El Litoral | Pablo Rodríguez
“Montaña Rusa”, “Nueve reinas” o “Iluminados por el fuego” son solo algunos títulos en la carrera artística del actor. A los 22 años “explotó” su popularidad y no paró hasta darse cuenta que tenía un problema. Hoy lucha contra las adicciones y recorre el país con su testimonio.
El Litoral | Pablo Rodríguez
Son las 16:40 del martes. Alicia Dalleva, la organizadora, abre su whatsapp y le pregunta dónde anda. Enseguida contesta: “Ali, estoy a 10 minutos de Venado Tuerto. En media hora nos vemos”. Es la voz de Gastón Pauls (47), que está recorriendo el sur santafesino y se dirige a la localidad de San Eduardo.
El reconocido actor salió hace poco del silencio. Estuvo algunos años aislado tratando de encontrar un remedio a sus problemas. Caminó por el borde de la muerte y la salvación en esos días oscuros fueron Dios y sus hijos.
Paradójicamente, siendo consumidor de cocaína y marihuana, creó una fundación para ayudar a pibes en situación de calle, en el 2003. Arrancó con 40 y hoy le da una mano a casi 4000.
Desde hace dos años, viaja por el país sin vergüenza de contar el problema por el que está tratando de salir. Narra en primera persona su infierno para que nadie más baje a él. Quiere crear conciencia en este sentido.
En exclusiva para El Litoral, Pauls contó que las campañas que se plantan para hacerle frente a las adicciones son muy “frías”, y por eso él apuesta a llegar de otra manera con un mensaje diferente. “El gran problema de las adicciones es creer que te ayudan a pasar momentos, cuando en realidad terminan mostrando las garras”, dijo en primer lugar.
El actor aseguró que hay gente que se da cuenta rápido que está en el “medio del pantano”, y otras que lo reconocen a los 30 años: “A mí me costó muchos años darme cuenta que tenía un problema. Y cuando lo hice, me llevó varios años más aceptar que necesitaba ayuda. Es muy difícil salir solo de una adicción”, explicó.
El recordado galán de TV, pasó casi 20 años de su vida consumiendo y estuvo cerca de morir. Pauls pasó días sin dormir, solo consumiendo. Ahí se dio cuenta que tocó fondo: “Levanté la cabeza y le pedí a Dios que me saque. Y me sirvió. No propongo que ese sea el camino, pero trato de compartirlo a los demás”, aclaró.
Una segunda oportunidad
El ex de Nancy Duplaá y Agustina Cherri, estrenó recientemente la película basada en la vida del pastor evangélico Luis Palau, a quien “conoció” en el 2011 mientras grababa “Ser Urbano”. No se declara evangélico, aunque suele frecuentar los templos y entablar amistad con los líderes de las congregaciones.
“Lo de Palau fue algo divino. Después de estar limpio y no consumir, las cosas que van pasando son más lindas que las otras. Que me llamen para hacer la película fue algo hermoso. Por eso agradezco a la gente que está a mi lado”.
Sobre su paso por el departamento General López (estuvo en Firmat, La Chispa, Maggiolo y San Eduardo), sostuvo que los pueblos más alejados de las grandes ciudades tienen “cierta pureza” y no están tan complicados con el tema de las drogas. Aunque admitió que la droga va llegando lentamente y que se puede trabajar sobre la prevención en las pequeñas comunidades.
“En las ciudades está más desmadrado el tema. Yo vi pibes de seis años consumiendo paco a cambio de juguetes”, reconoció.
En las localidades que visitó en el sur santafesino, dejó salir las emociones ante el testimonio de adictos en recuperación. Entiende que se están “pasando la antorcha” en la lucha y que no le avergüenza explicarlo públicamente: “Es un buen primer paso. Me llevo el alma más llena de lo que la traje”, aseguró.
“Siento que tuvo un segundo nacimiento en la vida. Lo más lindo que tengo ahora son mis hijos. Voy a luchar y trabajar día a día para no volver ahí. Y que nadie más baje”, afirmó.