Como un complemento necesario e indiscutible en la formación integral de los estudiantes, la carrera de Licenciatura en Terapia Ocupacional de la Universidad Católica de Santa Fe contempla distintos espacios de prácticas profesionales supervisadas (PPS), en los diversos ámbitos de acción que tiene la profesión. En ese marco, el Centro educativo terapéutico Azulín Azulado de Rafaela, les permitió a cuatro estudiantes de la Sede que la universidad tienen en esa ciudad llevar adelante sus prácticas.
La docente a cargo de las prácticas en Salud Mental, TO Camila Chizzini, comparte cómo fue el proceso que transitaron las alumnas en Azulín: "Ellos tenían organizada una feria, para vender diferentes productos que estaban realizando los jóvenes. Les propusieron a las alumnas que sus prácticas fueran reciclar unas agendas que habían sido donadas por diferentes librerías, y reestructurarlas para convertirlas en cuadernillos".
Las alumnas tomaron esta propuesta y la convirtieron en una verdadera intervención terapéutica, como una oportunidad para trabajar ciertas habilidades con los jóvenes de la institución. Entre otros aspectos, abordaron la sociabilización y la coordinación de los jóvenes entre sí, además del manejo de las maquinarias específicas que necesitaban para hacer la encuadernación, el anillado y el perforado de las hojas.
La experiencia fue muy positiva, y fue llevada hasta el final por las estudiantes, que acompañaron a los jóvenes hasta lograr un producto adecuado para la venta en la feria. A lo largo de las prácticas, las alumnas se aseguraron de que "los jóvenes puedan atravesar todo el proceso de lo que era ver la agenda desactualizada, poder ponerle las hojas nuevas, perforarlas, armar la agenda, redecorarla y luego hacer el packaging y venderla", describe la docente a cargo.
Dentro de la supervisión se fueron trabajando distintas cuestiones teóricas y prácticas. Ellas realizaron un primer período de entrevistas en la institución, para poder conocer a los profesionales y a los jóvenes. Luego hicieron una guía de evaluación y observación donde tomaron las características más importantes del funcionamiento de los talleres de la institución y de los jóvenes. A partir de eso armaron su plan de intervención, aplicado en la tarea de reciclado y rediseño de las agendas.
Sofía Stiefel, una de las cuatro alumnas que realizó sus prácticas con estos jóvenes expresaba muy satisfecha que los chicos "eran todos muy respetuosos, tenían ganas de trabajar. Para no trabajar siempre con los mismos, los hacíamos rotar, dependiendo también de la tarea que teníamos que hacer buscando que tuvieran la habilidad requerida".
En las prácticas supervisadas siempre hay un referente de la institución que realiza un seguimiento de los alumnos. En este caso fue la Terapista Ocupacional Leticia Zehnder. En palabras de la profesional, las chicas "trabajaron muy bien, fue la primera experiencia que tuvimos como institución de recibir practicantes de alguna carrera, y fue una experiencia sumamente grata, los chicos hicieron un vínculo muy fuerte con ellas, muy gratificante".
El vínculo fue recíproco, forjado en el trabajo y en espacios recreativos, como fue el festejo del día de la Primavera, o la despedida de las alumnas al terminar las prácticas. Para festejar el 21 de septiembre y la llegada de la nueva estación, realizaron un viaje durante el día: "Hicimos un pícnic, estuvimos todo el día, los chicos jugaron al básquet, en el playón, y disfrutaron mucho, también durante el viaje, ponían música, cantábamos, aplaudíamos", describió Sofía, agradecida por la experiencia.
"Para nosotros fue excelente, las alumnas tuvieron una instancia de práctica y aprendieron, pero nosotros aprendimos aún más. A veces cuando uno está hace mucho tiempo dentro de una institución, y conoce mucho a los concurrentes, sabe qué es lo que gusta, qué no. Con una mirada nueva, tal vez lograron objetivos que nosotros no nos habíamos planteado. Fue una experiencia enriquecedora desde todos los lados", manifestó la TO Leticia Zehnder.
Azulín Azulado es una ONG que hace más de 10 años está funcionando en Rafaela. Por la tarde funciona un centro educativo terapéutico, y por la mañana un centro de día. Desde allí, abordan a adolescentes y adultos jóvenes, que tienen distintos tipos de patologías que afectan su salud mental. Por ejemplo, retraso mental, autismo o espectro autista, síndrome de Down, esquizofrenia, entre otros", detalla Leticia Zehnder.
Un aspecto propio de la institución es que los chicos a los que acompaña, no sólo tienen alguna cuestión mental, sino que se encuentran también en un estado de vulnerabilidad social: "Son personas que en general no tienen obra social; sus familias no se encuentran en una situación económica estable, con un empleo fijo; viven en barrios con varias necesidades, en las afueras de la ciudad y donde el transporte no llega en días de lluvia; por ejemplo".
Desde la institución se trabaja con la dinámica de talleres de pintura, porcelana fría, estimulación cognitiva, y también de cocina. Año a año los talleres van cambiando, para darle a los chicos la posibilidad de ir explorando nuevos ámbitos o actividades.
"Es una linda institución, bien organizada. Personalmente me gustó mucho, disfruté estar con todos los concurrentes", declaró Sofía. La alumna destaca además que "todos los trabajos que vendieron los chicos habían sido hechos con mucha dedicación. Trabajan mucho la prolijidad, que se respeten los límites, los colores, sabiendo combinarlos, para que los productos finales sean agradables, y que la gente los pueda disfrutar".
Desde la Facultad de Ciencias de la Salud de la UCSF, la carrera de Licenciatura en Terapia Ocupacional se ofrece en las sedes Santa Fe - Virgen de Guadalupe-, Reconquista - San Jerónimo-, y Rafaela. Consultá el plan de estudios de la carrera en www.ucsf.edu.ar, o seguí a la Universidad en Instagram @UCSFoficial y @vivilaucsf.