El 21 de agosto de 1987 se creó, en el ámbito de la Universidad Nacional del Litoral, la Facultad de Formación Docente en Ciencias (FAFODOC). Se formó sobre la base de la Escuela Universitaria del Profesorado, constituida como tal en 1970.
Si bien su origen se remonta a 1953, en 2022 se conmemora el 35º aniversario de la creación de la FHUC, unidad académica que hoy ostenta la mayor diversidad de propuestas de estudio en el ámbito de la Universidad Nacional del Litoral.
El 21 de agosto de 1987 se creó, en el ámbito de la Universidad Nacional del Litoral, la Facultad de Formación Docente en Ciencias (FAFODOC). Se formó sobre la base de la Escuela Universitaria del Profesorado, constituida como tal en 1970.
Los antecedentes institucionales se remontan a 1953, con el Instituto del Profesorado destinado a la formación de docentes en Historia y Geografía y en Ciencias Naturales, y posteriormente en Letras y Matemática. El primer director fue el profesor Ricardo Luis Palotti. Un hito institucional importantísimo lo constituyó la transformación en el Instituto del Profesorado Básico (1958), bajo la dirección de la profesora Ana María Caffaratti.
Durante los ‘60 y ’70, la institución no estuvo exenta de lo que sucedía en el país. El Onganiato, el clima previo a la última dictadura –con cesantías docentes e intervenciones-, así como los sucesos posteriores al golpe de Estado de 1976, marcaron profundamente el devenir académico e institucional.
Aún cuando se recuperó la democracia, a fines de 1983, pasaron varios años hasta que ciertas áreas y disciplinas pudieron recobrar vigor, así como también la normalización de las cátedras a través de los concursos docentes. La creación de la Facultad en 1987 constituyó un punto de inflexión para la proyección institucional. El 7 de noviembre de 1989, el flamante Consejo Directivo elegía al Profesor Mauricio Epelbaum como su primer decano.
La propuesta académica se renovó a partir de 1990 sumando licenciaturas en las diferentes áreas y disciplinas: Geografía, Letras, Historia, Biodiversidad y, posteriormente, y posteriormente las carreras de Filosofía (primero con el ciclo inicial de Diplomado en Humanidades, para dar lugar luego a la Licenciatura y al Profesorado), así como las Licenciaturas en Ciencia Política y en Sociología (estas últimas compartidas con la FCJS).
El desarrollo académico se complementó con el crecimiento de la investigación, la creación de Centros de Estudios y Laboratorios de Investigación, el desarrollo de publicaciones, programas y proyectos de extensión, la formación en el nivel del posgrado, ciclos de licenciatura para egresados del nivel terciario y propuestas formativas de educación a distancia.
En 1996 se produjo la integración con el Instituto Superior de Música, mientras que a partir de 1998 la Facultad se trasladó a las actuales instalaciones en la Ciudad Universitaria.
Un punto de inflexión fue sin dudas el cambio de denominación en el año 2000. El nuevo nombre adoptado, “Humanidades y Ciencias”, posibilitó incluir plenamente las diferentes propuestas académicas en curso y proyectadas.
“Nuestra facultad siempre se ha caracterizado por su dinamismo, por expresar su inconformismo frente a lo dado, por generar rupturas –señala la Prof. Laura Tarabella, decana de la FHUC-. Ha sido capaz de leer en clave reformista, y ello puede verse reflejado en las denominaciones diferentes que ha adoptado esta institución educativa, hasta ser hoy Facultad de Humanidades y Ciencias. Pero en esa metamorfosis siempre ha estado presente su marca, su sello identitario: la diversidad. Con la intención de expresar la pluralidad de voces y enfoques que nos permiten construir, sobre la base de una discusión abierta, una cultura institucional común y solidaria. Esa riqueza emanada de lo diverso y la potencialidad que brinda el cruce entre disciplinas, es lo que le otorga aún más fortaleza y robustez”, reflexiona.
Para Tarabella, “el crecimiento sostenido en las diferentes áreas es el corolario de un trabajo mancomunado y de la interlocución con diversos actores, con la convicción y la intención de seguir construyendo proyectos alternativos que atiendan a las demandas y necesidades actuales y que aborden las problemáticas que signan a los nuevos tiempos”, finaliza.
FHUC-UNL cuenta con 13 carreras de grado (7 licenciaturas y 6 profesorados), 6 ciclos de licenciaturas para egresados terciarios, y 8 carreras de posgrado: 3 Doctorados,3 Maestrías y 2 especializaciones.
La planta de docentes-investigadores está compuesta por 350 docentes, de los cuales 200 son investigadores categorizados. La Facultad cuenta con 8 Departamentos Académicos, con el Instituto de Desarrollo e Investigación para la Formación Docente (INDI), y 5 Centros de Estudio e Investigación. Diversas actividades se ejecutan en vinculación con los 3 Institutos doble dependencia UNL-CONICET: Instituto Nacional de Limnología (INALI), Instituto de Matemática Aplicada del Litoral (IMAL), y el Instituto de Humanidades y Ciencias Sociales del Litoral (IhuCSo).
Durante la última década se desarrollaron, en coordinación con diversos estamentos del Estado y de organizaciones sociales, más de 50 proyectos y prácticas de extensión en temas de relacionados con promoción de derechos, pueblos originarios, vulnerabilidad social, apropiación e inclusión, educación, salud y ambiente, proyección cultural y artística.
Además, la FHUC tiene una participación sostenida en redes académicas e institucionales nacionales: Consejo Universitario de Ciencias Exactas y Naturales (CUCEN); Asociación de Facultades de Humanidades y Educación (ANFHE); Consejo de Decanos y Decanas de Ciencias Sociales (CODESOC); Consejo Interuniversitario para la Enseñanza Superior de la Biología (CIPEB); Federación Argentina de Carreras de Comunicación Social (FADECCOS); y la Red Argentina Universitaria de Arte (RAUdA).
También se han rubricado convenios con universidades extranjeras de Italia, España, Brasil, Chile y Colombia, Uruguay, entre otras, para desarrollar acciones de formación y de investigación.