Nivel Secundario: Educación niega que se fomente la promoción directa
El subsecretario provincial de Nivel Medio, Gregorio Vietto, dijo que lo "sorprendió" la reacción de los docentes. Los profesores se niegan a "regalar el título". El funcionario aclaró que la decisión es de cada escuela, y admitió que hay un cambio "en el paradigma" de la evaluación.
Nivel Secundario: Educación niega que se fomente la promoción directa
El subsecretario provincial de Educación Secundaria, Gregorio Vietto, negó que desde el Ministerio se haya instado a las escuelas de ese nivel a facilitar la promoción directa. "Nunca hablamos de eso; la promoción directa implica que el alumno pasa de año sin evaluación ni calificación, y no es eso lo que estamos planteando", sostuvo el funcionario. En diálogo con El Litoral, admitió que por el contexto de pandemia, la prioridad es "retener a los chicos en el sistema", y advirtió que la repitencia es una de las principales causas del abandono. Sin embargo, insistió en que "es la escuela" quien tiene la potestad de decidir sobre cada alumno, que deberá ser evaluado, aunque con otros parámetros. "Hay allí un cambio de paradigma", alertó.
Vietto respondió a las críticas vertidas sobretodo desde la organización Docentes por la Educación, que reaccionaron frente a la emisión de la circular 8/21. Desde la entidad se manifestaron en desacuerdo con la medida, y advirtieron que no están dispuestos a "regalar el título".
- ¿Qué explicación se da desde la subsecretaría sobre esta circular que ha generado una fuerte reacción de los profesores? ¿Implica esto en la práctica que no habría repitencia?
- Me llama la atención porque en ningún momento de la circular se habla de promoción directa, sino del cierre de la Unidad Pedagógica que fue establecida por el Consejo Federal en agosto de 2020 con la resolución 36. Incluso, el año pasado en el nivel secundario hubo jornadas institucionales para armar esa articulación. Por ende me sorprendió esta idea de hablar de promoción directa, cuando en ningún momento la circular lo dice. Incluso, de la misma conceptualización que surgió por la resolución 397 de este año del Consejo Federal, surgen esas categorizaciones con respecto a las trayectorias para considerarlas sostenidas, intermitentes o de baja intensidad. Pero eso lo considera la escuela. Cada escuela evalúa el recorrido, la trayectoria de esos chicos y chicas, y decide cómo fueron cada una de esas trayectorias. En consecuencia, lo que está en la circular Nª 8 no es nada nuevo; es algo que venimos trabajando en un contexto, es cierto, completamente atípico y novedoso, al igual que este concepto de 'unidad pedagógica'.
- ¿Es lógico que se dé por aprobado el año teniendo en cuenta sólo el último trimestre, sin importar cómo hayan sido las trayectorias en el resto del año?
- La circular no dice eso; dice que tiene que concebirse la trayectoria en su totalidad. Si a la conclusión de nota final la escuela decide que la trayectoria es sostenida, habrá aprobado. Eso implica una mirada colegiada y no fragmentada del conocimiento; es algo que se ha trabajado en el secundario, y entendemos que fue positivo porque este nivel muchas veces está caracterizado por la segmentación o porque el docente trabaja un poco más en soledad. La pandemia y el trabajo en la distancia con todas las cosas malas que tuvo, sí nos dio la oportunidad de tener esta mirada más colegiada de la trayectoria de cada chico. Ésa es la intención: mirar la trayectoria total de lo que sucedió en 2020 y 2021 y que sea la escuela la que decida sobre la trayectoria real del chico, lo que se pudo enseñar, lo que se pudo aprender. Y esa conceptualización, por supuesto, la hace la escuela.
- ¿El concepto de trayectorias sostenida o intermitentes, reemplaza el de la evaluación tradicional en función de la nota de un examen que después se promedia y sobre esa base se aprueba o no una materia? ¿Hay un cambio de paradigma allí?
- Ésa es la intención. La intención es dar una nueva mirada a la evaluación. Desde el Ministerio de Educación, el año pasado a la mitad de la unidad pedagógica que fue entre 2020 y 2021, comunicamos a las escuelas un documento de evaluación que sostenía, precisamente, eso: que la evaluación debe ser formativa y no sumativa. Que la evaluación tiene que ser para los aprendizajes, no de los aprendizajes para dar una mirada un poco más superadora y real de las trayectorias. Y un poco más justa también.
- ¿Y en la práctica eso qué implica? ¿Que el examen ya no se toma; se toma pero no tiene una nota?
- Entendemos que los dispositivos de evaluación tienen que tener una mirada que conciba todo el trayecto. La evaluación tiene que ser un itinerario; por supuesto que hay instancias evaluativas que continúan, como una evaluación escrita, para hablar en términos más tradicionales. Pero la idea es que ese modo de evaluar puede ser una herramienta pero no el único modo de evaluar. Lo que tenemos que entender es que este proceso que vivimos, esta tragedia que nos atravesó y que fue la pandemia, produjo muchos cambios en el sistema de enseñanza. Por ende, la evaluación también tiene que ser distinta para llevar un poco de justicia curricular. No podemos evaluar de la misma manera como hicimos siempre, dos años tan atípicos como los que tuvimos. La provincia de Santa Fe hizo un gran esfuerzo y hoy podemos decir que tenemos presencialidad plena en nuestras escuelas. Pero lo que estamos evaluando a fin de 2021 es toda la unidad pedagógica y todas las formas de enseñanza que se produjeron y que fueron en la distancia y en la presencia.
- ¿Ese modo de evaluar la unidad académica que prioriza contener a los alumnos en el sistema, no va en detrimento de la calidad académica?
- Para nada, todo lo contrario. Porque si la intención es sostener, estamos haciendo referencia a la calidad. Una educación de calidad es con todos los chicos adentro. Si tenemos una escuela expulsiva, no tenemos ningún tipo de calidad.
- O sea que el objetivo es contener...
- El objetivo es que todos los chicos y las chicas estén en la escuela aprendiendo.
- Entonces, ¿no hay una promoción directa o ello queda a criterio de cada escuela?
- El concepto de promoción directa es un concepto pedagógico que no está planteado en la circular, ni en ninguna circular de la Subsecretaría de Secundaria. Por eso me llama la atención esta reacción. También me llama la atención esa cuestión muy dura que dice el comunicado con respecto a la educación pública. Porque la escuela pública estuvo completamente a la altura de las circunstancias y sus docentes hicieron un esfuerzo enorme para sostener el vínculo pedagógico. El dispositivo de cierre de la unidad pedagógica tiene que ver con la evaluación formativa que hace la escuela; la escuela decide con los lineamientos que están en la circular. Pero no se habla en ningún momento de promoción directa.
- ¿No se 'regala la aprobación' como también sostienen los profesores?
- No, para nada. Eso está muy lejos de ser así porque es la misma escuela la que decide si la trayectoria es sostenida, intermitente o de baja intensidad. Esa mirada situada la tiene la escuela; no la podemos tener nosotros. Tenemos que trabajar en intensificar la enseñanza. Por ende, la escuela que considere que las trayectorias no son sostenidas, tienen que intensificar su aprendizaje hasta el 17 de diciembre. Es decir, que (los alumnos) tienen que seguir asistiendo en esta dinámica que planteamos que es la lógica de los trayectos curriculares. En el caso de que al 17 de diciembre tampoco lo logren, van a tener que venir en febrero a seguir intensificando, porque a nosotros lo que nos importa es que aprendan y sostengan su escolaridad.
- ¿Y si en febrero no se logra ese objetivo, qué se hace?¿Repite?
- Esto lo estamos viendo, estamos esperando las normativas federales. Pero ahora lo que nos preocupa es que en diciembre puedan llegar a tener todos los aprendizajes que la escuela consideró como prioritarios porque inclusive durante el año pasado se estuvo trabajando la priorización de contenidos curriculares. En un año tan atípico, la planificación docente no puede ser exactamente igual de lo que fue en años anteriores.