Martes 24.10.2023
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“Febriles” es el más reciente libro del escritor y periodista Germán Ulrich. Incluye tres historias que difieren entre sí, pero tienen varios puntos en común. La provincia de Santa Fe como escenario geográfico, un determinado momento de las primeras décadas del siglo XX como paréntesis temporal y la búsqueda de historias que funcionan, en cierto punto, como una contracara de la idea de proyecto que comenzaba a parirse dentro de esas coordenadas.
“Caníbal”, que se basa en la historia real de un isleño cuyas acciones demenciales horrorizaron a la sociedad santafesina, “La ficha”, ubicada en un escenario prostibulario rosarino y “La virgen”, que evoca un mito rural y sopesa sus resonancias, hallan en la prosa de Ulrich una idea de totalidad “febril”.
“En principio iba a ser solamente una novela corta, pero como era demasiado corta decidimos buscar otras historias que tuvieran que ver, para no hacer un rejunte de textos, sino un libro con una integralidad. Y lo que encontramos en estas tres historias es que tienen, de arranque, una base real”, explicó el propio autor en una entrevista concedida a este medio.
Gentileza Contramar“La literatura más allá de esa base real, permitió buscar otros caminos. En el caso de ‘Caníbal’ los diarios de la época contaron el suceso, pero lo que faltaba era indagar sobre lo que le pasó a la sociedad con este personaje, lo cual demandó una investigación más amplia y sociológica, si se quiere”, aclaró Ulrich.
Pensar la ciudad como receptora de lo salvaje y de lo inaceptable fue una de las premisas centrales. En esa línea, el desafío fue encontrar historias que se ajusten. Lo cual se relaciona directamente con la cita que que abre el libro, que pertenece a Friedrich Nietzsche: “El progreso no es más que una idea moderna; esto es una idea falsa”.
Otro eje del libro es la observación de una especie de contracara o lado B de una Argentina que venía del centenario, que había sido esplendoroso. “Si uno se va a las aguafuertes porteñas de Roberto Arlt, él iba a los barrios de Buenos Aires, la ciudad más rica de Latinoamérica y se encontraba con gente que vivía en condiciones miserables. Esto es similar a la historia del caníbal en ‘Febriles’, ubicada a pocos kilómetros de un centro poblado”, señaló el autor.
La mención a Arlt no es antojadiza. Fue una de las grandes influencias de Ulrich. “Me parece un autor fundamental. ‘Los siete locos’ me parece una de las grandes novelas argentinas del siglo XX. Más allá de eso, hay una forma de ver el mundo, no solamente desde la literatura, sino también desde el periodismo. Él hizo un aporte muy muy importante en ese sentido, se movió mucho en las redacciones”, opinó.
Gentileza del autorAsí, los textos incluidos en “Febriles” cumplen la función de mostrar realidades en crudo, sin emitir juicios y sin opinar. La actitud que prevalece es la de utilizar las herramientas que ofrece la literatura para desglosar personajes, situaciones, contextos para que después sea el lector el que complete.
Al tratar de ubicar a “Febriles” dentro de su propio itinerario como escritor, Ulrich señaló que el intento, además de contar historias fue el de concebir, tomando como base los aprendizajes como lector de autores como Juan José Saer, “un pequeño y modesto universo en el cual esos textos se puedan integrar e interrelacionarse”. Finalmente, señaló que espera poder lograr la identificación del lector con el texto, para que quede guardado en la memoria.