Miércoles 23.3.2022
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Pronto a estrenarse “Granizo”, una película que él protagoniza, Guillermo Francella brindó una entrevista en la que hizo un repaso de su carrera, de las dificultades que la pandemia de coronavirus ocasionó al mundo del teatro y la ficción y sobre la actualidad política y económica del país.
Consultado sobre cómo ve la realidad argentina, el actor con más de 40 años de trayectoria le dijo a Clarín: “El panorama es bastante desolador. Es un momento muy especial y no de ahora, porque si no implica pensar que sólo tiene que ver con este presente. Lo que nos sucede es algo digno de estudio, no debería pasarnos”.
Y agregó: “No puedo pronosticar porque no me gusta ser escéptico ni agitador. Hoy veo a muchos personajes usando términos muy dolorosos y yo nunca fui ni antidemocrático ni desestabilizador con mis respuestas. Pero que tengo un grado de tristeza y escepticismo, lo tengo, es innegable”.
“El estancamiento, lo que cuesta crecer en nuestro país, el criterio para llevar a cabo las cosas... Pero quiero ser optimista, quiero creer que esto puede cambiar porque si no es devastador, no me levanto más a la mañana. Yo vivo con la misma fuerza y energía que toda la vida, pero por momentos la situación te diezma. ¿A quién no? A veces ni quiero oír las noticias, sobre todo si tenés hijos jóvenes con ganas de avanzar... Aspiro a que esto se modifique. ¿Quién lo llevará a cabo? Dios dirá”, reflexionó Francella.
En otro tramo del reportaje, uno de los protagonistas de El Secreto de sus ojos, señaló: “Cuando éramos jóvenes, te sentabas en una mesa con diez personas, cada una tenía su pensamiento y no existía la agresión verbal que hay hoy en día, esa cosa tan detractora para con el otro por no tener tu misma ideología, esa cosa vomitiva que no llego a entender”.
Cuando se le preguntó por las consecuencias que provocó las restricciones impuestas en la pandemia en el rubro donde él se mueve, contestó: “Cuando se declaraba la esencialidad en las actividades sentí que nuestra profesión no era tenida en cuenta. Y el entretenimiento fue vital en pandemia. La obligación de quedarte en tu casa hacía que creciera la necesidad de ver series, películas, espectáculos...”
“Me hubiera gustado un poco más de flexibilidad para nuestra profesión, que terminó siendo muy castigada. Y lo digo sabiendo de toda la vida lo que es este oficio. Tengo hijos actores, se los advertí: ‘No vivan del espejo mío porque no es la verdad, van a estar boyando mucho tiempo o van a tener continuidad hoy y mañana no...’”, añadió.
En ese sentido, Francella consideró que “cuando aflojaron los protocolos, la convocatoria en las salas fue buena. Como siempre, a algunos les fue muy bien y a otros, no tanto. Pero en Buenos Aires hay obras que caminan como en las mejores épocas. En el cine no. Todavía no hubo un acercamiento masivo a las salas”.
Al referirse al mundo de las series y películas, el actor opinó: “En la televisión de aire, ficción nuestra casi no hay. Vemos una invasión de novelas de otros países y yo entiendo a los directores de programación, porque invierten el cuarto del dinero que requeriría una producción local y con eso logran el encendido necesario para vender tanda publicitaria y que la rueda siga girando. Las propuestas nacionales son básicamente programas de entretenimientos, pero estoy convencido de que es necesario más ficción nacional”.