El sábado 25 de febrero tendrá lugar en el Espacio Comunitario Raíces, de Arroyo Leyes, el primero de un ciclo de encuentros donde dialogan arte y naturaleza. Se presentarán Carlos "Negro" Aguirre estrenando en la región el grupo Almalegría; el santafesino Barro y el cantautor Pedro Pagés & Río. Habrá danzas, artes visuales, poesía, y una selección de músicas del mundo a cargo de Emi Wingeyer.
La primera estación de "Artedeser" reúne a tres agrupaciones musicales nacidas a ambas orillas del Paraná. Foto: Gentileza producción
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Un ciclo de encuentros artísticos donde el entorno dialoga con los creadores manifestando un hecho estético que honra los ciclos naturales. Esa es la propuesta de ARTEDESER Festival de ofrenda al litoral, que se realizará el sábado 25 de febrero, desde las 19 hs. en el Espacio Cultural Comunitario Raíces, de la ONG Acción Educativa, en la calle 90 B de Arroyo Leyes (ruta 1, km 16.700).
Esta iniciativa totalmente autogestionada junto un grupo de personas que vienen desarrollando actividades comunitarias en el espacio inspiradas en el Buen Vivir, dan continuidad a recordados festivales que se realizaron allí durante varios veranos prepandèmicos, impulsados por Acción Educativa junto al colectivo artístico santafesino Hugo y Los Gemelos (Me quiero dar un Gustock, Ananá der Festival y Guaranì der
Festival). En esta oportunidad, con este festival se inicia un ciclo de encuentros que tomarán forma en cada estación del año, con música en vivo, danzas, visuales y retroproyecciones, poesía, tiendas de creaciones y comidas saludables. Cada encuentro, una estación, con su expresión natural plasmada en una de las 33 especies de árboles sembrados en Raíces por el equipo de educación popular de Acción Educativa, desde que nació el espacio, en el año 2005. En la edición Verano se ofrenda al Ingá, un árbol nativo que crece a orilla de los ríos en las provincias del litoral argentino, y de los vecinos Uruguay, Paraguay y Brasil. De fronda perenne, sutil flor blanca como plumerillo y fruto suave y dulce, su nombre refiere a la cobertura de una semilla acuosa. Fue un árbol ceremonial para las tribus originarias del litoral, que lo elegían como refugio para sus celebraciones.
Foto: Gentileza producción
Música en vivo
La primera estación de “Artedeser” reúne a tres agrupaciones musicales nacidas a ambas orillas del Paraná. Almalegría, el más reciente proyecto colectivo formado por el compositor, pianista y multiinstrumentista entrerriano Carlos “Negro” Aguirre se propone “despertar el alma alegre que habita en cada persona que va a escucharnos”. Por primera vez en vivo en el litoral, se presenta este grupo que se basa en la experimentación rítmica, donde las interpretaciones entran en diálogo con la danza para invitar al movimiento libre.
Un repertorio abierto y lúdico que se gesta en Bajada Grande, a orillas del río Paraná, desde mayo de 2017, con modalidad de laboratorio. Con el foco puesto en el disfrute del proceso y no en el resultado, “hay un motor y destino de todas estas composiciones que es la posibilidad de que se puedan danzar libremente -cuenta el Negro-. Para poder plasmar las sonoridades que imaginábamos echamos mano, tanto a instrumentos musicales que nacieron como tales como a “cotidiáfonos” (objetos que forman parte de nuestra cotidianidad).
Integran Almalegría: Luciana Insfran: voz, acordeón, rhodes y percusión Fabricio Amaya: guitarra eléctrica y coros Sebastián Tozzola: bajo fretless y coros Iván Petrich: vibráfono, percusión y coros Gonzalo Díaz: batería, percusión y coros Carlos Aguirre: voz, piano, rhodes, guitarra y composición. Se suma a la grilla del festival, la santafesina agrupación Barro, cuya música se impregna del gran abrazo de la naturaleza: el río, el canto de los pájaros, los colores del cielo, las estrellas, las flores. La canción se abre al juego, a la búsqueda de los timbres sonoros que esté invocando con su poesía. Así, cada canción, cada historia, cada paisaje representa su tinte único y especial.
Barro ha recorrido una historia de ríos, mares y ciudades con la canción ecléctica del litoral, que sugiere una forma de decir, de cantar, moldeada por la diversidad cultural que nos atraviesa. Sus canciones nacen de una mirada sensible y desprejuiciada de las tradiciones heredadas, las impuestas y las que salimos a buscar y elegimos como propias. Integran Barro: Cintia Amorela Bertolino: voz y percusión; Franco Bongioanni: voz, guitarras y piano; Agustina Cortés: saxo, teclados, percusión y voz; Gonzalo Díaz: batería, percusión, guitarra, teclado y voz.
Río es la reciente formación con la que el cantautor del litoral Pedro Pagés (composiciones, guitarra y voz) explora sus canciones junto a otros dos reconocidos músicos de la escena regional: Sergio Checho Rosa en percusión y coros, y José Colo Ayala en bajo. Proponen un recorrido por las más bellas composiciones de Pedro (grabadas en sus dos producciones discográficas), que alzan vuelo con nuevas sonoridades y se unen a recientes canciones creadas por el joven cultor del género, prolífico creador de gemas musicales, reconocidas por una lírica muy personal. Pedro es un incansable buceador de la hondura poética que encuentra una vertiente expresiva única con su apasionada musicalidad. Y en trío se vienen presentando en los escenarios santafesinos generando redes de colaboración desde la autogestión.
Foto: Gentileza Pablo Martínez
Libre expresión
El festival propone que cada asistente experimente la libre expresión, convidada por los artistas que participan en esta edición, a través de las artes visuales, la danza, las proyecciones y la poesía. Estarán con su arte Valeria Marioni, artista visual santafesina, acompañante de procesos expresivos-creativos, investigadora y creadora de materiales artesanales. Propone el dibujo como una forma de conversar con lo silvestre y re-conectar con la tierra que somos. Para contagiar a la danza colectiva estará Carolina Condito, bailarina y poeta rosarina. Busca la poesía a través de la danza y conmoverse en el movimiento, en el encuentro de los cuerpos.
Luego de la presentación de la música en vivo, la cantante y selectora musical Emilia Wingeyer propone un viaje con todos los sentidos por los paisajes sonoros de las más diversas culturas.