El Hotel de los Famosos: Silvina Luna debió quedar internada por una descompensación
Entre conflictos, competencias y discusiones fuertes, se definieron los dos duelistas que este viernes competirán por la permanencia en el programa.
Gentileza D.R
10:39
Tras el desafío de la semana entre los miembros del staff, Silvina Luna comenzó a sentirse mal. “Después del juego, me fui a bañar y me empecé a sentir mal, con mucho dolor de cabeza, palpitaciones. Me tomaron la presión y la tenía muy alta; y yo suelo tenerla baja”, les contó la actriz a Majo Martino y Sabrina Carballo. Y siguió su relato: “Me asusté, me puse nerviosa. Lo más probable es que me haya deshidratado en el juego. Por eso tenía la boca seca”.
Luego, le contaría a Melody Luz: “Después, no comí nada, hasta hoy en el desayuno. Me pusieron suero para hidratarme y me dieron una pastilla para bajar la presión, porque no me bajaba. Vinieron los médicos, me hicieron un electro. Hoy me levanté y me había bajado, pero me volvió a subir”. Al ir de nuevo a la enfermería para que le sacaran sangre descubriría que, además, tenía unas líneas de fiebre.
Al llegar los resultados, la médica le informó que muchos valores, incluido el de la creatinina, no estaban dentro de lo esperable. Al enterarse, la actriz rompió en llanto. “No me quiero ir”, se la escucha decir, mientras se recuesta en la camilla del consultorio.
“Me dieron los niveles elevados, así que me voy a internar ahora para que me nivelen”, les contó a sus compañeros entre lágrimas. “No quiero llorar... Ya estoy acostumbrada a esto; son episodios que tengo cada tanto. Pensé que acá lo iba a poder sostener”. En diálogo con Leandro “Chino” Leunis, agregaría: “Empecé a sentir un desgaste muy, muy grande, además de las lastimaduras y las cortaduras. Y tenía los ojos muy rojos. Hablé con mi médico personal y me recomendó que me vaya de acá. Y sé que si me interno ahora, voy a poder recuperarme y si no voy, es un riesgo grande”.
Mientras la mayoría de sus compañeros despedía a Luna, Kate Rodríguez decidió quedarse sola en la habitación. “Si estuviera en su lugar, no me gustarían los abrazos, los besos... Odio las despedidas, ese momento dramático. No me gusta y no me hace sentir bien”, fundamentó su ausencia. Estévez, Caniggia, Galván y Queijeiro tampoco estuvieron presentes.