Viernes 8.4.2022
/Última actualización 13:31
En medio de la polémica generada por la idea oficial de extender una hora más de clases en el nivel primario, se conoció un informe del Observatorio Argentinos por la Educación que revela el alto desgranamiento en la escolarización de los estudiantes del país sumado a los bajos niveles de aprendizaje. Arrojó que el 53% de los alumnos argentinos finaliza sus estudios en tiempo y forma, y apenas el 16% logra los conocimientos necesarios en lengua y matemática.
El documento analiza la trayectoria escolar de la cohorte que comenzó primer grado en 2009 y llegó al último año de la secundaria en 2020, utilizando los datos del Relevamiento Anual y las pruebas Aprender 2019.
En cuanto al primero de los indicadores, el Observatorio revela que -a nivel nacional-, de cada 100 estudiantes que comienzan su escolaridad en primer grado, solo 53 llegan al último año de la secundaria en el tiempo esperado (12 años después, a la edad de 17 años).
Como en todos los casos, el promedio nacional encierra una gran dispersión de situaciones: la provincia de Tierra del Fuego (71%), la Ciudad de Buenos Aires (66%) y la provincia de La Rioja (61%) registran las mayores proporciones de estudiantes que han llegado al último año de sus estudios de acuerdo al tiempo esperado, es decir en edad teórica.
La provincia de Santa Fe se sitúa apenas por debajo del promedio nacional, con un 49% de estudiantes que finalizan la escolaridad en los tiempos previstos. En el extremo más bajo de la pirámide están San Juan (38%), Corrientes (38%) y Misiones (39%) que son las que tienen menor proporción de estudiantes en edad teórica, en relación con quienes cursaron en esa misma condición primer grado 12 años antes.
Los investigadores encontraron altos niveles de repitencia y "desgranamiento" y sostienen que el 25% de los alumnos del último año de secundaria tienen sobreedad. El pico de la matrícula se alcanza entre el primer y segundo año de la secundaria, con más de 800.000 estudiantes inscriptos en cada uno de esos años, en el país. A partir de ese momento la matrícula decrece cada año, mientras que aumentan las tasas de abandono y de sobreedad, lo que sugiere que muchos estudiantes terminan dejando la escuela después de haber repetido al menos una vez.
El relevamiento profundizó luego en la variable "Porcentaje de estudiantes con edad teórica en el último año de secundaria y resultados satisfactorios y avanzados tanto en lengua como en matemática sobre el total de alumnos ingresados en primer grado de la primaria al inicio de la cohorte 2009-2020″.
En ese punto estableció que de cada 100 estudiantes que arrancaron primer grado en 2009, sólo el 16% llega al último año de la escuela secundaria en el tiempo esperado (año 2020) y que obtuvieron "conocimientos satisfactorios o avanzados" en Lengua y Matemática, según los datos nacionales de las evaluaciones Aprender 2019.
Santa Fe se ubica un punto por encima de la media, con 17%.
Las que están por debajo de ese 10% de conceptos elementales son: San Juan (8%), Catamarca (7%), Corrientes (7%), Misiones (6%), Chaco (5%), Formosa (5%) y Santiago del Estero (5%). En tanto, los porcentajes más altos se registran en CABA (33%), Córdoba (24%) y Tierra del Fuego (21%).
"El análisis integrado de los datos educativos muestra con claridad dos caras del sistema: no logra que todos los estudiantes terminen la educación obligatoria y no logra los aprendizajes suficientes. Es un sistema en crisis por el conflicto entre dos mandatos sociales: el tradicional, que entiende la escuela media como proceso de selección para la universidad –sin importar los que queden en el camino–; y el mandato actual, que pretende que todos tengan un nivel de formación que les permita desempeñarse en la vida. La realidad que evidencian los datos frustra a docentes, estudiantes y familias. No se trata de facilismo o rigorismo; sino de revisar qué y cómo enseñar", explica Sergio España, de la Asociación Civil Educación para Todos y coautor del informe.
Por su parte, Elena Duro, exsecretaria de Evaluación Educativa, indicó: "Que sólo 16 estudiantes de 100 alcancen a culminar su escolaridad en el tiempo teórico y con los saberes esperados encierra problemas profundos hasta ahora no asumidos. Afrontar una mejora en la calidad y en la inclusión requerirá, entre otros aspectos, centrar la formación docente inicial y continua en torno a prioridades, un pasaje de una educación basada solo en contenidos hacia una educación que en base a contenidos promueva capacidades y competencias, y prácticas de enseñanza y evaluación formativa que habiliten un acompañamiento real y efectivo de las trayectorias educativas".
El informe lleva por título "Desgranamiento y aprendizajes desiguales: las dos caras de la misma moneda", y pertenece al Observatorio de Argentinos por la Educación, con autoría de Irene Kit, Sergio España (Asociación Civil Educación para Todos), Gabriela Catri, Martín Nistal y Víctor Volman (Observatorio de Argentinos por la Educación).