Jueves 14.9.2023
/Última actualización 16:58
El Coro Polifónico Provincial celebra sus 62 años con la interpretación de “Carmina Burana”, de Carl Orff. Con dirección general de Virginia Bono, se suman al festejo el Coro de Niños Sede Centro del Instituto Coral de Santa Fe y el Ensamble de Percusión del Instituto Superior de Música de la Universidad Nacional del Litoral (FHUC-UNL). El concierto será el sábado a las 20, en la Sala Mayor del Teatro Municipal “1° de Mayo” (San Martín 2020). La entrada es libre y gratuita.
La obra, escrita originalmente para solistas, coro y orquesta sinfónica, fue ejecutada por el Coro Polifónico con las orquestas de Santa Fe y Rosario en otras oportunidades. La versión que se ofrecerá esta vez es una adaptación supervisada por Orff para las mismas voces, pero instrumentada para dos pianos y percusión; por lo que a las agrupaciones corales y el ensamble, se suman al piano Franco Broggi y Matías Bustafán.
Para adentrarse en esta aventura musical, El Litoral dialogó con Virginia Bono, directora titular del Coro, y Mónica Salva, coordinadora técnica-administrativa del organismo.
Propuesta inicial
-¿Cómo surgió la idea de abordar ahora una obra de esta complejidad y sumando organismos?
Bono: -Septiembre es un mes especial para el Coro Polifónico Provincial, si bien es la primera vez que al frente del coro, como santafesina lo vengo siguiendo y celebrando desde que me acuerdo. El 21 de septiembre es el aniversario de la creación del coro
Bono: -En la celebración del aniversario tiene que haber un concierto que sea especial, que sea muy atractivo para el público y para el coro mismo. Que pueda poner al elenco en un lugar de jerarquía, de reconocimiento, de lucimiento.
La elección fue mía, pero es parte del consenso que el Coro hizo cuando me eligió: estaba esto mi proyecto en el concurso. Y si bien algunas cosas de la programación que presenta en su momento podrían haberse cambiado (y de hecho algunas tomaron otros tintes) esta pieza quedó.
Salva: -Porque tiene todo el encanto todo el encanto; y además el hecho de que van a participar otros elencos con nosotros: eso también es importante.
Bono: -Tiene que ver con valorizar también todo lo que son los talentos o las instituciones artísticas que existen en nuestro medio. Se hace en cooperación con la cátedra de Percusión del Instituto Superior de Música de la UNL, y los alumnos avanzados de la cátedra, que conforman el Ensamble de Percusión del Instituto. La pieza también lleva un coro de niños, en un par de números: convocamos a uno de los grupos de niños del Instituto Coral de la Provincia.
Hay un pianista del coro y un pianista invitado, porque lo que vamos a llevar adelante es la versión de cámara; no la versión orquestal. Está toda la percusión la orquesta está reducida en dos pianos.
-Que la hizo el propio Orff.
Bono: -A mí me gusta mucho esta versión: siento que permite el lucimiento de la parte vocal. Carmina Burana es una pieza que demanda mucha energía vocal: el coro está casi siempre en el extremo, ya sea por los registros vocales como por la intensidad de la música. Y a veces en las versiones orquestales es demandante de más.
En cambio esta versión de cámara permite que se puedan escuchar más algunos detalles que la pieza tiene; que tienen que ver con la articulación, con distintos timbres, con distintos colores vocales.
Salva: -Y además que todos los solistas son del Coro, muchos van a participar.
Bono: -La obra tiene tres registros solistas: un barítono, una soprano y un tenor. En esta ocasión vamos a tener tres sopranos y varias voces masculinas. Por eso también es como una fiesta; y sirve también, como fue el concierto pasado (“Románticos”), para demostrar el valor artístico que tienen los cantantes del Coro.
-Ahí también se hizo eso: ir variando en las partes solísticas.
Bono: -Exactamente: ni el concierto pasado ni este tienen personajes: no es la misma soprano la que está encarnando a fulana de tal, que hace que cuenta una historia. En las canciones profanas de Carmina Burana no hay un hilo conductor, sino que son secuencias: cada una de las secciones está mostrando algo de la vida que nos pasa; de esa rueda de la vida: el destino, la fortuna, en los primeros números; la primavera, el contacto con la naturaleza, el amor; las incursiones hacia el interior y las miserias humanas, como se da en la taberna; y un himno a la diosa del amor para finalizar. Todo eso es la vida, que nos que nos está rodeando y rondando a todos todo el tiempo.
Salva y Bono, unidas por la pasión de sostener este organismo público y de calidad, ofreciendo los más diversos y atractivos repertorios. Foto: Mauricio GarínColores profanos
-En el anterior concierto integral, el Coro interpretó junto a la sinfónica la Misa de Réquiem en re menor de Mozart; a su manera particular un paradigma de obra sacra. Y esta es la obra más profana posible.
Salva: -Para poner las dos caras.
Bono: -Y también para entregar la amplia variedad del repertorio universal. Este es nuestro undécimo concierto, y el Coro se presentó con programas variadísimos: hicimos música argentina, música académica de distintas épocas en el mes de abril, incluso algunas obras de música popular; se hizo también un concierto con piezas a capella de la bisagra del siglo XX, no con esta nueva modernidad. Se hicieron obras de autores románticos, pero del repertorio de lieder, de canciones camarísticas; ahora esta pieza.
Se viene el Réquiem de Verdi con la Sinfónica de Rosario, a fin de mes. Después otro concierto a capella de música contemporánea, de algunas culturas exóticas para nosotros, como los países bálticos. Se vienen varias actuaciones del concierto navideño, y vamos a cerrar el año junto con la Sinfónica, también interpretando “El Mesías” de Händel.
Salva: -Pensamos que el año que viene brindaremos otras cosas.
-Orff nació en el siglo XIX, creó en el XX. En esta obra hay una voluntad de tomar de tomar textos antiguos, y no es una música que se reivindique como del siglo XX, sino que vuelve hacia un clasicismo, va para atrás.
Bono: -Hay quienes lo llaman neoclásico. Compone Carmina Burana entre el 36 y el 37; a principios del siglo está esa visión por lo exótico, y después empieza la búsqueda de las raíces: algo que empezó también con Wagner y con todos hacia finales del siglo XIX. En esa época además se encontraron esos textos, esos códex, esos poemas, en dos monasterios ahí en Beuren, cerca de Múnich, y fue atrapante.
Después eso sigue su curso y por eso tenemos los músicos que empiezan a pensar en hacer la música “como en la época de”.
-Las interpretaciones “historicistas”.
-Creo que Orff se encantó con ese material literario; no sé cómo habrá sido hace cien años, pero todavía en algunos de nosotros está la creencia de que la Edad Media era una época oscura y hasta medio sosa; y en realidad este el hombre medieval no sólo veía su entorno, sino que veía más allá. Orff elige 24 poemas nada más; después utiliza otros de esos poemas en otras obras.
Bono: -Una síntesis que me parece que es la rueda de la vida; uno dice “la rueda de la fortuna”, pero es la rueda de la vida.
Salva: -Con toda la energía que tiene.
Bono: -Él tiene un lenguaje que puede entenderse como neoclásico, pero también un lenguaje que es que es propio en cuanto a su propuesta musical y pedagógica: Orff fue un gran pedagogo de la música, y ha planteado ciertos caminos que son reconocidos hoy en día como una metodología de enseñanza de la música.
-En la misma época, Alban Berg estaba “en otra”, por ejemplo.
Bono: -Me asombra el siglo XX, porque es un siglo de convivencias. Hasta el siglo XIX había un proceso lineal. Pocos años después la corriente italiana es la de la música concreta. ¿Cómo eso puede convivir con un dodecafonismo que está sucumbiendo...
-Con la música electroacústica.
Bono: -Incluso en “Carmina Burana” se ven ciertos números que parecen del cabaret de es zona germánicas de principios del siglo XX, de Kurt Weill. Eso hace que tenga tanta cercanía con el público la obra: es un sonido accesible.
Salva: -Y evidentemente es algo que el público estaba necesitando escuchar, porque insólitamente voy por la calle y la gente te pregunta: “¿Cuándo es que hacen ‘Carmina Burana’?”; cosas que no pasan con otros conciertos
Bono: -El “O Fortuna” suena en todos lados. Se la mostraba a los papás del Coro de Niños y me decían: “Esa la conozco de una película”.
Unir voluntades
-Hablabas de los atractivos de la obra. ¿Cuáles son los desafíos?
Bono: -Uno es el ensamble: son muchos cuerpos musicales que tienen que aunarse en una pieza que dura 65, 70 minutos; ese es un desafío para cualquier director, pero también para cualquier artista: poder darle la continuidad que la obra precisa y poder manejar la dinámica de la pieza. Cada una de las secciones tiene una dinámica y un color propios.
Siento que es un descubrimiento constante: del carácter que tiene cada una de las secciones. Personalmente, uno de los grandes desafíos es no hacer la versión que escuchamos en YouTube; esta es una obra que se ha popularizado tanto, que a veces se canta tarareado, como si no fuera importante lo que significa el texto. Hay motivos que los escuchás en las grabaciones que se cantan oscuros y misteriosos; y en realidad está hablando del rostro de la primavera, que se muestra con Flora, con Febo, con Céfiro, que es la brisa primaveral.
Entrar otra vez como artista (yo como directora, los cantantes como tales) al germen inspirador que es el texto, relacionarlo con la música y hacer una versión auténtica. Una versión que por supuesto tiene obediencia a lo que el compositor escribió, pero que no seguía únicamente por aquello que se hizo popular de oído.
-El desafío es ponerlo como si fuera la primera vez.
Salva: -No ponerle un piloto automático y largamos.
Bono: -Me gusta transmitirlo a quienes cantan conmigo porque siento que de esa manera también se apropian de una versión única particular y auténtica. Auténtica porque te es propia: que los 50 en el Coro Polifónico, los 15 chicos del grupo de niños, los siete percusionistas y los dos pianistas, estamos haciendo una versión absolutamente consciente, desde los aspectos musicales, técnicos y artísticos.
-Con el sello de cada uno.
-¿Cómo fue ensayar, con los niños y los percusionistas?
Salva: -Ella está acostumbrada a ensayar con niños. El tema es el poder ensamblar todo en lo que sucede siempre: que no tenemos ni sala ni tiempo para ensamblar todo.
-Primero hubo ensayos por partes.
Salva: -Exactamente, fragmentados.
Bono: -El Ensamble de Percusión empezó a trabajar cada uno de los estudiantes con su profesor; luego se reunieron con los profesores en Ensamble. Después estuve yendo a encontrarme con ellos, la segunda vez fui ya con uno de los pianistas.
Con el Coro de Niños también por separado, y luego empezamos a juntarnos recién en estos últimos días, que es cuando la fiebre “Carmina Burana” nos esa invadiendo.
Lengua escolástica
-¿Hubo algún trabajo especial por el tema de los idiomas?
Bono: -La pieza está compuesta en su mayor parte de textos del latín, escritos por goliardos en los siglos XII y XIII; también hay algunas palabras y frases en alemán medieval, en alto alemán medio, y también algunas pequeñas expresiones en francés antiguo.
Ahí hay decisiones interesantes sobre la pronunciación. Había dos opciones: una pronunciarla como seguramente Orff la imaginó en su época, una pronunciación del latín germánica, regionalizada en lo alemán; o quizás como ha sonado en latín en la época de los goliardos, en la Edad Media. Así que estuve estudiando bastante con una profesora de latín, consultando con colegas; y tomé la decisión de que vamos a utilizar la pronunciación histórica: la que los estudiosos creen que sonaba en la Edad Media en toda Europa. Que es la eclesiástica romana, porque el latín en los siglos XII y XIII es la lengua que parte de la Iglesia Romana; es la que se habla y se introduce tanto en los monasterios como las universidades; y que por estar hablado en esos ámbitos es el latín que entendía la gente.
-Los goliardos eran en muchos casos estudiantes de las universidades.
Bono: -Y muchos quizás no exactamente universitarios, pero era clérigos formados en los conventos, en los monasterios. Quiénes han escrito esos textos han salido de esos ámbitos, donde la lengua latina con esa pronunciación era lo habitual.
No era el latín de épocas anteriores, con el que tendríamos que usar una pronunciación restituta, en la que se restablece el latín de Cicerón. Por ejemplo está “Fortuna” y no “Fortunae”: ese es un indicio de que el latín no es el del Imperio Romano, clásico.
Destacados
Solistas: Fernando Morello (bajo), Raúl Escobar (tenor), Mario Martínez (tenor), María Alejandra Pistoni (soprano), Andrés Mernes (tenor), Paola Tourn (soprano), Alejandro Zurbriggen (bajo), Micaela Musto (soprano).
Pianistas: Franco Broggi y Matías Bustafán.
Ensamble de Percusión del ISM-UNL: Josefina Puebla (timbales), Lucía Ciccazzo, Emiliano Rodríguez, Lautaro Sotelo, Matías Olguín, Santiago Heredia, Joaquín Gamarra.
Coro de Niños Sede Centro del Instituto Coral de la Provincia: Directora: Virginia Bono; asistente de dirección: Sofía Biolé; técnica vocal: Daniela Romano.