Congelaron el vestido con el que Lady Di bailó con John Travolta
Historic Royal Palaces ha comprado el diseño de Victor Edelstein que dio la vuelta al mundo en 1985 y lo está conservando de la mejor forma posible.
Reagan Library
20:02
El vestido, ajustado y con escote sensual que deja ver los hombros, fue considerado algo atrevido para una princesa. Todo Hollywood se quedó sorprendido. El 9 de noviembre de 1985, Lady Di creó un nuevo momento para la historia al bailar con John Travolta en la Casa Blanca durante una visita a Estados Unidos. Travolta describió la experiencia como “un cuento de hadas”.
Right now the Isolation Room has a very famous resident: Princess Diana’s ‘Travolta dress’ (worn at the White House in 1985). A recent acquisition, the dress was frozen upon arrival, and will stay here a while longer before joining the rest of the collection ❄️ pic.twitter.com/0o4jCjepoj
El vestido, que ha pasado por varias manos en lo que lleva de vida, es propiedad de la institución Historic Royal Palaces -una fundación benéfica independiente de la casa real británica, que gestiona algunos palacios reales desocupados, entre otras cosas-, desde el pasado mes de diciembre. El desembolso por la pieza fue de 264.000 libras, lo que equivaldría a casi 300 mil euros, por lo que no extraña que su conservación sea más que rigurosa.
HRP ha comunicado que el vestido ha sido congelado, como parte de ese proceso de conservación del mismo, en la sala de 'aislamiento', junto a otras valiosas reliquias. La intención es la de evitar a toda costa que posibles ácaros o insectos puedan dañar la valiosa prenda. Se espera que en el futuro se exponga al público junto a otros objetos de la colección real, aunque ahora mismo todas las exposiciones permanecen cerradas a causa de la crisis del COVID-19.
Gtres
Foto: Gtres
La princesa Diana lució el vestido en otras cuatro ocasiones importantes, entre ellas un viaje oficial a Austria un año después, y para visitar la ópera en 1991. El destino de la pieza fue el mismo al que se enfrenta ahora de nuevo: una subasta. Fue la propia Diana quien sentenció el sino de la prenda cuando, tan solo dos meses antes de su muerte, lo puso a la venta. La intención de la princesa era donar los beneficios a asociaciones contra el sida y desde entonces ha ido de puja en puja.
El artífice del traje fue Victor Edelstein. El diseñador estuvo trabajando con Diana durante unos 11 años y la princesa solía frecuentar su tienda a menudo, situada en Kensington, en compañía de su guardaespaldas. Así fue como descubrió el vestido, Lady Di lo vio en granate por primera vez y pidió que se lo hicieran en azul, seguramente para poder combinarlo con su increíble colección de joyas de zafiros. El diseño, ajustado, de terciopelo azul marino drapeado, con escote bardot y falda de corte sirena, se abre a la altura de las rodillas con un volumen considerable y un elegante lazo de terciopelo azul en el lateral del vestido. A Diana le gustó tanto el resultado final que mostró su entusiasmo enseñándole a toda prisa el resultado al príncipe Carlos.
Cuando la princesa tomó la iniciativa de subastar el vestido por primera vez, lo compró Maureen Dunkel, una empresaria que pagó 420.000 libras por él. Lo mantuvo en su posesión hasta que, en el año 2011, cayó en la bancarrota. Entonces lo volvió a sacar a subasta, pero nadie lo compró hasta que pasaron dos años. En 2013 fue un individuo inglés quien decidió regalárselo a su mujer por 240.000 libras y se cree que esa fue la última vez que estuvo disponible en una subasta. En diciembre, la casa Kerry Taylor lo consiguió vender por unos 300.000 euros y ahora parece que HRP será su dueño durante mucho tiempo.