Resulta que el verdadero Guillermo Andino contó hace unos días al aire – como si fuera algo gracioso – que acordó a escondidas con el obstetra de su esposa Carolina Prat “adelantar” la cesárea de su hija porque él quería ir a la cancha y el profesional tenía un importante partido de golf. La anécdota desató una ola de quejas y acusaciones de “violencia obstétrica” para ambos, aunque luego Andino salió a desmentirse y a aclarar que la decisión fue consultada previamente con su esposa, quien, a su vez, apoyó esta nueva versión de los hechos.
En tanto ocurrían estas cosas, en el mundo de las redes sociales se daba un fenómeno paralelo: hay una antigua cuenta fake (falsa) de Guillermo Andino en Twitter, administrada por un usuario anónimo que reconoce admirar al verdadero Guillermo. La cuenta se llama @AndinoOkay y tiene altibajos de actividad, según refleja los episodios graciosos de la vida del Guillermo real.
Pues tras las repercusiones mediáticas de los dichos del Andino verdadero y algunas alusiones a la cuenta fake de algunos usuarios como Malena Pichot, en las últimas horas el Andino falso ha resurgido en tendencia porque muchos se lo confundieron con el original y lo atacaron por sus dichos.
El administrador de la cuenta falsa aprovechó el impulso y tomó el tema con mucho humor, pero este jueves se conoció que el Andino original “demandará” judicialmente al falso porque lo hace quedar “como un salame”. Como era de esperar, no solo le dio más publicidad a la cuenta apócrifa sino que los twiteros se pusieron inmediatamente del lado del falso Andino y lo defendieron con memes.