La agrupación New Beats Sinfónico Solidario, reconocida por sus versiones de las canciones de The Beatles, se presenta el sábado 30 de julio a las 20.30, en la Sala Mayor. Como artistas invitados participan el Coro de la UNL, dirigido por Alfonso Paz; el tenor Andrés Novero y el grupo Kyrón; la escuela Playing for Change, de Diamante; y Vanda & Janise.
Los fondos recaudados serán destinados a la Asociación de Clubes Argentinos de Servicios (Acas-Escuelas de Frontera), a la Fundación Mateo Esquivo y para la adquisición de raciones de alimentos producidos por la Planta de Alimentos Nutritivos de la UNL que serán donados a diferentes instituciones.
Las entradas pueden adquirirse en la boletería del Teatro Municipal o en www.passline.com. Las anticipadas están a la venta a un valor de: plateas y palcos, $2000; tertulia, $1600; gradas, $1200. El día de la función se conseguirán: plateas y palcos, $2500; tertulia, $2100; gradas, $1700.
Para conocer más sobre la propuesta, El Litoral conversó con los responsables de este evento cultural y social: Alejandro Bianchi y Juan Pablo Trotta (fundadores de New Beats), Paula Piedrabuena (coreuta y coordinadora de Desarrollo Universitario de la UNL), Alejandro “Ringo” Peralta (gestor local, a través de Ringo Producciones) y Andrés Novero (cantante invitado y director reemplazante en este show).
Formación y educación
-¿Cómo surgió el proyecto de hacer la música beatle con sonido sinfónico, y cómo tomó una dimensión solidaria?
Bianchi: -Lo arranqué solo, y después se sumó Juan Pablo; gracias a Dios se van sumando nuevos personajes para que esto siga creciendo. Yo vengo de la industria, se me incendió una fábrica; entonces dije: “Me voy a empezar a dedicar a la música otra vez”, y fundé de una radio multimedia online, donde se pasaba música, y empezaron a aparecer periodistas, personajes, mucha gente.
En el interín me conecté con una organización que se llama Playing for Change, que construye escuelas de arte y música en países donde hay niños de bajos recursos. En Argentina hay dos escuelas y nosotros nos vinculamos con ellas.
-¿Dónde están esas escuelas?
Bianchi: -Una está en Diamante Entre Ríos, y la otra en Cinco Saltos en Río Negro. Playing for Change fundó 15, 16 escuelas en diferentes países (Argentina, Brasil, México, en África y Asia); tienen una fundación y una productora. Que la armó Mark Johnson un ingeniero de sonido que un día salió a la calle a filmar a un afroamericano tocando “Stand By Me”; es el que hace videos con diferentes músicos internacionales en el mismo video. Se conectó con una amiga multimillonaria que le bancó su gira y empezó a hacer videos por todo el mundo, conociendo a músicos callejeros. Armó una banda callejera, a la que profesionalizó; con esa banda hacen giras mundiales, facturan, y parte de esa facturación va a la fundación que gestiona las escuelas.
Me comuniqué con ellos, les ofrecí el espacio: les dije: “Me puedo ocupar de ser su partner en Argentina” y les pareció bárbaro; arrancamos, hicimos un programa. Un día me habla Patrick Liotta, hijo de Domingo Liotta qué trabajó con (René) Favaloro en la invención del corazón artificial. El hijo nada que ver con eso: armó la escuela de Playing for Change porque era amigo de Mark Johnson; nació en Estados Unidos, se volvió a la Argentina, fue a la casa de su papá y armó la escuela.
Me dijo: “Estoy en Argentina hay que juntarse”. Nos hicimos amigos y empezamos a armar el proyecto musical que yo tenía, amateur, para que sea profesional, inspirándose en lo que hacían ellos: con la banda generar fondos para bancar las escuelas. Porque los músicos por supuesto trabajan de músicos, y tienen que ganar dinero por su trabajo. Se armó como una empresa, hoy ya es una productora, una herramienta para generar puestos de trabajo para toda la gente que gira en torno a lo que es el evento, y para generar unos fondos que se aplican como aportes con calidad solidaria: se aportan a estas escuelas de Playing for Change; a otra organización de acá de Argentina que se llama Acas que construye escuelas de frontera en la Argentina (que hace ya más de 40 años que está fundada y tiene 20 escuelas instaladas en todo el norte del país, dándole educación a chicos que no tendrían acceso).
También en todos los lugares donde hacemos el show buscamos alguna organización que haga alguna gestión solidaria, para tratar de dejar un aporte también ahí. En este caso en Santa Fe lo estamos haciendo con la Fundación Mateo Esquivo y con la Universidad Nacional del Litoral: vinculamos el proyecto con la UNL, con la Universidad Nacional de Rosario, y estamos avanzando sobre otras universidades del país. El proyecto está vinculado con lo que es la educación y el desarrollo de los niños y jóvenes.
-Fundamentalmente para aportar a la educación artística.
Bianchi: -Sí, porque tiene falencias, y nosotros aportamos un granito de arena desde nuestro lugar para tratar de que eso mejore. Me parece que la energía hay que ponerla en eso.
Yendo puntualmente a lo artístico, arrancó como un proyecto cultural solidario tomando como herramienta fundamental la obra de Los Beatles, porque fueron los generadores del gran movimiento del rock internacional y no tienen barreras geográficas ni de edades. Nunca imitarlos, porque seríamos uno más del millón.
-No son el prototipo de las bandas que hacen tributos.
Bianchi: -No, la palabra tributo acá no existe, está prohibida. Somos una obra propia en sí misma, que toma la obra de los grandes artistas y trata de ponerle su arte propio. Arrancamos con Los Beatles y sigue la música argentina. porque esto no tiene techo: la idea es seguir creciendo y elaborando diferentes formatos y obras de diferentes artistas, para poder estar permanentemente presentando la obra y repitiéndola en diferentes ciudades; y creciendo, incorporando gente, invitando artistas.
La idea es que sea una plataforma de recepción artística donde todos puedan participar, y donde todos tengamos como objetivo central divertirnos con la música y ayudar a los niños a acceder a la educación a través de la música.
Trotta: -La Universidad Nacional del Litoral está fabricando alimentos no perecederos. Vimos que a través de esa organización que ellos tienen también podríamos colaborar con la sociedad; no es que nos limitamos a una cuestión de que tiene que ser una escuela de música: en cada lugar buscamos cuál es el espacio donde mejor aporte podemos hacer, donde más podemos colaborar.
En el caso de la UNL lo hacemos en ambos aspectos, porque también lo hacemos a través de la música: por eso es que se suma el Coro. En ese sentido nos asociamos perfectamente en ambos puntos que tenemos como eje.
Academia abierta
Piedrabuena: -Sí, vengo como coreuta, pero también trabajo en la Universidad, en la Secretaría de Extensión, que es muy importante: es este pie muy fuerte, al ser una universidad pública, a devolverle a la sociedad. Dentro de Extensión y Cultura una de las propuestas es el Coro de la UNL, entonces hacemos nuestro aporte artístico: esperamos estar a la altura.
Por otra parte esto que decía Juan Pablo. La Planta de Alimentos, si bien surge con uno de nuestros padrinos que es el Banco Credicoop, como una asociación, hay algo que nos sirve a nosotros muchísimo que es la difusión: no se sabe que la Planta (no solo en la ciudad sino en la provincia) trabaja con muchísimas escuelas y comedores escolares en forma solidaria. Estos alimentos que se producen en forma nutritiva son donados.
Piedrabuena: -Y el súper guiso. Incluso en algún momento se han cooperado con las Escuelas de Trabajo en la ciudad, y SOS Música: también ahí, a través de Extensión, la Universidad hace su aporte. Entonces se une lo artístico sin perder de vista el fin solidario.
-Extensión cultural y vinculación tecnológica.
Piedrabuena: -Exactamente.
Bianchi: -Nos comunicamos con la Universidad a través de un mail y rápidamente nos llamaron a una reunión. Nos encontramos con el rector y seis personas más, que estuvieron dispuestas y tomaron el proyecto: les pareció genial. Y hablando de todo esto salió lo del área de alimentos, viendo dónde podíamos conectar. Porque nuestra idea es que la Universidad le brinde al proyecto un marco institucional que lo consolide. Al tiempo pensábamos cómo ayudarla, y en este espacio podemos un aporte de dinero para que se compren alimentos para preparar esos productos.
Lo que necesitamos siempre es tomar contacto con gente local, artistas y productores, como en el caso de Ringo: está trabajando en la gestión en Santa Fe, y para nosotros es importante ese socio estratégico; si no es muy difícil llegar al público, más en la primera vez que venimos a Santa Fe. La idea es dejar la estructura visible en todos los lugares donde vamos, para que se repita con frecuencia.
Peralta: -Hace dos años que Ale me llamó, me dijo: “Quiero hacer esto”. Fue un gran desafío, me incorporé con Rocko Producciones, que es mi productora. Ahí empecé a investigar, me encantó la idea, pero después vino la pandemia y no se pudo hacer nada. Pero cuando se empezó a levantar volvimos. Le comenté: “Tengo una fundación que se llama Mateo Esquivo”, ya había hecho dos recitales a beneficio. Me incorporaron, y propuse sumar dos cantantes de Santa Fe: Janise y Vanda. Van a hacer juntas un tema de Los Beatles (“Nowhere Man”), con la guitarra acústica de Janise.
Trotta: -Donde vamos nos gusta tener esa doble vinculación con la ciudad que nos recibe: también en la faz artística (además de la solidaria). Tenemos una serie de invitados locales que van a estar participando del show con nosotros, como es el caso de Andrés.
Repertorio ampliado
-¿Cómo es la reelaboración del repertorio de los creadores?
Novero: -En esta oportunidad voy a estar reemplazando al director oficial, Nelson (Coccalotto), que trabaja con ellos siempre. El año pasado yo había entrado por una invitación de un amigo en común que tenemos con Alejandro que es Pedro Farante, el arreglador oficial. Con Pedro somos amigos hace mucho tiempo, me dijo: “¿Querés cantar en ‘Oración del remanso’?”. Ahí entré, nos conocimos con Ale, y se entabló esta relación.
En un momento fuimos a tocar a Rosario con el trío Kayrón, debutamos allá y Ale quedó fascinado. Como quería que participe con la “Oración”, me propuso tocar un par de temas con el trío. Después este ofrecimiento para hacerme cargo de la dirección musical fue por reemplazo de Nelson: estamos confeccionando las partituras, estudiando a full para los ensayos de la orquesta y el coro, y después el ensamble.
Tengo experiencia en haber dirigido orquestas en Rosario, ahí conocí a Pedro. Lo puedo llevar adelante sin ningún problema. Acá en Santa Fe participo del Coro Provincial, tengo una actividad musical a la que me dedico. Esperemos estar a la altura.
-¿Como se trabajan los arreglos para esta formación?
Trotta: -El show consta de una banda eléctrica, varios solistas. Después hay una orquesta con cuerdas y vientos metales; tenemos coro. Es un número de artistas muy lindo, muy interesante; buscamos hacer un show de un nivel muy bueno: desde lo musical, desde toda la puesta arriba del escenario. Las experiencias que venimos haciendo son muy lindas, de cómo se engancha la gente, se ponen a cantar con nosotros. Buscamos temas que la gente conozca, que se identifique con esas canciones.
Bianchi: -Suena distinto: si hablamos de Los Beatles van a escuchar la letra y la melodía; pero toda la parte rítmica y de arreglos los agrandan. Las orquestas sinfónicas enaltecen el arte musical (bien armado, por supuesto). Trabajamos mucho sobre la primera obra de Los Beatles, que son temas muy simples; eso te permite darlo vuelta como quieras.
-Después tienen una obra más sinfónica, como “Eleanor Rigby”.
Bianchi: -Sí, pero estos son los más cantables. Toda la obra de Los Beatles ha sido “para arriba”: amor, paz, “vamos para adelante”, “a no pelearse, muchachos, a ser amigos”.
-¿Cuánto de Beatles y cuánto de otros autores?
-Tenemos 35 temas armados de Los Beatles, pero el show va a tener 18 temas, más los que hacen los invitados (que serán tres o cuatro más). Después tenés nueve temas de la obra argentina. Y de a poquito vamos a ir intercambiando: el año que viene quizás vengamos con algún temita beatle y muchos más argentinos. En el Monumento (a la Bandera), en Rosario, este año, vamos a hacer toda música argentina. En Paraná vamos a estar el 2 de septiembre, con otros invitados: Carlos Puyán (un tenor del Colón), una invitada especial que todavía no podemos nombrar, porque no confirmó; pero le hicimos un tema de ella para que venga.
Trotta: -Dentro de la música nacional estamos haciendo música de Charly García, Spinetta, David Lebón, Fito Páez, Los Rancheros y Jorge Fandermole.
Bianchi: -Está todo muy atado, porque todos los músicos argentinos salieron de Los Beatles. Estamos haciendo el recorrido de la música. Después el proyecto sigue con obras clásicas adaptadas, como por ejemplo “Carmen”, con el rock, el pop, el funk, el soul. Hay mucho material artístico para desarrollar en simultáneo.