on muchos los famosos que han pasado a la historia por los icónicos peinados que han llevado a lo largo de su carrera. Y no hablamos solo de Jennifer Aniston, que cada temporada de Friends convertía en tendencia mundial el corte que llevaba su personaje Rachel; sino también de futbolistas como David Beckham, que durante la primera década del siglo XXI era el espejo en el que se miraban los hombres que querían presumir de modernos con looks ahora tan discutidos como los mullet o las crestas.
Tenés que leerBritney Spears reeditará su álbum "Glory" y contaría con la colaboración de los Backstreet BoysPero si hay alguien que muy a su pesar pasó al imaginario popular por su pelo, o mejor dicho, por su falta de cabello, fue Britney Spears. Aquella noche de 2007 en la que, huyendo de los fotógrafos que la acosaban, entró en una peluquería de Los Ángeles para raparse al cero la cantante se convirtió en un mito. No el que ella esperaba, pero mito.
Desde entonces, la autora de Gimme More nunca ha vuelto a ser referente en lo que a estética se refiere. Su música sigue triunfando, por su puesto, pero aquellos años en los que todo lo que se ponía era copiado pasaron. Aunque quién sabe si esto cambia ahora que acaba de hacerse un cambio de look radical llevando el pelo más corto que nunca.
De nuevo coincidiendo con un momento vital delicado en el que está luchando para que su padre deje de ser su tutor legal y convertirse ella al fin en la única responsable de sus actos y sus finanzas; la princesa del pop ha estrenado en Instagram su nueva melena. Una que, por cierto, recuerda mucho al mítico ‘Rachel’ al que hacíamos antes referencia y que tanto se llevó en los 90.
“Acabo de cortarme el pelo. Ya sabéis lo que dicen: afuera con lo viejo, adentro con lo nuevo”, escribía Spears junto a una foto en la que aparece en primer plano con el que es definitivamente el look del momento.