Viernes 23.7.2021
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En estos tiempos turbulentos, donde es más frecuente escuchar la palabra “cierre” antes que “apertura”, Silvia Montrul junto a un grupo de personas entusiastas pusieron en funcionamiento un nuevo ámbito destinado a las actividades culturales. Se trata de Valeri Montrul Multiespacio, que está en marcha desde abril en San Lorenzo 2513, el lugar que habitaron, hasta el último día de sus vidas, los padres de Silvia, los reconocidos pianistas y profesores santafesinos Mario Montrul y Edith Valeri, fallecidos en 2010 y 2017.
Pablo AguirreSilvia, quien también vivió en la casa hoy convertida en espacio cultural hasta los 25 años de edad, concretó esta iniciativa con la finalidad de conservar la rica historia artística de sus progenitores. De hecho, no tiene fines de lucro y está encuadrada bajo la figura de Fundación, a cargo de un consejo administrativo que encabeza Silvia.
“Esta idea se la había comentado a mamá en vida. Tanto ella como papá desplegaron mucho arte en esa casa, donde hacían siempre reuniones y recibían a distintas personalidades de la cultura. Cuando se lo comenté a mamá, ella estaba muy activa, pero también grande y enferma. Entonces lo comencé a desarrollar después de su fallecimiento”, contó en una entrevista.
Pablo AguirreAunque es abogada especializada en Derecho Ambiental y en Tutela del Patrimonio Cultural por la Universidad de Limoges, Francia, Montrul tiene pasión por las artes, especialmente por el teatro. De hecho, es actriz y promotora sociocultural. Cuando tiene que explicar qué fue lo que la motivó a crear Valeri Montrul Multiespacio no duda: “el amor hacia el arte, la enseñanza recibida de mis padres”.
“Lo que me impulsó fue la necesidad de ponerme a disposición de la comunidad y transmitir la pasión y el amor hacia el arte en todas sus manifestaciones que recibí de ellos. De vivirlo en carne propia desde que tengo memoria”. Es que Silvia nació en la “capital de la música”, Viena, mientras sus padres estaban allí por una beca.
Pablo AguirreAdemás de trasladar a la comunidad el legado de Edith y Mario, otro aspecto que motivó a Silvia fue la creación de una fuente laboral para todos los docentes que participan del proyecto. “Sacando, al contexto, al cual todos nos estamos adaptando, sería un desperdicio que ese inmueble quede en la nada con la historia que tiene”, aseguró.
En efecto, en lo que era una casa de artistas y hoy es un centro cultural, se conserva el vestuario usado por Mario y Edith en los distintos conciertos, tanto en Europa como Argentina. También los cuatro pianos que usaban, dos de cola y dos verticales, uno de ellos de origen alemán que fue fabricado en forma artesanal.
“Los bienes culturales que hay allí son innumerables”, remarcó Silvia. Entre ellos, partituras originales del compositor austríaco Alfred Uhl. Obras que fueron escritas especialmente para que Valeri y Montrul las ejecuten a dos pianos.
Pablo AguirreActualmente, el abanico de opciones que tiene el espacio incluye varias disciplinas. Está el taller de Ritmos Latinos a cargo de Julio Basilio y el de Fem Dance bajo la coordinación de Irina Rojas y Claudia Torres. También el de Cuerpo y Armonía que lleva adelante Fabiana Godano, el de Batería con Horacio “Hongo” Perrone, el de Guitarra y Ukelele desplegado por Facundo Zalazar el Artes Plásticas con Andre Ortman, el de piano Aparicio Alfaro, el de canto a cargo de Mercedes Robledo y el de teatro con la participación de Sergio Cangiano, Marisa Oroño y Fernando Belletti. “Es una propuesta que ha sido muy aceptada por el público”, aseguró Montrul.
Pablo AguirreTodos los talleres funcionan con profesionales que fueron seleccionados especialmente. Y con mucho profesionalismo. Por ejemplo, el dictado de las clases de piano están a cargo de un profesor que fue alumno de Mario Montrul. “Quiero que tengan la misma técnica. Siempre recuerdo que mis padres ponían énfasis en la importancia de una buena técnica, para evitar arruinar las manos de un pianista”, explicó Silvia.
“La particularidad del espacio es que se dictan clases en dos pianos donde, en forma simultánea. Está el alumno en un piano y a los dos metros el docente. O sea que dispone de su propio instrumento”, agregó.
Archivo El Litoral Edith Valeri y Mario Montrul, los recordados músicos que dejaron su legado en lo que hoy es el multiespacio.Edith Valeri y Mario Montrul, los recordados músicos que dejaron su legado en lo que hoy es el multiespacio.Foto: Archivo El Litoral
En este momento se encuentra habilitada la primera parte del multiespacio, pero está prevista una segunda etapa. La misma permitiría realizar distintas actividades al mismo tiempo, siempre y cuando sean compatibles, además de poder convocar a mayor cantidad de público y sumar nuevas opciones. Todo lo cual será con fondos propios, ya que para montar el centro cultural sus impulsores no recibieron ningún tipo de subsidio.
Archivo El Litoral Edith Valeri y Mario Montrul.Edith Valeri y Mario Montrul.Foto: Archivo El Litoral