, en caso de que sea necesario, el Tribunal Disciplinario determinará las sanciones y, de ser necesario, se elevará a la Justicia.