Jueves 6.7.2023
/Última actualización 13:04
Se puede decir que en algún momento Pablo fue colorado. Se nota en su barba y cabello, un pasado del color ladrillo que anduvo luciendo entre los primeros años de su vida. Los siguientes lo fueron decolorando poco a poco hasta quedar en un rubio oscuro, un 6/0 en la escala de tonalidades que cualquier carta de colores ofrece en la peluquería. Sucede asiduamente con muchos colorados de nacimiento que van perdiendo ese tono para apaciguarse en su fase natural, en este caso denominada altura seis. Lo que no se apaciguó fue la creatividad de Pablo. La breve historia mínima del colorado o cobrizo viene al caso de su libro “Nadie es tan fuerte”, una sensación de que algo pasó en el medio, que no se dijo, pero que naturalmente llegó al 6/0 y continuaremos viéndolo con ese tono hasta que en algún momento nos cuente otra historia u otro cuento lleno de palabras puestas en su justo lugar. “Nadie es tan fuerte” fue publicado por la editorial porteña Modesto Rimba en el año 2017, y para orgullo santafesino fue finalista del prestigioso Premio Hispanoamericano de Cuentos Gabriel García Márquez. Un libro al que no le sobra una sola letra ante historias breves que, a través de un lenguaje sencillo, se llenan de contrapuntos domésticos que podrán revelarse en bares o en el simple recorrido por la ciudad de Rosario.
Si a Pablo le hiciéramos un corte desmechado en donde la irregularidad minaría toda su cabeza, no podríamos coincidir con la justeza de palabras que cada cuento ofrece porque hay piezas acomodadas que se deslizan como adentro del tablero de ajedrez. En la escritura de Pablo, es imperceptible y la incomodidad del contrincante frente al tablero, es la del lector que irá descubriendo poco a poco la jugada. Porque algo sucedió, un desliz breve, el traspaso de una idea o el alfil puesto adrede en el ángulo justo para incomodar: el gran logro del autor, que lo imperceptible sea advertido por el lector. Claro que nadie es tan fuerte como para cerrar una idea compleja, que a la vez perfeccionada produce belleza de palabras y de lectura.
Foto: Gentileza del autorLa mayoría de los cuentos suceden en la ciudad de Rosario. En “La reina de España”, el narrador ha ingresado en la mente de dos personajes para encontrarse en el Parque de España, que se encuentra a orillas del Río Paraná. El narrador crea un varón inseguro que se va llenando de supuestos y contradicciones en la espera de una cita con su ex pareja en ese parque. Él encuentra en ella una nitidez que nunca había visto. Él redunda en un continuo palabrerío que parecen soliloquios tirados al vacío. Ella los escucha como algo que se repite desde siempre y se los había contado todos, incluso podría adivinarse la cara de desinterés de ella. La novedad que ella le contará es tan fuerte como el nombre del libro.
“Me crie en el centro de Rosario. Frente al Parque España. Antes de que se hicieran las obras para el colegio y las salas de actos. Cuando todavía no era conocido y había sólo una plaza. Por eso va ese detalle en “La reina del Parque de España”, en el que hablo de las obras del Parque”. Dice Pablo.
Luego vendrá lo implícito, el enorme trabajo de lo no mencionado que se advertirá en la deducción del lector. Los personajes en movimiento entre bares o casas desde donde buscan dar un sentido a sus vidas intentando relacionarse a través de breves momentos que podrían ser determinantes. Serán los protagonistas de la vida misma: padres, madres, hijos, amigos. Aquellos que no esperarán permanecer quizás en ese 6/0 y a lo mejor el paso de los años y las canas terminen de reemplazar aquello que alguna vez fue colorado para que Pablo nos lleve a otro tono. El reflejo de una cana quizás pueda ser un cambio y leerlo a Pablo, otorga en cierto sentido esa búsqueda.
Foto: Gentileza del autorEn el cuento “El mejor regalo del mundo”, el narrador se acerca a su personaje cuyo nombre es Pereira, para ponerlo en la peripecia de la compra del regalo de cumpleaños que deberá llevarle a su hija. Aparentemente olvidó la fecha y piensa en los reproches de la madre, su ex mujer. Un clásico error del hombre cuando debe comprar regalos. Otra vez Colacrai, coloca en la circunstancia al vendedor, a la mujer y a Pereira, pensando por los tres en pleno indirecto libre que llega casi al fluir de la conciencia, ¿cómo pensaría ella? ¿Cómo pensaría él? Y qué responderá el vendedor para lograr su negocio del día. Incluso la traslada a ella a pensar en tiempo presente ante los reclamos que él deberá soportar mientras el lector imagina a través del narrador toda la escena. El narrador al cabo se fuga por unos instantes para que el resto de la escena sea sólo de ellos. Un trabajo de piezas acomodadas que rayan la perfección de un ajedrecista ruso.
En “Ese mundo ya no es nuestro”, (Modesto Rimba 2022) el juego del ajedrecista de piezas acomodadas se queda corto. El desafío es más intenso y la jugada será de un vuelo superlativo. A diferencia de “Nadie es tan fuerte”, hay un crudo inicio, un léxico con otra agilidad. Un accidente de tránsito del narrador en primera persona, el pibe del quiosco en la puerta de la casa, su compañera en acción, los hijos, los médicos, la pasividad de la quietud esperando a que el cuerpo sane. Cada acto, situación, escenario va en fragmentos cortos. El quiosquero visitará por las noches a la primera persona que se encuentra en su casa esperando curarse del accidente y le contará una enredada historia que crecerá y anudará como en Las mil y una noches. Porque los dos cuentos siguientes en el resto del libro estarán ligados al primero; el que marcará todo el terreno como un agrimensor. Pablo aborda los temas del amor, el deseo en todos sus aspectos, los afectos, las cuestiones de paternar y maternar o los miedos; pero el miedo que no tiene es el de abordar su relación con la literatura frente al lector. Una cuestión que lo lleva a trabajar tan sesudamente que han llegado a compararlo con Antón Chéjov, Katherine Mansfield o Raymond Carver.
“El libro salió en noviembre del año pasado. Lo presentamos en la Biblioteca Argentina de Rosario y luego en Buenos Aires. Lo hicimos un poco tarde porque después vinieron las fiestas y el verano como que plancha todo. Pero yo quería sacarlo sí o sí por un tremendo y difícil año que habíamos pasado con mi compañera. Este nuevo libro tiene algunas diferencias con los anteriores. Son tres cuentos más largos y están elaborados con una estética mucho más fragmentada. Son trabajados con fragmentos y los tres tienen como un mundo común que se relaciona con la escritura. Personas que son escritores que están dando vueltas alrededor del libro como si fueran una especie de cuentos unidos entre sí, o no. Hay un hilo conductor que está puesto ahí, está medio escondido. Algunos lo han visto, otros no, pero hay un hilo conductor”. Cuenta Pablo.
Foto: Gentileza del autorPablo Colacrai nació en 1977 en Noetinger, provincia de Córdoba, pero a los quince días su familia se trasladó a Rosario. Es Analista de Sistemas, Licenciado en Comunicación Social y en 2016 fundó el taller literario Alma Maritano. Publicó los libros de cuentos La noche en plena tarde (Río Ancho Ediciones, 2012, Rosario), Nadie es tan fuerte (Modesto Rimba, 2017, CABA) y Ese mundo ya no es nuestro, en noviembre de 2022 (Modesto Rimba). Sus cuentos recibieron premios y menciones y fueron incluidos en diversas antologías y revistas literarias de Argentina, Colombia, Ecuador y Bolivia.