La educación contará con menos recursos en el Presupuesto 2022
En el proyecto de ley enviado al Congreso, el gobierno nacional plantea una reducción del 6,2% para el próximo año: unos 34 mil millones de pesos menos que en 2021. La baja se explica por una caída en lo asignado al nivel superior. Se priorizarán programas de inclusión tecnológica, becas y construcción de jardines.
La educación contará con menos recursos en el Presupuesto 2022
En el proyecto de Ley del Presupuesto 2022, enviado al Congreso hace casi dos meses, el gobierno nacional plantea una reducción en el gasto destinado a Educación de 6,2% con respecto al año anterior. Así se desprende de un nuevo informe realizado por el Observatorio de Argentinos por la Educación.
Pese a que aún no hay precisiones sobre su tratamiento en Diputados -lo que motivó en las últimas horas una reunión entre el presidente del cuerpo, Sergio Massa, con el Jefe de Gabinete, Juan Manzur- los lineamientos del proyecto comienzan a estar bajo la lupa, ante el agravamiento de problemas económicos estructurales como la inflación y la escasez de divisas.
El presupuesto 2022 elaborado por el gobierno de Alberto Fernández contempla un gasto total de más de 13 billones de dólares, un crecimiento del 4% del PBI, una inflación del 33%, un dólar a $ 131,1, una fuerte inversión en obras públicas, y destinar mas de la mitad de los recursos a gastos sociales. Sin embargo, especialistas advierten que los montos destinados a educación verán una reducción de alrededor de 34 mil millones de pesos respecto de 2021.
Respuesta oficial
Desde el ministerio de Educación nacional reconocieron la situación aunque aclararon que se encuentran revisando el presupuesto junto a las comisiones de Diputados y la cartera de Economía para que, al menos, se iguale lo que se invirtió en 2021. "Estamos trabajando en corregir los errores del presupuesto para aumentar la inversión en educación respecto de lo que se invirtió este año", remarcaron, advirtiendo que la planilla fue elaborada por la gestión anterior, previo a los cambios dispuestos por el presidente luego de las Paso.
¿En qué se gasta el presupuesto?
El pico máximo del presupuesto llegó en el año 2015, alcanzando por primera y única vez la meta del 6% del PBI establecida en la Ley Nacional de Educación. A partir del 2018 los gastos en esta función experimentaron una tendencia a la baja, al punto que en 2019 y 2020 se tocaron los valores mínimos de los últimos diez años. En 2021 y 2022 se observa una tendencia de recuperación, aunque el proyecto para el año entrante prevé una reducción de alrededor de 34 mil millones de pesos.
El proyecto de Presupuesto 2022 del Ministerio de Educación de la Nación proyecta un total de $ 522.490 millones. Tres de cada cinco de esos pesos se destinarán a dos programas: Desarrollo de la Educación Superior (56,1% del total del presupuesto del Ministerio) y Fondo Nacional de Incentivo Docente (10,3%). Aunque ambos sufrirán recortes con respecto a 2021.
En tanto, los que tendrán prioridad serán los programas de conectividad Juana Manso y Conectar Igualdad en un 11,5% del total, los de gestión y la asignación de becas educativas en un 6,2% y de fortalecimiento edilicio de jardines de infantes en un 5,2%.
Por otro lado, el programa de Información y Evaluación de la Calidad Educativa tiene, entre otras líneas de trabajo, el fortalecimiento del Sistema Integral de Información Digital Educativa y la implementación de evaluaciones. Este programa representa el 0,18% del proyecto de Presupuesto 2022, cuando en años previos varió entre 0,32% y 0,03%. La importancia de este programa radica en la construcción de "evidencia técnicamente sólida para la toma de decisiones".
Reflexiones
Los datos apuntados surgen del informe "¿Cuál es el lugar de la educación en el proyecto de Presupuesto Nacional 2022?", del Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de los investigadores Javier Curcio, Gabriela Catri, Martín Nistal y Víctor Volman.
Curcio, autor del informe, destacó la importancia de identificar el papel que la educación ocupa entre las políticas públicas para "favorecer el gobierno del sistema en la reducción de desigualdades territoriales y cumplir el derecho a una educación inclusiva y de calidad tal como está consagrado en el marco normativo del país y que es esencial para el desarrollo sostenible".
"Si la educación interesara de veras, el gasto nacional tendría que haber aumentado para fortalecer la conectividad, la distribución de dispositivos y la producción de material pedagógico para difundirlo en el portal Educ.ar", reflexionó Juan Llach, exministro de Educación.
Por su parte, Juan Doberti, docente e investigador de la UBA, advirtió que "el contexto macroeconómico de alta inestabilidad, más allá de dificultar la investigación, torna más necesario el cálculo de los elementos que componen al Presupuesto Nacional para la función educativa".
Diversificación
La ejecución de los programas educativos no son exclusiva competencia del ministerio de Educación. Esto se debe a que otras carteras destinan parte de su presupuesto a actividades ligadas; por ejemplo: formación militar a cargo de Defensa o construcción de escuelas a cargo de Infraestructura y Obras Públicas. Al mismo tiempo, el propio ministerio de Educación implementa funciones que exceden a su ámbito, como los gastos en salud o ciencia y técnica en las universidades nacionales. Sin embargo, a lo largo de los años, la dependencia educativa nacional concentró en el último tiempo la mayor proporción de los gastos, entre el 70% y el 86%.
Preocupación entre rectores
El informe detalla que el principal caudal de gastos del Ministerio de Educación de la Nación es la educación superior, ya que la masa salarial docente de los niveles obligatorios son en su mayoría pagados por las provincias, con excepción del FONID.
Repasa que entre el 2013 y el 2022 el gasto en el nivel superior representó entre el 56,0% y el 75,9% de los gastos totales del ministerio. En el 2020 se dio la inversión más numerosa, pero en 2021 hubo una baja al 56,0% que se sostendría en el Presupuesto 2022 (56,1%).
"Hay una preocupación presupuestaria", había reconocido el rector de UNL y vicepresidente del Consejo Interuniversitario Nacional, Enrique Mammarella, en diálogo con El Litoral, hace dos meses, cuando el proyecto era remitido al Congreso.
Los rectores que integran el CIN se habían reunido en el Paraninfo de la UNL para plantear sus necesidades y proyectos ante la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación de la Nación.
En números, el CIN preveía un total de $ 407,9 mil millones y finalmente el proyecto elevado fue de $ 335,7 mil millones. "Generalmente uno tiene un número aspiracional, pero esta vez el número es muy lejano a lo que habíamos estado hablando y a lo que necesitamos como sistema. De alguna manera, nos termina apretando porque nos achica el disponible para funcionar (insumos, equipamientos, dispositivos) sin pensar en los incrementos inflacionarios o el desfasaje del dólar", reconocía en aquella entrevista Mammarella, con preocupación sobre las estimaciones presupuestarias para el 2022.