Viernes 22.7.2022
/Última actualización 10:14
Este sábado 23 a las 18, se presentará en la Casa de los Gobernadores (Boulevard Gálvez 1274) el libro álbum infantil “Un juego de tazas” editado y publicado por Periplo Ediciones. La autora del cuento es Melina Barrera, de Buenos Aires, pero las ilustraciones estuvieron a cargo de la santafesina Yuyis Morbidoni. La reunión, que estará moderada por Agustina Lescano, intentará desvelar la “cocina” de un libro infantil, en este caso sostenido por una narración en la cual “la rutina se disuelve como un terrón de azúcar”.
"Un juego de tazas", el libro que ilustró Morbidoni. Foto: Periplo“Fue un proceso largo que llevó poco menos de un año en el cual fuimos regulando las distintas interpretaciones que cada una tenía sobre la historia. Melina, la autora, escribió el cuento hace bastante tiempo y tenía muy marcado lo que quería con el libro. La historia trata sobre un grupo de mujeres que se juntan a tomar el té. Y mi primera interpretación fue que eran niñas disfrazadas. Probamos esa versión, después otras, hasta que fuimos encontrando esas mujeres y ese contexto que ya formaban parte del imaginario que tenía Melina”, explicó Yuyis en una entrevista concedida a este medio.
Tras realizar estudios en su ciudad natal, la santafesina Yuyis Morbidoni continuó su formación en la Academia de Bvellas Artes de Bologna, en Italia. A partir de ahí, se enfocó en la ilustración infantil. Es autora integral de “My pets”, un libro interactivo publicado por Piboco y trabajó como ilustradora de “Una porción de Cielo” y “Te regalo un día”, publicados por el Ministerio de Educación de Santa Fe.
"Un juego de tazas". Foto: PeriploAunque construyó publicaciones propias, Yuyis trabajó en varios proyectos consistentes en diagramar las ilustraciones para textos de otras personas. “Entiendo que en ese caso se produce algo que es la autoría compartida. Es necesario encontrar puntos en común, el ilustrador quiere decir algo más que el texto, poner su impronta. En ‘Un juego de tazas’ ocurre algo de eso con las hormigas. Representan un elemento que no está dentro de la historia pero las incluí en las ilustraciones. Y hay un juego, porque las hormigas se roban los scones. Ocurre algo pequeño y silencioso, pero que fue mi modo de aportar algo. Compartir la autoría implica ir hacia adelante y hacia atrás para encontrar un lenguaje”, sintetizó.
La pregunta: ¿cómo escribir para niños? contiene para Yuyis varias respuestas. “Varía en función del grupo etáreo. No hay un manual al respecto, pero creo que se trata de mostrar que infancia queremos tener. Si al ilustrar tengo que poner juguetes, nunca marco si son de varón o de mujer. Si tengo que poner un padre que muestre afecto lo hago, aunque no forme parte de la historia. Muestro distintos tipos de pieles. Trato de incluir, de algún modo, la diversidad y de fomentar una visualización diversa y más libre. Ahí comienza el cambio cultural, en la posibilidad de mirar otras cosas”, manifestó.
Fragmento de "Un juego de tazas". Foto: PeriploRespecto a ilustrar en contextos sociales y culturales diferentes, Morbidoni habló de cuestiones muy sutiles. “Por ejemplo ‘My Pets’, mi primer libro, trata de animales que se pueden construir en la casa. Juega con la pregunta ¿Cuántos animales puedes tener? Animales que se arman con cucharitas, tazas, tenedores, mesas, sillas. Como ese libro se publicó en Dinamarca, tuve que utilizar el mobiliario en función del lugar. Los sillones que usamos para sentarnos en la vereda allá no están. Hay un tipo de estufa que acá no existe. Pero son cosas concretas. Hace poco hice un libro para una editorial de España y no hay grandes diferencias”, afirmó.
En estos momentos, Yuyis trabaja en base a un libro propio basado en la tesis que realizó en la academia de Bolonia. Pero se hará un tiempo para realizar un taller de ilustración el domingo 31 de julio, de 16 a 18, destinado a niñas y niños en la Casa de los Gobernadores. “Será un encuentro para jugar y dibujar explorando la magia de los papeles, los lápices y el libro álbum ‘Un juego de tazas’”, informó. La actividad es gratuita y no es necesario sacar turno.