El Litoral
“Esta entrega es televisada a Estados Unidos y en otros 125 países que ahora nos odian”, dijo el conductor del evento, Jimmy Kimmel.
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Télam
La 89na. entrega de los Premios Oscar empezó esta noche en el Teatro Dolby de Los Ángeles con llamados a la “unidad en Estados Unidos” por parte del presentador, el cómico Jimmy Kimmel, quien ablandó las críticas que a priori se presagiaban contra el mandatario Donald Trump.
“Esta entrega es televisada a Estados Unidos y en otros 125 países que ahora nos odian”, abrió Kimmel entre risas y aplausos, tras lo cual agregó que “el país está dividido” y que si “cada uno de ustedes trata de tener una actitud positiva podemos hacer que este país vuelva a estar unido”.
El primer Oscar de la noche fue para Marhershala Alí como actor de reparto por su trabajo en “Luz de luna”, de Barry Jenkins y proyectada en la Competencia Internacional del Festival de Cine de Mar del Plata.
La gala había arrancado con un show de Justin Timberlake, que hizo bailar a los presentes con un canción alegre y movediza, que contrastaba con la bronca política emulada por varios de los artistas que pasaron por los micrófonos de esta nueva entrega de estos lauros.