Miércoles 10.2.2021
/Última actualización 15:11
“Una vez en un bar de Madrid, pedí un gintonic y el mozo me respondió: ‘Pero no era que usted no tomaba más?’”. La anécdota la cuenta el actor Enrique Pinti y se refiere a su participación en “Esperando la carroza”, donde interpreta a Felipe, el primo alcohólico de los hermanos Musicardi. Es que el film de Alejandro Doria, estrenado el 6 de mayo de 1985, se convirtió en un fenómeno que trascendió el tiempo. Tanto que sus frases (“Tres empanadas que le sobraron de ayer para dos personas”, “menos mal que la charlatana de al lado me imita en todo, yo hago puchero, ella hace puchero, yo hago ravioles, ella hace ravioles”) ya forman parte del vocabulario nacional.
Pero la cosa va más allá. Es tal el grado de fanatismo, que hay un grupo de personas que están vinculadas en las redes sociales y rinden culto al film. Saben de memoria todas las frases, se disfrazan de los personajes para hacer videos a modo de tributo y cada tanto recorren las locaciones del barrio porteño de Versalles donde se rodaron distintas escenas de la película. Un fenómeno que no tiene antecedentes a nivel nacional y que los directores Mariano Frigerio y Denise Urfeig exhiben en “Carroceros”, documental estrenado en Cine.Ar que, además, contiene entrevistas con varios de los actores que protagonizaron a los integrantes de la familia Musicardi, como Antonio Gasalla, Luis Brandoni y Mónica Villa.
En una entrevista, Urfeig contó detalles sobre la realización del documental, que esperan estrenar en salas durante 2021.
-¿Tenés el recuerdo de la primera vez que viste la película “Esperando la carroza”? ¿Qué te pareció?
-Yo no era fanática de la película, el fanático era Mariano. Me interesaba el tema del fanatismo y documentar todo el fenómeno. Pero no había visto muchas veces la película. No me acuerdo cuando la ví por primera vez. Si me acuerdo cuando la vi para arrancar el documental. Y entendí porque era una película tan trascendente. Su guión, sus diálogos, su humor negro no están en otras películas.
Ah! Cine-Logró conectar con el público como pocas películas nacionales.
-Creo que es la única. No existe otra con la que haya sucedido un fenómeno como este. No hay fanáticos de otras películas que se junten, que se la sepan de memoria, que se disfracen. Se puede discutir si es la mejor o es la peor, se puede discutir su calidad cinematográfica, pero no se puede discutir que es la única película de culto.
-¿Cómo dieron con la asociación fanáticos del film que aparece en la película y por qué deciden contar esa historia en un documental?
-Lo que se cuenta es exactamente lo que nos pasó. Empezamos a ir al barrio, a la casa. A sacar fotos, a hablar con los vecinos. Y fueron los mismos vecinos los que nos contaron que había gente que iba, recorría y hacía tours por la zona. Instantáneamente los buscamos y nos encontramos un grupo enorme de gente, que hoy tiene como 22 mil integrantes que solo hablan con diálogos de la película. Por ejemplo, si hay un día de mucho calor, ponen todos comentarios sobre eso pero con frases de “Esperando la carroza”. Nos pareció fascinante. Increíble. Incluso Mariano, que es súper fanático del film no los conocía. Así empezamos a ir hacia los pilares. Entrevistamos a Marcos, el creador del grupo. A Matías, que es el que hace los tours. A Enzo y a Mariana, que hacen un dúo que se llama los Musicardi, que hacen videos, Enzo como Mamá Cora y Mariana como Elvira. A partir de esa investigación fuimos dando con todos ellos.
Ah! Cine-Los integrantes de este grupo jóvenes, es decir que vieron la película mucho después de su estreno.
-Marcos, que es el creador, tiene ahora 29 años. Creo que el 90 por ciento de ese grupo y de los carroceros en general, porque obviamente hay miles que no están en ese grupo, o no habían nacido en 1985 (cuando se estrenó el film) o eran muy chiquitos. El fenómeno se fue dando después, cuando llegó a la televisión, al VHS y después al DVD. Después, las redes sociales le dieron esa cosa de popularidad total. Pero todos son jóvenes, incluso hay niños. El documental muestra que hay carroceros que son los hijos de los que la vieron en los ‘90.
-Es un universo increíble.
-Y sus integrantes son muy distintos. Son de clases sociales distintas, de edades distintas y de lugares distintos del país. No hay un perfil muy claro del fanático de “Esperando la carroza”. Eso es interesante también.
Ah! CineUn barrio detenido en el tiempo
-¿Cómo está esa parte de Versalles en la que se filmó la película? ¿Cambió mucho o sigue similar a 35 años atrás?
-Está exactamente igual. Es un barrio de Buenos Aires bastante alejado, es casi provincia. Y es de esos barrios que son como pueblos. No hay recambio de gente. Los vecinos con los que hablamos, viven ahí desde hace más de 40 años y casi todos habían participado en el rodaje de alguna manera. Habían prestado algo o sus padres habían participado en la escena final de los viejitos. Es un barrio muy tradicional que está igual.
-Algo que contribuye al aura del film.
-En el tour que hacen una vez al año recorren esas locaciones que son muy reconocibles porque están muy cerca. Se paran en cada lugar y recrean las escenas. Las fachadas de las casas están idénticas. En el documental mostramos, por ejemplo, la escena de las cuñadas que caminan tomando el helado y hacemos la misma toma nosotros. Y es una esquina que no cambió en nada.
-Algo que señalabas en una entrevista es que, cuando hablaron con los actores para el documental, muchos de ellos no tenían conciencia de lo que habían generado con la película. Incluso alguno estaban sorprendidos con el nivel de fanatismo.
Ah! Cine-En las entrevistas, Mariano les contaba y todos se sorprendían. Obviamente saben que hay fanáticos, porque los paran por la calle. Brandoni dice que no hay un día que no le digan la frase de las “tres empanadas”. Todos tienen anécdotas increíbles, pero no sabían del fenómeno, de los grupos, de los tours. Incluso Diana Frey, que es la productora de la película, a quien también entrevistamos, decidió ir a uno de los encuentros para ver todo eso. Fue con su marido y no lo podía creer. La actriz Cecilia Rosetto también fue. Porque no sabían. Es un fenómeno que, en general, se desconocía.
La magia de los Musicardi
-¿Cómo se explica que se haya convertido en film de culto?
-Es lo que intenta responder el documental. No hay una sola respuesta. Es una combinación de cosas que se fueron dando e hicieron algo medio mágico. Empezando por el guión, que es muy costumbrista y se presta a la identificación. Creo que toda familia rioplatense tiene algo de los Musicardi. Tiene mucho humor. Y también mucho drama. El tema de los adultos mayores es algo que, en algún momento, a todos nos atraviesa. Después, creo que los actores hicieron magia con el guión.