De la redacción de El Litoral
[email protected]
Élida Rasino, ministra de Educación de la provincia, intenta llevar tranquilidad a los inscriptos al concurso de titularización correspondiente a la educación secundaria, técnica, artística y media de adultos, al señalar que “vamos a resolver cada uno de los errores” antes de ofrecer los cargos y horas cátedra. Alrededor de 1.000 reclamos administrativos se presentaron en el período recursivo por equívocos en la confección del escalafón provisorio, según denunció el gremio Amsafe.
Además, se conoció que dos docentes de Rosario presentaron por estos días un amparo en los Tribunales provinciales para que se declare la nulidad de todo el procedimiento. Según trascendió, consideran “ilegítima y arbitraria” la puntuación establecida para acceder a los cargos como titulares.
Ambas situaciones ocasionaron incertidumbre y malestar entre los inscriptos al concurso -unos 18.000- que aspiran a conseguir la estabilidad laboral mediante la titularización en sus horas cátedras o cargos. El grado de angustia se acrecienta por cuanto hacía aproximadamente 16 años que los docentes de escuelas medias y técnicas no accedían a un concurso de ingreso. “Hay ansiedad y una actitud de sospecha sobredimensionada e impropia de la democracia que ha tenido todo este proceso, que fue consultado y consensuado con los gremios en paritarias”, consideró Rasino.
Por eso, la funcionaria pretendió dar seguridad a los participantes que se disputan unas 10.000 vacantes. “Estamos chequeando uno por uno los errores, y la mayoría de los recursos administrativos ya se está resolviendo favorablemente para el docente”, aseguró.
Causas
Rasino adujo que los equívocos se presentaron en la antigüedad o los títulos de los aspirantes. Consideró que estos errores se deben principalmente a dos factores: la complejidad del concurso y la “impericia” en la carga de datos a través de la web.
“Sabíamos que esto iba a ocurrir porque la Ley Federal le cambió el nombre a muchas materias, ocasionó el desguace y diversificación de cátedras. Por algo, nadie antes intentó llevar adelante este concurso de ingreso en el nivel medio, y eso es por la complejidad que tiene. A esto se suma que las escuelas aún no tienen aceitado los sistemas de gestión digital y cargaron mal los datos a la web”, argumentó la funcionaria.
Si bien sostuvo que la cantidad de recursos administrativos es “ínfima” (5,5%) con relación al número de inscriptos, admitió que para el docente perjudicado es un “gran problema” que “desde la Junta de Escalafonamiento debemos resolver con celeridad y justicia”.
Dijo que la meta es llegar a inicios de 2011 con los docentes titularizados en sus lugares pero advirtió que “hay que resolver primero el escalafón definitivo; si no es posible, se extenderán los plazos”.
Consultada sobre el alcance del amparo presentado en Rosario, la funcionaria dijo que “aún no tengo información pero no creo que se pueda llegar a frenar o declarar todo el proceso”.
Explicó que “en principio este concurso surgió de la paritaria; o sea que las partes involucradas se reunieron en el marco de un acuerdo y consensuaron los términos en que éste se va a desarrollar en cuanto a puntaje, antigüedad y pertenencia a la institución”.
“Luego -recordó- hubo plazos para que la gente presente sus recursos y se vayan corrigiendo inconvenientes: las vacantes se ofrecieron en mayo y los docentes tuvieron la oportunidad de ver si la materia que se ofrecía era la que estaban dando. Después se realizó un mes y medio de inscripción en junio y julio. Es descontado que el que se inscribe ha leído las condiciones y las acepta”.
Reparación histórica
Rasino explicó, asimismo, que se intenta hacer una “reparación histórica”, por lo que los requisitos exigidos tienden a que el que está dictando hace tiempo una materia en condición de interino sea el que tenga prioridad y, en lo posible, en la escuela donde ya está dictando clases.
Segundo, “es un concurso que no da lugar a que ingrese gente nueva al sistema. Lo que puede ocurrir, por una situación de antigüedad, es que tenga que cambiar de establecimiento”.
Tercero, “se fueron agregando horas al sistema porque se han creado escuelas secundarias y ha crecido la cantidad de horas a ofrecer, con lo cual creemos que nadie se va a quedar sin trabajo”.
En cuarto lugar, la funcionaria admitió que pueden seguir presentándose quejas porque los escalafones están encabezados por personas externas a una institución. “Qué sucede: la convocatoria no permite que uno renuncie a las horas que tiene en una escuela para tomar más horas en otra institución. Entonces, puede ocurrir que se inscribió al concurso, quedó primero en el escalafón pero a la hora del ofrecimiento no las podrá tomar porque quedará en situación de incompatibilidad”, explicó.