"Déjense 'abofetear' por los jóvenes", pidió el Papa Francisco a 200 rectores universitarios
El encuentro se realizó en Roma y reunió a autoridades de casas de estudio públicas y privadas de América Latina y el Caribe. A su regreso, el rector de la Universidad Católica de Santa Fe se refirió al mensaje de la máxima autoridad eclesial y a las temáticas abordadas en el evento.
"Déjense 'abofetear' por los jóvenes", pidió el Papa Francisco a 200 rectores universitarios
"Déjense abofetear por los jóvenes". Ése fue el pedido que hizo el Papa Francisco -fiel a su estilo expresivo-, a 216 rectores de universidades públicas y privadas de Latinoamérica y el Caribe. Entre los asistentes al encuentro, que se realizó el 20 y 21 de septiembre en la Ciudad del Vaticano (Roma), estuvo Eugenio Martín de Palma, rector de la Universidad Católica de Santa Fe (UCSF), quien a su regreso contó a El Litoral cuál fue el mensaje del máximo referente de la Iglesia católica, al tiempo que repasó parte del temario abordado por las casas de estudios.
El evento fue organizado por la Red de Universidades para el Cuidado de la Casa Común (RUC) junto con la Pontificia Comisión para América Latina del Vaticano. Durante la jornada del día 20, los rectores se reunieron en grupos de trabajo de acuerdo a la especificidad de cada una de sus instituciones y en relación con los temas urgentes de sus territorios. Al día siguiente, pudieron compartir sus conclusiones con el Papa en una audiencia que se extendió por aproximadamente dos horas.
Sobre cuál es el sentido de la frase de Francisco, De Palma interpretó: "El mensaje es que podamos generar propuestas y proyectos 'con la gente adentro'", tanto en el plano económico como del desarrollo, teniendo un cuidado sobre el medio ambiente y la casa común. Es decir, como lo entiende él, generar una intelectualidad que sea hoguera de vanidades no tiene sentido, no cambia el mundo ni resuelve los problemas. Sí, en cambio, una intelectualidad que esté al servicio de la gente, va a ser la que realmente dé respuestas. Creo que ese es el mensaje claro".
-¿Cómo se gestó este encuentro de rectores latinoamericanos con el Papa?
-La organización estuvo a cargo de la Red de Universidades para el Cuidado de la Casa Común (RUC), que tiene sus inicios allá por el año 2016. Y lo enriquecedor es que de alguna manera -y en sintonía con la encíclica que está dirigida a todos los hombres de buena voluntad-, su conformación es amplia: hay universidades de América Latina y del Caribe tanto de gestión estatal como privada; y dentro de estas últimas, hay confesionales como no confesionales y de otras religiones; por ejemplo, estaba el Instituto Rabínico y universidades evangélicas. De esta red, la Universidad Católica es miembro de la comisión directiva con una vocalía y estuvo en la organización. Luego de los primeros pasos, se contó con una fuerte colaboración del Consejo Pontificio para América Latina y el Caribe, sino no habría podido alcanzar esta envergadura el encuentro. Voy a destacar la presencia de rectores de universidades como la Estadual de San Pablo, la UNAM de México, el TEC de Monterrey, la Nacional de Chile, la Nacional de Colombia. Y por Argentina: la UBA, La Plata, Córdoba, la UNL, Cuyo, San Luis, entre otras; hubo una muy buena presencia.
El encuentro fue convocante y plural: había rectores de casas de estudio públicas y privadas, entre estas últimas, confesionales y no confesionales.
También quisiera resaltar dos cuestiones. Una es el tiempo que nos dedicó el Pala: dos horas de audiencia no es común y habla de la importancia que le dio al encuentro; y la otra es la particularidad de que fue un coloquio, no una disertación de él, sino que en base a lo que las universidades habíamos trabajado el día anterior, se expusieron las conclusiones de los cuatro grupos en las distintas temáticas.
-¿Cuál fue el mensaje que les dejó el Papa Francisco a las autoridades universitarias?
-Fue contundente en cuanto a poner en agenda la encíclica "Laudato sí", y hasta incluso nos anticipó aquel 21 de septiembre, lo que se publicó recién este miércoles, la "Laudate Deum", que es una segunda parte de la anterior y en donde marca cuáles son las asignaturas pendientes. De alguna manera, el Papa buscaba en las universidades y en el trabajo con nuestros jóvenes, poder llegar con ese mensaje de humanidad.
"Con su estilo, el mensaje del Papa fue que podamos generar propuestas y proyectos 'con la gente adentro'", dijo el rector de la UCSF, al regreso de su viaje. Crédito: Pablo Aguirre.
Nos hizo una fuerte reflexión respecto de trabajar con los jóvenes sobre los tres lenguajes humanos: el de la cabeza, el del corazón y el de las manos. De tal manera que aprendan a pensar lo que sienten y lo que hacen, a sentir lo que hacen y lo que piensan, y a hacer lo que sienten y piensan. Si bien nosotros no somos funcionarios políticos, no dejamos de tener una alta responsabilidad en la sociedad como formadores de futuros profesionales.
-El encuentro versó sobre ejes de trabajo clave en el actual contexto global como la crisis económica, social, cultural en temas como la inequidad, el desempleo, la migración. ¿Qué conclusiones hubo en su mesa de trabajo?
-El encuentro con Francisco obviamente fue la frutilla de postre. Antes habíamos estado trabajando en el Agustiniano, que es el centro de estudios de los Agustinos, en el corazón del Vaticano, un lugar muy lindo. En las mesas de trabajo integré el Grupo 3, sobre desempleo y crisis social. De allí surgió la necesidad de buscar ser universidades más inclusivas y, en ese punto, también trabajar con los jóvenes. En Argentina ya tenemos el ingreso irrestricto; y nosotros como Católica, si bien somos una universidad arancelada, si alguien quiere estudiar acá, el tema económico no debe ser un problema y así lo cumplimos: de los casi 6.000 alumnos, 1.000 de ellos tienen becas y préstamos académicos. Creo que el paso que hay que dar es también permitir que los jóvenes de nuestros barrios puedan pensar a la universidad como un lugar posible para ellos. Porque si ese no es ni siquiera un escenario contemplado en su imaginario, difícilmente, por más que se lo ofrezcan, lo van a tener presente. Ese fue uno de los puntos sobre el que se trabajó mucho.
Otro tema fue el de las concepciones en la enseñanza de la Economía, para lograr que incluya y que piense en la persona, porque si los números cierran pero queda gente afuera ¿de qué vale?. El tema del empleo y del trabajo fue una preocupación en el encuentro. Se discutió de qué manera las universidades podemos ir acompañando los cambios en los criterios de empleabilidad, que ya no son los mismos del siglo XX. Hoy empezamos a tener desafíos con la Inteligencia Artificial, estamos en la sociedad del conocimiento y, si no hay estudios, no hay posibilidad de empleabilidad, que hoy pasa mucho por los servicios. Más allá de cuestiones prácticas, es importante que podamos pensar o diseñar mecanismos de enseñanza donde esté la persona adentro.
-En una foto se ve que estuvo cara a cara con el Papa ¿Cómo fue ese momento?
-Tuve la gracia de estar dos veces con él este año; en mayo fui invitado por la Red de Universidades de América Latina y de Caribe. En esta ocasión, el día anterior a la audiencia, le hice llegar una carta que no estaba destinada a él, sino que le había escrito a una persona que era un gran amigo del Papa y quería compartirle el texto. Al día siguiente, cuando lo voy a saludar, me presento y me dice "Martín, me gustó mucho tu carta" y me agradeció que se la compartiera. Y ahí es cuando me agarra las dos manos. Son segundos, a veces son las miradas, los gestos. Y realmente ese momento es impactante, es fuerte.
Universidad, era digital y adultos mayores
Con anterioridad a su viaje a Roma, el rector de la Universidad Católica de Santa Fe, Eugenio Martín De Palma, participó de la 20º Asamblea de la Red de Asociaciones Latinoamericanas y Caribeñas de Universidades Privadas (Realcup). Bajo el lema "Transformación Universitaria en la era digital", tuvo lugar del 6 al 8 de septiembre, en la sede de la Institución Superior de Administración y Educación (ISAE), de Panamá.
"Hoy son 13 países que conforman la Realcup, con 14 entidades de asociaciones de rectores de universidades privadas. Universidades significativas en esa red, son el TEC de Monterrey y la PUCE de Ecuador. Es una red joven con una iniciativa interesante. El objetivo del encuentro fue abordar los desafíos de las nuevas tecnologías y la Inteligencia Artificial fue la protagonista", señaló el rector a El Litoral.
-¿Qué se trajo de esa asamblea?
-Una de las cuestiones que se debatieron mucho es el tema de la formación continua. Fue a disertar un especialista, José Escamilla, del TEC de Monterrey, con su Instituto de Educación Continua referido a la tercera edad. Porque el fenómeno que estamos viviendo hoy es que muchas personas están jubiladas, pero tienen por delante una expectativa de vida de 20 ó 30 años, donde es muchísimo lo que pueden hacer. Entonces, se habló de la importancia que tiene la formación continua, que va más allá de lo que puede ser una maestría o un doctorado. En la Universidad Católica, en el año 2000, durante la gestión del doctor Estrata -que fue un visionario-, se crea la Universidad para los Adultos Mayores. Ahora lo que hay que ir pensando, en este nuevo escenario, es en un programa con ciertas características y centralidad dentro del desarrollo académico de la universidad. Así como desde hace un tiempo viene creciendo el tema de educación a distancia, hacerlo también con las propuestas a los adultos mayores.
-¿Qué se planteó con relación a las nuevas tecnologías, a la IA en la universidad?
-En el gran debate de si inteligencia artificial sí, inteligencia artificial no, mayoritariamente los rectores entendían que era importante dar lugar a la participación de la IA en la universidad. Es decir, poner impedimento no tiene sentido, porque en definitiva es una herramienta que hay que incorporar y generar dispositivos que permitan evaluar también el uso de la misma; uno puede evaluar incluso qué le preguntó y cómo preguntó el estudiante a la inteligencia artificial. Es un tema que hay que trabajarlo de manera conjunta con el alumnado porque es importante que el estudiante aprenda a hacer la construcción intelectual y síntesis.
Colaboradores cercanos
El encuentro de rectores en Roma contó con la presencia "de colaboradores cercanos y significativos en el gobierno del Papa Francisco", destacó Martín De Palma. Entre ellos, mencionó que les dio la bienvenida monseñor Robert Prevost, que ahora es cardenal, presidente de la Pontificia Comisión para América Latina y a cargo del Dicasterio para los Obispos. Además estuvo el cardenal José Tolentino, quien fue rector de la Universidad Católica de Portugal y hoy es el prefecto (ministro) de Educación y Cultura del Vaticano. También participaron monseñor Vincenzo Paglia, presidente de la Pontificia Academia para la Vida; Dolores Sánchez Galera, del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral; y el santafesino monseñor Lucio Ruíz, secretario del Dicasterio para la Comunicación.