Lunes 24.6.2019
/Última actualización 10:03
Pasados treinta minutos del aterrizaje, los astronautas preparan su descenso del módulo lunar. Despresurizan el habitáculo, se colocan los guantes faltantes y ajustan la escafandra del traje espacial. Por primera vez en la historia, el ser humano posa sus pies en el satélite del planeta Tierra. Armstrong, acompañado de Aldrin y Collins, comunica al mundo tamaño evento. Hoy, en el marco del 50º aniversario del histórico suceso del Apolo 11, este “pequeño paso” para el hombre moderno será un “gran salto” en la vida de dos santafesinos. Santiago Ciprian y Albertina Risso formarán parte del grupo de 50 jóvenes que fueron seleccionados para viajar al “Space Camp” de la NASA, becados por la Embajada de EEUU en Argentina. Hasta Huntsville, ciudad en Alabama, llegará esta “tripulación” de 17 provincias argentinas que participarán del programa Academia Espacial Avanzada, organizado por el Centro Espacial y de Cohetes de los Estados Unidos, durante el 22 al 27 de septiembre.
Acompañados por sus madres, los dos santafesinos se acercaron a la redacción de El Litoral. Entre foto y foto, ambos comentaron que se conocen de la Asociación del Litoral para el Intercambio Cultural Argentino Norteamericano (ALICANA), donde cursan sus estudios avanzados en Inglés, y que es allí donde les comentaron la posibilidad de la beca.
En el caso de Albertina, fue su hermano menor —que también asiste a la Asociación— quien le comentó con emoción de la oportunidad. “Prácticamente, la obligó a Albertina a que se anotara, que la ayudaba a hacer el video y todo, ya que él, al ser más chico, no tenía la posibilidad de hacerlo, pero espera ansioso para dentro de un par de años”, comentó su mamá, Mariana Lirusso. Mientras, la mamá de Santiago, Cintia Bertoldi, explicó que deberán cuidarse con las faltas porque “este año, además de esta gran noticia, también está el viaje a Bariloche, y no queremos que quede libre”.
Durante tres semanas, la Embajada norteamericana recibió casi 900 postulaciones. Además de los procedimientos formales con solicitud de papeles y documentación, los postulantes tuvieron que superar un proceso evaluatorio que requirió de la elaboración de un material audiovisual de un minuto de duración, en el que debían detallar, en inglés, las fortalezas de las que se valían para exponer porqué creían que debían ser uno de los 50 integrantes del viaje.
La rigurosidad en la evaluación abarcó cuestiones como el desempeño académico, nivel del idioma e interés por la ciencia de cada postulante. Celular en mano, Albertina destacó en el video un perfil más asociado a los idiomas, ya que asiste a la escuela “Dante Alighieri” donde aprende también italiano, y agregó su curiosidad por los inabarcables misterios del cosmos, los cuales intenta alcanzar con un telescopio que comparten en su casa. Por su lado, Santiago reforzó una línea académica que se asocia mayormente a las ciencias, los cálculos y los números, adquiridos en la escuela técnica “Monseñor Macagno”, a la que acude. Además, el joven resaltó sus aptitudes deportivas ligadas que debe, en parte, a la profesión de su padre, Fernando Ciprian, entrenador de básquet en el club local Rivadavia Juniors.
Además de Albertina y Santiago, del viaje participará una joven de Rosario, tres de CABA, cuatro de Buenos Aires, cuatro de Córdoba, dos de Formosa, dos de Salta, dos de Neuquén, tres de Tucumán, cuatro de Chubut, dos de Río Negro, seis de Mendoza, tres de Santiago del Estero, dos de Corrientes, uno de San Juan, tres de Chaco, dos de Chubut, uno de Entre Ríos, uno de Misiones y dos de Tierra del Fuego. Entre todos conformarán esta tripulación de 50 argentinos que viajarán al Space Camp que depende de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA). En las actividades, serán acompañados por tres mentores.
Además de los conocimientos específicos sobre la materia y descubrir las particularidades del país norteamericano, el viaje les brindará a los jóvenes argentinos la posibilidad de conocerse entre ellos, ampliar sus horizontes culturales hacia el interior mismo de nuestro país. “Es importante que puedan compartir la experiencia entre todos”, dijo la mamá Santiago, mientras el joven detalló que, al otro día de enterados, empezaron a rastrearse por redes sociales y a conformar un grupo de Whatsapp. “De a poco nos vamos conociendo”, acotó.
De igual modo, Albertina explicó que se encuentra atravesando el momento de shock por la noticia y que, si bien “venía pensando en la idea de hacer un intercambio hace un tiempo”, está tratando de “abrir la mente, preparándome para conocer estos nuevos lugares y hacer nuevos amigos”.
El objetivo perseguido por la Academia Espacial Avanzada es el de ofrecer a estudiantes de 15 a 17 años, originarios de distintas regiones, la oportunidad de explorar la preparación para una carrera universitaria y profesional a través de una experiencia de inmersión en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (llamada STEM, en inglés).
De acuerdo a lo que se expresa en la web del Space Camp, los participantes experimentarán un entrenamiento similar al que practican los astronautas y, según mencionaron Albertina y Santiago, también tendrán una charla en vivo con uno de ellos.
Por lo demás, a lo largo de estos días, los jóvenes realizarán una variedad de ejercicios, desafíos de ingeniería y actividades de formación de equipos, que culminarán en una simulación de una misión espacial de duración prolongada. Los asistentes utilizarán simuladores con sillas de gravedad y flotación neutral, diseñarán y lanzarán un cohete, construirán un escudo térmico, entre muchas otras tareas de aprendizaje.
Una dimensión a considerar en cada una de las experiencias de este estilo es, sin dudas, las posibilidad económica con que cuente cada familia. Por este motivo, en la beca otorgada, la Embajada de EEUU en Argentina destacó que se “cubrirán todos los gastos del programa”. Entre los costos cubiertos se incluyen “pasajes internacionales, alojamiento, comidas y seguros de saludo”. Asimismo, comentaron que los estudiantes seleccionados tendrán una jornada previa de orientación en la Ciudad de Buenos Aires en la semana previa a la partida a Estados Unidos.